12.

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Yoonhye.



Su cuerpo se congeló cuando chocó con el torso musculoso de Jimin, lo nervios subieron a un alto nivel y se le erizó la piel. Felizmente reaccionó rápido y se hizo a un lado para seguir corriendo rumbo a su casa.



Temía que su papá haga otra cosa para desahogar su enojo. Yoonhye entendía a su padre, entendía perfectamente como es cuando quieres desquitarte de alguna manera todo el enojo que llevas dentro, pero no te desquites de una mala forma, haciendo tonterías o simplemente haciéndote daño. Ella conocía a su padre y sabía que la única manera de desquitarse su enojo era consumiendo alcohol y cuando eso suceda las cosas se saldrán de control.


Llegó a casa, introdujo la llave en la cerradura y dio vuelta a esta. La puerta se abrió y ella entró temerosa de que lo que pueda encontrar.


Las luces estaban apagadas, todo oscuro. La única luz que entraba era de la luna, las cortinas y la ventana estaban abiertas dejando así una gran vista de la oscura y fría noche.

Rápidamente se apresuró en cerrar la ventana y prender las luces de la sala.
Hye recordó lo que Yoongi dijo: – "Antes que yo  salga de la casa, dijo que iba a su cuarto a dormir"
Puede que su padre le haya mentido a Yoongi para no seguir la discusión.


Yoonhye caminó lentamente con temor al cuarto de su padre, tocó dos veces la fría madera con los nudillos y nada.
-Papá, soy yo. Yoonhye. ¿Estás ahí dentro? – ninguna respuesta. Los negativos pensamientos ya atormentaban la mente de Hye. Aun así mantuvo la calma y no se desesperó.


-¿Papá? Por favor abre la puerta, hablemos ¿Si? – dejó caer su frente en la puerta y volvió a dar dos toquecitos mas.


Nada.


Probó girando la manija y tampoco, estaba con llave, la desesperación amenazaba con salir a la luz, pero trató de calmarse. Inhaló y exhaló. Recordó como hacían en las películas para abrir una puerta, usaban un pequeño ganchito de cabello y para suerte de Hye, ella tenia uno en la cabeza sujetando un mechón rebelde. Sabía que puede ser loco que lo intente pero es lo último que puede hacer. Se lo sacó y probó en la manija, esta giró abriendo la puerta.


Yoonhye empujó un poco la puerta haciendo un leve ruido de las bisagras ya oxidadas y pasadas de tiempo.
Se sorprendió tanto ver a su padre tumbado en la cama dormido, el cuarto estaba a oscuras, así que solo pudo ver su perfil gracias a la luz de fuera. 
Se acercó a él y se arrodilló, tomó su mano y lo llamó. Su padre poco a poco abrió los ojos y miró a su hija con un rostro de preocupación.


Las lagrimas de Hye quisieron resbalar pero se contuvo, sintió tranquilidad cuando su papá despertó y no estaba ebrio.


-Hyenie, hija. ¿Qué sucede? – el señor se incorporó y se sentó en la cama sin soltar la mano de su hija. -Vamos, levanta. Siéntate aquí – palmeó el lugar vacío del colchón. Hye se puso de pie se sentó junto a su papá.


-P-pensé que... - otra vez las lagrimas amenazaban con salir, trató de hablar pero su voz se apagaba.
Su padre pasó su brazo por encima de los hombros de Yoonhye acurrucándola más, tratando de calmarla.


-Tranquila Hyenie, estoy bien. ¿Qué sucede? –


-Es que, Yoongi dijo que habían discutido y pensé que ibas a tomar alcohol otra vez, por eso me asusté y vine corriendo para acá. – abrazó a su papá y se acurrucó mas a él.  Se sentía como una niña pequeña refugiándose  en su papá.


El señor Min aclaró su garganta. -Sí, es verdad que discutimos pero no quise agrandar el asunto así que vine a mi cuarto a dormir un poco, ya me cansé de discutir con tu hermano. Él suele malinterpretar las cosas y sé que se enoja rápido. – respiró hondo – Conozco a tu hermano, Yoonhye. –
Aún con todo lo que haya dicho su padre no conseguía entender la causa de la discusión, ya escucho la versión de su hermano y ahora desea escuchar la versión de su padre.

Diferente a las demás; [Park Jimin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora