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Todos mirábamos el cuerpo de nuestro amigo, Ailani, Adley y Zyra habían comenzado a llorar, nosotros intentabamos darles consuelo, sin mucho éxito. Mientras tanto, los chicos habiten estado buscando que le había quitado la vida a nuestro amigo.

- No pueden debolversela... - susurro Ailani abrazada a Kenric. - hagan lo que hicieron con Drac en el Bastión.

- No podemos... - dijo Kilian - el aparato le quito el alma, no podemos recuperarla.

- Estantotalmente seguros. - dijo Baylen.

- Totalmente. - dijo Izaro con voz débil mientras abrazaba a Ragnar.

- Le hemos hecho una promesa. - dijo Coen mirándonos. - le prometimos que saldríamos adelante y eso haremos.

Todos lo miramos con dolor pero a sentimos, cumpliríamos la promesa de seguir adelante sin importar lo que pasara. Nos pusimos de pie y miramos a los demás.
Sin decir nada Zyra se acercó a Nic se coloco de rodilla, le tocó la frente y cerró los ojos. Segundos después lo que había sido el cuerpo de Nic eran sólo cenizas.

- Andando. - dijo Zyra y su gemelo la siguió.

Sin decir nada más todos nós encaminamos hacia lá salida de la sala. Comenzamos a caminar por los pasillos del Qanli Cehennem mirando a los demonios, quienes ahora en vez de atacarnos salían corriendo en dirección contraria a nosotros.

- Esto es extraño. - dijo Izaro mirando hacia los lados. - ¿por que escapan? - nos preguntó.

- Porque las espadas que llevan significan poder, los identifican como los herederos, la profecía dice que al pasar los herederos cualquiera que hubiese hecho un acto malévolo, ya fuera ángel o demonio, seria asecinada a manos de Güc y Ceza, las espadas gemelas de los herederos. - dijo Sam mirando las espadas. - Güc es tuya, Kilian porta a Ceza.

- Vaya, saben mas de nuestro destino que nosotros mismos. - río Kilian.

- ¿Por qué tus ojos son del color del fuego? - preguntó Ragnar mirando a Izaro. - los tuyos también han cambiado Kil - dijo extrañado.

- ¿Qué? - dijeron los hermanos extrañados.

- Es cierto, sus ojos son del color del Fuego, es como si tuvieran llamas en los iris. - apuntó Sam mirándolos confundido.

- Es como si se hubieran transformado, - dijo Drac. - se ven como... Como si algún tipo de fuego extraño los envolviera... - dejo la frase en el aire un momento antes de que Adley hablara.

- Deben de ser las espadas, leyenda dice que al tomar sus regalos, los herederos ganarían algo... - hizo una pausa antes de continuar. - Por eso los "regalos" fueron tan codiciados por miles de personas. - dijo haciendo comillas con los dedos en la palabra regalo.

- Debe de ser algún tipo de poder, por eso todos lo buscaban... - dijo Zael antes de que su hermana lo interrumpiera.

- El libro mestizo puede ayudarles, tiene todas las leyendas relacionadas con los herederos y el linaje. - dijo mirándonos a todos con seriedad. - Pero por ahora debemos de concentrarnos en salir de aquí.

- Zyra tiene razón, - apuntó Axzen. - debemos de salir de aquí lo más rápido posible, los demás nos deben de estar esperando en el Bastión.

Todos a sentimos de acuerdo con lo que el chico decía, Izaro y Kilian tomaron la delantera y nos guiaron hasta el elevador por el que habíamos llegado. Al llegar a este me di cuenta que los Quirmaq que Nic había atacado seguian en el suelo inconscientes, aunque compensaba a pensar que estaban muertos, no pude evitar llenarme de nostalgia al nota que mi amigo ya no estaba con nosotros.

Un Ángel Caído.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora