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Si bien Izuku no había cuidado a niños pequeños, pero recordaba algunos cuidados de su madre hacia él.

El de la cicatriz al estar en los brazos del pecoso no sentía aquella incomodidad que cuando estaba con aquellas gemelas.

Cuando bajaron del elevador caminó hasta su habitación llena de figuras de All Might, sabía que la ropa del medio pelirrojo era demasiado grande para que la usara ahora, y la de él no le quedaría tan enorme.

Cuando entró dejó a el ahora niño sobre su cama, notando como este comenzaba a ver todas aquellas cosas del símbolo de la paz.

—Tienes muchas cosas de All Might... Demasiadas...

Murmuró lo último el de cabello bicolor sin dejar de mirar todos los posters que se encontraban en una de las paredes de la habitación. El peliverde se avergonzó de tener a Todoroki Shōto en su habitación observando todas sus figuras y posters de All Might.

Buscó entre su guarda ropa alguna playera que le quedara chica a el para el heterocromático, cosa que fue imposible, toda la ropa que no ocupaba la había dejado en la casa de su madre.

Soltando un suspiro tomó una playera de color azul pastel con los bordes de las mangas y cuello más oscuros, se acercó a el más pequeño dejando la playera a un lado de él para seguidamente retirar la que el contrario tenía, dándose cuenta de que también tendría que conseguir ropa interior más pequeña.

El sonrojo en la cara del pecoso era bastante notable, mientras que el del bicolor era apenas visible. Tratando de que sus manos no temblaran demasiado le colocó la playera azul antes de levantarlo para quitar las prendas de abajo, dejándolo únicamente con la prenda azul

—Deku-kun, podrías...

La puerta se abrió dejando ver a la castaña de cabello corto, la cual no terminó de hablar al ver a aquel niño sobre la cama de su amigo peliverde

¿¡Shōto!? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora