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Estaba arreglando mi uniforme para la prepa mientras pensaba lo que Lili me había dicho, seguía sin encontrarle coherencia a sus palabras; mañana entrabamos a la prepa y habíamos quedado en que yo la recogería de su casa para ir juntos. No había vuelto desde el lunes y sólo había tenido noticias de ella por su WhatsApp ya que habíamos platicado un poco, pero no nos habíamos vuelto a ver, cuando le proponía vernos me decía que estaba ocupada y que nos veríamos el lunes. No había vuelto a mencionar el tema tan extraño que habíamos tocado en mi cuarto, pero a mí ya no me importo porque pensaba que sólo eran ideas suyas.

Alguien me saco de mis pensamientos.

-Mateo. Mateo que me hagas caso. - Dijo Alice, mi hermana mayor.

Itzitery y ella eran gemelas, pero ambas eran la contraparte la una de la otra, mientras que Alice prefería traer ropa de colores, vestidos, blusas ligeras, zapatos abiertos o de piso, el cabello un poco corto y en su castaño natural, ella era más bien entusiasta, tenía mucha energía en todo momento, siempre estaba riendo, se mostraba alegre y esa alegría abrumaba de vez en cuando, le encantaba la moda, el diseño y la fotografía.

Itzitery prefería traer ropa oscura, chaquetas de cuero, botas militares y pantalones con cadenas que le daban el aspecto de chica ruda, su cabello era algo largo, le llegaba por debajo de los hombros, en este tenía dos mechas de un morado oscuro, era seria, fría en la mayoría de ocasiones, le encantaba el orden, la música, y el silencio, solía dibujar lo que se le viniera a la mente, por ello su cuarto tenía plasmados diversos murales.

Ambas coincidían en el gusto por la mecánica, la aventura y el deporte, además de que eran prácticamente una copia de mi madre, al igual que ella su cabello y ojos eran castaño claro, ondulado, de estatura alta y piel clara, a pesar de que Itzitery estaba mas broncea por el tiempo que pasaba fuera, normalmente haciendo algún deporte acuático.

-¿Qué pasa Alice? - Conteste mientras continuaba doblando mi suéter.

-Pasa que estas perdido amigo – Se mofo soltando una risita y al notar mi cara de pocos amigos se calló – Bien, no estás de humor, mejor me voy. Solo baja a cenar.

Sin decir más se fue dejándome solo.

Esa noche sí que pude dormir y logré levantarme temprano para ir a la escuela.

A la mañana siguiente bajé a desayunar y después fui a recoger a Lili a su casa.

-Listo para entrar a la prepa - Dijo cuando salió de su casa, pero no le conteste, me quede sorprendido al verla, estaba pálida y tenía ojeras.

-Pequeña - Hablé cuando por fin pude hacerlo - ¿te paso algo? ¿te sientes mal?

-No te preocupes, sólo pase una mala noche - Dijo y me tomo del brazo - ¿vamos?, antes de que se nos haga tarde - Sólo atine a asentir y ella me miro - Hey enserio, estoy bien, solo dormí mal.

-Está bien, confío en ti - La abracé, no supe cómo, pero al abrazarla sentí algo en su espalda, como si fueran plumas. Le reste importancia cuando ella se acuno en mi pecho, un gesto que normalmente hacía cuando estaba estresada o asustada por algo.

-Vamos que se nos hace tarde - Dijo cuando llevábamos un rato abrazados comencé a reír y la jalé, la prepa no quedaba tan lejos, pero tendríamos que apresurarnos para llegar temprano.

Cuando llegamos a la prepa nos dieron ordenes de elegir nuestros casilleros y Lili y yo los elegimos en un pasillo un poco apartado de los salones.

Dieron el timbre y entramos a clases. Como todos los años me senté junto a Lili, el maestro que estaba dando la clase decidido que la persona al lado nuestro sería nuestra pareja de trabajo.

Un Ángel Caído.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora