21.

2.9K 212 46
                                    

Previamente:

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Previamente:

Alcé la mirada hacia Thomas. Quién tragó en seco. Al parecer, no fue necesario que dijera algo para hacerle entender.

— Jack, _____, Teresa...— Alargó el nombre.— Y yo.— Culminó.— Nosotros fuimos los que los encerramos aquí.

Capítulo XXI:

— Chicos... Digan algo...— Les dije a los chicos.

Había pasado más de una hora desde que Thomas y yo les contamos a los chicos lo que había pasado. Y ninguno de los dos había querido decir nada.

La angustia aumentaba con cada minuto. Casi sentía como me asfixiaba por los nervios de que nos odiarán y nos quisieran lejos de su vida.

— Yo... Lo sabía...— Susurró Alby.— Desde que me picaron... Había tenido...— Tragó en seco.— Había tenido visiones con ustedes... Experimentado con nosotros...

— Entonces... Gally tenía razón...— Murmuró Minho.— Ustedes...

— Sí...— Confirmó Tommy.— Sé que es díficil de asimilar, pero...

— No se preocupen... De verdad, larchos.— El tono tranquilo en la voz de Alby me perturbó por un momento.— Nos han demostrado que son de fiar. Fueron capaces de hacer cosas que los demás habitantes no hubieran imaginado, nos hicieron creer que esté sería el momento en que lograríamos ver lo que hay fuera de estos muros. Ustedes son la clave para salir...

— Eso es cierto.— Agregó el asiático.— No importa lo que fueron en un pasado, nos han mostrado que podemos redimir nuestros errores. Incluso los que no recordamos...& Me miró a modo de regaño.— Así que, no croe que debamos darles tantas vueltas a este fuco problema.

Todos asentimos, y no pude evitar abrazar a los tres chicos que estaban aquí. De verdad, los consideraba una familia.

Ve a hablar con él. Hay unas cuántas cosas que deben aclarar.

Bufé ligeramente.

Está bien. Ya voy.

Me liberé del abrazo con los larchos. Y me dirigí fuera del Agujero. Sentí como la espalda me tronaba por haber estado recostada tanto tiempo, pero ya era hora para que empezara a hacer mi parte.

Caminé por entre las hamacas que aún se mantenían colgadas. No veía casi nada de movimiento, salvo en el matadero dónde estaban los animales junto a unos cuántos chicos. En la cocina podía escucharse el jaleo de ollas y cacerolas de forma constante. Pero algo dentro de mí sabía que no iba a encontrar a mi rubio por ninguno de esos lugares.

Mi única opción era su cabaña. Nuestra cabaña.

Con cautela, avancé hacia la construcción, me alegraba el hecho de que aún no había sido destruida. Podía seguir considerándola nuestro lugar.

ALWAYS WITH YOU ⋈ [The Maze Runner]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora