Capítulo 22

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A la mañana siguiente, la única luz que pudo aparecer en su habitación, fue cuando abrieron la puerta. No sabía que hora era, y al recién abrir los ojos por el cansancio de la noche pasada, se encontró con sus abusones. Tiritaba de tan solo verlos. 

Mick tenía una bandeja en sus manos, traía algo que parecía ser comida.

—El jefe nos ha dicho que no podemos tenerte sin comer, porque si no lucirás mal. Más yo creo que lucirás precioso de cualquier manera. —Su sonrisa era macabra, incluso podría dar más miedo que la que tuvo siempre en la cara el mismísimo príncipe del crimen. 

Había perversión. Si, era posible que Joker hubiera matado a millones de personas, pero el hombre que tenía enfrente, estaba enfermo, abusando en tan pobres condiciones, y preparando a alguien para una subasta en el bajo mundo. Eso era algo retorcido, que siquiera a él, podría haber se le ocurrido. 

Luego de aquella comida obligada, Mick le desató las manos y pies, que tenía detrás de la espalda, le besó las marcas de manera asquerosa, pero Joker solo se mantenía callado, no quería hacer ningún tipo de movimiento que lo volviera a poner en peligro, hasta que ya simplemente ese demente volvió a pasarse de raya.

— Hoy Jan salió de casa para ir a buscar unos víveres, por lo que solo estamos tú y yo, y quiero probarte entero, solo yo esta vez. —Agarró al payaso con la intensión de comenzar a tocarlo, pero en un movimiento casi inconsciente, lo alejó. Eso hizo enojar a Mick, pero respiró, y volvió a intentarlo— Vamos, no quiero lastimarte, puedes dejarme follarte y lo disfrutarás. 

—Jamás disfrutaré algo que hagan ustedes, enfermos.

En dos segundos, Mick se puso de pie, agarró del cabello a Joker, y con una snrisa perturbadora lo dirigió hasta una sala que estaba junto a la otra. 

—Voy a castigarte Joker, no quería hacerlo, precioso, pero me has obligado. 

ADVERTENCIA:.

La habitación a donde lo llevaba era de paredes blancas, tenía una ducha, un baño, y lavabo, y una pequeña ventana, por la cual no valdría para nada intentar salir, era demasiado pequeña. 

Mick lanzó al payaso a la fría cerámica. Mientras dejaba que el agua cayera sobre Joker, él se quitaba su ropa. Agarró su cinturón y comenzó a golpearlo, en su espalda y glúteos, pensando que habría forma de quitar aquellas marcas antes de la subasta. 

Joker lloraba, gritaba, y por mucho que quisiera huir del lugar, su abusador era mucho más grande y fuerte que él. Luego de maltratarlo por mucho tiempo, se acercó a este, agarrándole la cadera y penetrándolo con fuerza, un grito desgarrador salió de las cuerdas vocales del menor, mientras que lo obligaba a besarlo, y embistiéndolo sin piedad alguna. Cuando Mick acabó, nuevamente dentro de él, lo dejó para que terminara de bañarse y luego lo volvería a la habitación. 

Joker no tuvo fuerzas para limpiarse, mientras la sangre y el semen se mezclaba con el agua fría que ahora salía. Odiaba esto, y comenzaba a odiar su propio cuerpo. Lo repudiaba, tanto como a sus agresores. 

La broma que salió mal |Omegaverse| BatjokesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora