Detrás del escenario ❀ Vkook ❀

34

Jungkook

Despegue la vista del teléfono, para ver la espalda de mi novio, estaba en el escritorio que estaba en la habitación del hotel, sentando en la silla mientras tecleaba algo en la laptop.

— ¿Qué haces Tae? — pregunté viendo a mi novio mirando a la pantalla.

— Estoy leyendo unos comentarios de Twitter. — dijo el ajustándose las gafas.

— No lo hagas, por favor. — le pedí, el pareció no escucharme ya que hizo caso omiso.

— Mmm ¿qué Namjoon es feo? — leyó en voz alta. Chasqueo la lengua mientras inclinaba la cabeza hacia un lado, haciendo un ademan de desaprobación.

— Taehyung, deja de ver esos comentarios, te van a dejar mal en algún momento. — me acerqué a él y cerré la laptop. El frunció el ceño y volteó a verme confundido. — Te lo pedí amablemente, es por tú bien.

— ¿Mi bien? — se rió de forma sarcástica. — Sólo estaba leyendo Jungkook.

Desde la mañana estaba de mal humor, no sabía que le pasaba pero era mejor darle por su lado, si no tendríamos una gran discusión.

— No quiero que te lastimes leyendo algo de lo que está escrito en Twitter. — le dije acariciando su cabello. El me miró.

— ¿Desde cuándo te volviste más fuerte y autoritario? — alzó una ceja.

— Estoy creciendo, ya no soy el mismo. — le respondí. El asintió.

— Me doy cuenta — susurró. — ¿Deberíamos ir a comer mañana? — me preguntó jugando con sus manos.

— ¿Precisamente a dónde? — le dije sonriendo. El se encogió de hombros.

— No lo sé, investigaré un poco — dijo levantándose bruscamente. Se acercó a darme un corto beso en los labios, y se recostó en la cama. Yo planeaba hacer lo mismo, pero mi celular sonó.

— ¿Bueno? — dije al teléfono.

— Jungkook ¿estás ocupado? — preguntó esa voz tan familiar del otro lado.

— Bueno estaba por recostarme pero dime — respondí.

— ¿Podrías venir a mi habitación? — preguntó. — Sólo tú, sin Taehyung.

— Está bien, iré ahora mismo. — colgué y me puse las sandalias.

— ¿A dónde vas? — preguntó Taehyung alzando una ceja. — ¿Quién te marco?

— Era Yoongi — le dije, y el asintió. — Ya vuelvo.

Dejé el celular en la cama, y me marché hacia la habitación donde Yoongi se encontraba, a unas cuantas de la de nosotros.

— ¿Hyung? — pregunté del lado de la puerta. — ¿Qué pasó?

Yoongi abrió la puerta con las manos temblorosas. Yo pasé y cerré la puerta.

— ¿Qué sucede? — pregunté nervioso.

— Jungkook, estoy teniendo un momento de ansiedad... — dijo sin parar de hablar, movía sus manos de un lado a otro, se mordía las uñas, y caminaba de lado a lado.

— Hyung, cuéntame qué pasó — dije acercándome a él.

— Es que... — su voz se apagó, parecía como si un nudo se hubiera formado en su garganta — me están amenazando desde hace días.

Miré el aspecto de Yoongi, jamás había pensado verlo de esa forma, nervioso, ansioso con los ojos rojos, y llorosos.

— ¿Quién carajos? — mi voz sonó profunda. Estaba realmente molestó, se estaban metiendo con mi familia.