Cap. 35: Panzas y confesiones

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POV Matthew

Recorrer las calles que ya conocía desde hace años me traía algún tipo de paz. Me hacía estar en momentos felices de mi vida, cuando lograba hacer un logro y padre me llevaba a la heladería a buscar algo para comer, solos, él y yo... Era una de las cosas que extrañaba de haber crecido y ahora tener otra responsabilidad a mi cuidado.

Esperaba estar presente para él y tener momentos importantes, que me recordara tal y como yo lo hacía con mi padre. No obstante, sentía la opresión en mi pecho y es que decían que uno para convertirse en padre tenía que sacrificar cosas porque los hijos lo eran todo, pero yo sabía en el fondo que el sacrificio lo hacía más por el bien del bebé que por mí.

En mi vista estaba mi casa, tan grande y tan llena de personas que me hacían feliz, que dejaría para embarcarme en un nuevo camino, en una nueva idea y perspectiva de lo que era vivir.

Me sentía abrumado, eso era.

Hasta que un auto me rebasó y dejé de pensar en mis cosas privadas.

Respiré profundo. MICHAEL. Debía ser él.

Y sin poder contar los segundos, el auto se estacionó enfrente de la casa, dejando a Michael y a Jerry en la entrada.

Seguramente habían quemado una casa por la expresión terrible que poseía Michael en su cara, lo sabía y lo conocía, había hecho alguna cosa mala. El transporte que los había dejado, decidió estacionarse, algo yo también hice.

De la camioneta bajaron Nicholas y su mayordomo. Me lo temía desde el inicio, solo a Brown se le ocurriría hacer una travesura con mi hermano y traerlo a casa como si todo el día hubiesen estado estudiando para algún examen importante, como si lo que hubiesen hecho estuviese correcto.

Terminé de apagar el auto para ver a cuatro miradas fijas en mí. Todos tenían una sonrisa tan grande como el recorrido de Oeste a Este que trazaba el Sol cuando aparecía y se iba, pero se quedaron expectantes hasta que baje de mi carro.

-Queremos mostrarte algo. - dijo Michael.

-Cambiará tu vida. - dijo Nicholas- Créenos.

Suspiré, conteniendo lo que ya me imaginaba que dirían y asentí con la cabeza, haciendo señas para que me siguieran adentro de la casa.

Ellos me siguieron obedientemente hacia la sala de estancia, hasta que Michael susurró un "Es privado", haciendo seña de que ni Tyler, ni Taylor debían o podían saber. Taylor me dirigió una mirada de confusión a lo que Tyler respondió con una fulminante.

-Bueno, entonces espérenme en mi cuarto mientras voy a buscar algo para tomar. - dije.

Asintieron y subieron las escaleras mientras yo iba a la cocina a servirme algo de tomar para pasar las noticias que tenía Michael, pero mi paso fue interrumpido por Taylor que se me interpuso entre el arco que pasaba del pasillo a la sala.

-¿Te encuentras bien?- me dijo a lo que yo sonreí.

-¿Por qué no habría de estarlo?- le dije para seguir con mi camino y parecía que la había espantado, porque me dejó seguir para ir a parar en la nevera de mi cocina.

Mientras me servía jugo, mi sangre hervía. Taylor que no me había hablado durante meses ahora parecía preocupada por mí, pero todo seguía igual, ella con Tyler, yo con Sarah y los sentimientos que yo experimentaba los callaba y los trataba de arrebatar de mi corazón, porque después de que naciera el bebé tenía que renunciar a lo único que no quería renunciar.

Mis pensamientos pasaron a recuerdos, al olor de su cabello y la ternura de sus ojos. Su personalidad que cada vez me hacía preguntarme si yo estaba en lo correcto y que, aunque ella no tuviese la razón, mi corazón solo decía que ella me podía decir cosas que yo sabría que no son así, pero las aceptaría para vivir en su mundo y ser parte de él.

Un Año Viviendo Con Los Black's (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora