16. ¡EL DUETO DE KARASUNO, PIERDE!

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Para Kageyama, las vacaciones fueron eternas, independientemente de que no podía entrenar, el hecho de no tener una sola noticia de Hinata, lo estaba matando. En la noche de año nuevo, había acordado con Nao en acompañarla al templo; él no espera encontrarse con Hinata esa noche, estaba feliz. En cuanto lo vio se disculpó con Nao y le pidió que lo esperara, que en un rato volvía, Nao accedió y Kageyama se iba acercando, pero de repente paró su andar, al notar que Hinata no se encontraba solo, sino con Nagisa.

Por un momento dudo en acercarse, pero había esperado tanto tiempo por verlo, que no iba a desaprovechar la oportunidad. Decidido a seguir su andar, va acercándose hasta que vio como Nagisa besaba a Hinata y el parecía corresponderle. Poco a poco la pareja se perdió de la vista de Kageyama y él, decidió regresar con Nao.

Al llegar a su casa, subió rápidamente a su cuarto y se encerró; ver tal escena le rompió el corazón, pero lo que más le duele reconocer sus sentimientos demasiado tarde. Ahora no tenía ni la más mínima duda, estaba enamorado de Hinata, pero de nada le servía saberlo, ya era demasiado tarde, Nagisa había ganado.

Las vacaciones de invierno se fueron como el agua, para Hinata, quién disfruto en todo momento de la compañía de su amiga Nagisa; despedirse de ella días antes de las vacaciones no fue fácil. Pero por lo menos ya no se volverían a perder la pista, habían intercambiado sus números telefónicos y correos para estar en contacto más seguido. Por otro lado era momento de que los cuervos, regresarán a la escuela, pero principalmente a la cancha a entrenar, ya que el torneo de nacional se acercaba.

Este torneo era especial, era el último para los de tercero y pronto se tendría que anunciar a nuevo capitán y sub-capitán.

[1 mes después]

- Vamos chicos, recuerden que mañana son las preliminares, necesitamos ganar si queremos ir al Torneo Nacional de nuevo – dijo Ukai

- Claro, ya vera entrenador cómo los venceremos a todos - dijo Hinata muy animado - verdad Kageyama – volteo hacia el mencionado con una enorme sonrisa, pero Kageyama se limitó a asentir con la cabeza.

Hinata no entendía la actitud de Kageyama, últimamente no era él, aunque en los entrenamientos siempre estaba concentrado, Hinata sabía que algo no andaba bien con Kageyama y eso lo hacía sentirse intranquilo, aún no enterraba del todo sus sentimientos por él, pero al menos podía sobrellevar la situación y no deprimirse como antes. Ante su preocupación, decidió acercarse a Kageyama, pero en ese momento el entrenador les indicó que como última actividad, harían un partido de práctica.

Todo marchaba bien, Kageyama y Hinata coincidieron en que deberían de terminar con la victoria, así que intentaron su haz bajo la manga, y salió a la perfección, o por lo menos es lo que los demás pensaban.

Hinata sintió que algo era distinto, en varias ocasiones pensó que eran alucinaciones suyas, sin embargo algo en su interior le gritaba que no y que tenía que hablar con Kageyama. Lo intento, pero no tuvo suerte, pues Kageyama parecía estar más ocupado de lo normal y siempre se iba antes que todos.

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Eran momento del torneo, toda parecía ir como viento en popa para el Karasuno, estaban jugando contra su segundo oponente, el Daketo.

Los equipos se disputaban la victoria, necesitaban ganar este set, antes de llegar al deuce. Karasuno tenía el macht point, era momento de arriesgarlo todo o nada,  momento de que el dueto demoníaco (apodados así por muchos jugadores), hiciera su jugada. Todo estaba listo, justo cuando Kageyama estaba por colocar para Hinata se escucha un grito desde las gradas.

- ¡vamos Shouyo, derrótalos!

Hinata no necesitaba mirar para saber de quién era ese grito, lo sabía a la perfección. No había otra persona en el mundo que lo animara de esa manera, nadie más que Nagisa. Por lo tanto al escucharla sonrió, Kageyama lo notó y eso derribó su mundo, provocando que colocación fuera en dirección contraria, otorgándole así el punto al Daketo y llevando al partido al deuce.

Nadie podía creer lo que había pasado, todos estaban consternados. Pero Hinata estaba preocupado, Kageyama no cometía errores como ese, así que se acercó a él para animarlo un poco y que no se sintiera decaído.

- No te preocupes Kageyama la próxima vez lo lograremos.

- Lo siento, no puedo.

- ¿Qué?

- ya no voy a colocar para ti- dijo Kageyama pasando de largo de Hinata.

Hinata no podía creer lo que escuchaba, pero lamentablemente Kageyama no bromeaba, en efecto no volvió a colocar para Hinata, aun si el entrenador lo ordenaba. Con mucho esfuerzo lograron ganarle al Daketo, muchos celebraron la victoria del Karasuno, pero los integrantes del equipo sabían que a pesar de todo, el dueto del Karasuno había perdido.

VUELTAS DE LA VIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora