Jimin se acercó hasta la puerta y antes de abrirla escuchó la risa mas hermosa que haya oído jamás. Yoonhye estaba dentro, pero se preguntaba por qué.
Decidió entrar y se encontró con su hermana y Yoonhye en el sofá, viendo lo que era una película, porque ahora solo salían los créditos de ésta, tenían un bowl de canchita en medio de ellas, con vasos de gaseosas en la pequeña mesita y una caja de pizza.. ¡¿De pizza?!
—¿Estas comiendo pizza, Yoonhye? ¿Tú? ¿Cómo...
Calló lo vio parado en el umbral, su corazón dio un vuelco. ¿Por qué estaba golpeado? Se acercó lo mas pronto a él, con un semblante de preocupación.
—¿Qué te ha pasado? –preguntó, acariciando el pómulo dañado de Jimin, puso su dedo índice en el labio roto manchado de sangre y sintió su corazón estrujarse de nuevo. —Jimin responde. ¿Que ha pasado? –sus ojos se encontraron con los de él y la sensación de abrazarlo la mataba, pero se aguantó.
Lia se acercó a ellos, y se llevó la mano a su boca sorprendida. A pesar que sea esta una de las veces que ve a su hermano en ese estado, ahora si que tenía el labio destrozado, el ojo hinchado y el pómulo tornándose morado. Y cada vez que Lia le preguntaba el motivo, el solo decía que eran esas típicas peleas de bromas con Taehyung. Pero ella sabía que no eran ninguna pelea de broma.
Yoonhye tomó la mano de Jimin, y este se sorprendió. Se dejó llevar por ella hasta que llegaron al baño, obligó a sentar a Jimin encima de la tapa del inodoro. Él no podía ni articular una palabra. La vio rebuscar algunas cosas en el botiquín y sacó alcohol, gasas, agua oxigenada, una pomada y algunos analgésicos.
Se inclinó a él y comenzó a limpiarle la herida, con cuidado. Ella tenía la mirada centrada en el pómulo dañado de Jimin, mientras que él moría por besarla en ese instante. Estaba hermosa con su cabello suelto y despeinado, una blusita celeste, y unos pantalones, sin ninguna gota de maquillaje, tan natural, tan ella.
Terminó de curarle todas las heridas, y colocó la pomada en la herida. Fue cuando Jimin recordó las palabras de Jiwon y sin pensarlo soltó lo que quería callar.
—¿Quién es Kim Jiwon?
Ella se alejó soltando la crema, y se paralizó. Los ojos de Jimin la fulminaban como si ella hubiera hecho un delito. La furia llenó su anatomía.
—¿De donde lo conoces? -replicó ella.
Se apoyó en el lavabo y calmó su respiración. Jimin se puso de pie y la furia que hace rato ocultó, salió a la luz.
—Dime ¿Quién narices es Jiwon? ¿Es tu ex? ¡Yoonhye, habla!
Gritó de repente y ella se asustó. Jimin colocó sus manos a cada lado del lavabo, acorralándola por completo.
—Si, es mi ex. ¿Cómo...
—¿Te acostaste con él?
El mundo de Yoonhye se detuvo y quiso no haber escuchado lo que escuchó, que fuera un error lo que haya dicho Jimin.
—¿Te acostaste con él, Yoonhye? ¡Maldita sea responde! No se por que siento que eso es un sí y que eres una de esas cualquiera que no...
—¿Qué dijiste? —empujó bruscamente el pecho de Jimin y logró zafarse de él.
Jimin reaccionó y se dio cuenta de los ojos aguados que tenia Yoonhye, tambien se dio cuenta de la estupidez que acababa de decir. Ella iba a salir del baño, pero la detuvo a tiempo. Vio en sus mejillas rastros de lagrimas derramadas. Se sintió basura al verla llorar otra vez y mas si fue por su culpa.
—Lo siento Yoonhye, yo no...
—¡¿Y en donde has estado tú?! ¡¿Esto es lo importante que tenías que hacer hoy?! ¡¿Pelear?!
Siguió llorando frustrada porque sabia que Jimin escondía algo también. Jimin se sorprendió al escucharla.
—¿Crees que he mentido? –susurró él.Y lamentablemente si, mintió, y se enojó mas consigo mismo por eso.
—Si tu desconfías de mi, tengo el derecho de pensar cualquier cosa de ti.
Y sencillamente Jimin no soportó más y estalló.
—¡¿Y tú que me dices de ese tal Jiwon?! ¡Nunca me contaste de él! Soy tu mejor amigo Yoonhye... –tomó con desesperación el rostro de Yoonhye, pero esta retiró sus manos bruscamente.
—Pues no lo pareces, Jimin. Mi mejor amigo jamás desconfiaría de mí.
Si mas salió del baño para ir a la sala y recoger sus cosas y largarse. Jimin venía detrás de ella corriendo.
—¡Yoonhye! ¡Espera! ¡Perdóname!
La alcanzó y la hizo girar sobre sus talones y la abrazó, la abrazó fuerte y susurró: "perdóname, preciosa."
Ella estaba inmóvil con un dolor en su corazón, algo que jamás había sentido.
—Por favor perdóname, nena. Lo siento tanto, no debí desconfiar de ti. Soy un idiota, y lo sabes. No me controlé y solté lo que no quería decir. Perdóname. Por favor no te vayas... no te vayas, Yoonhye. –Jimin no sentía una reacción como respuesta por parte ella y el miedo comenzó a apoderarse de él hasta que sintió sus pequeños brazos envolverle su cintura y se calmó. La apretujo más a él al sentir sus lagrimas mojando su ropa. Le depositó un dulce beso en su coronilla.
—Perdóname.
Ella no dijo nada pero siguió llorando en su pecho por que las palabras que le dijo le habían dolido y a pesar que él sea el causante se sentía bien estando acurrucada en su pecho. Se sentía bien estando en sus brazos.
Jimin acariciaba el cabello de Yoonhye mientras le decía cosas bonitas y sintió como los dragones de su estómago se despertaron. Fue cuando se dio cuenta que estaba perdido por ella. No porque sea bonita en lo físico, es hermosa en todo sentido, siempre estaba para apoyarlo y a pesar de las estupideces que hacía, ella estaba ahí, a su costado.
Después de un momento se separaron, los brazos de Yoonhye seguían en la cintura de Jimin y él sostenía su rostro.
—Jimin, sé que algo me estás ocultando. Dímelo por favor. Sólo así yo también te contaré lo que quieres saber.
Él seguía acariciando las mejillas de Yoonhye, distraído, pero si prestó atención a lo que dijo, y se tensó al instante. ¿Decirle su secreto? No lo sabía, tenía miedo que cuando se entere se aleje de él y lo deje. Eso era lo que más temía.
—Dame tiempo, ¿vale?. Te prometo que te contaré todo, todo. Pero solo dame tiempo.
Ella asintió.
Lentamente Jimin se estaba acercando a ella, tenía tantas ganas de besarla y sabía que ella también. Sus narices estaban apunto de rosarse para luego juntar sus labios, cuando alguien llamó a Yoonhye.
—¡Yoonhye! ¡Tu móvil esta sonando!
Lia.
Se separaron, y ella tenia las mejillas rojas, igual que las de él. Ella apartó la mirada primero para luego coger su móvil que traía Lia en la mano.
Vio el contacto en la pantalla y era su hermano, contestó y lo que le dijo no era nada agradable, su padre se puso mal de nuevo. Asustada pero a la vez calmada dijo lo último para colgar la llamada.
—Voy para allá.
Jimin, al escuchar eso giró a verla y encontrarse con el rostro preocupado de ella no fue nada bueno.
—¿Pasó algo?
Yoonhye le había escuchado a Jimin, pero no respondió. Recogió sus cosas y puso su mochila al hombro para salir.
—Nos vemos Lia.
Jimin se interpuso en la puerta bloqueando su salida.
—Yoonhye, ¿pasó algo? ¿Por qué te vas así sin más?
—Mi papá se ha puesto mal, tengo que ir a casa a ver que le sucede.
—De acuerdo, pero voy contigo. Te acompañaré. –sonó decidido.
—Jimin, gracias pero mi casa está a unas cuadras. Puedo ir sola.
—Sí, lo sé. Igual quiero acompañarte. Ahora dame tu mochila.
Ella a regañadientes le entregó su mochila y el se lo colgó al hombro. Se sorprendió cuando la tomó de la mano llevándola fuera de la casa.
—Ya regreso.
Caminaron hasta llegar a casa de Yoonhye, y ella le dijo que se podía ir, pero Jimin se quedo ahí hasta ver que ella entrara sana y salva. Pero cuando ella iba a abrir la puerta, su hermano se adelanta.
—Por fin vienes ¿Por qué demoraste..
Sus palabras quedaron en el aire cuando vio a Jimin ahí parado a solo unos metros. Las heridas no habían sanado y Yoongi lo notó rápido.
Volvió a pelear.
Yoongi si sabe lo que esconde Jimin pero el pensó que lo había dejado atrás, que su promesa de no volver a pelear seguía en pie pero se equivocó.
Ambos se miraban con intensidad, esa tensión estaba en el aire y Yoonhye se dio cuenta al instante. Se puso nerviosa.
—No vemos Jimin.
Ella entró jalando a su hermano.
—¿Dónde te habías metido? ¿Estuviste con Park?
Ella dejó sus cosas en el sofá y se giró para encarar a su hermano.
—De nuevo con eso Yoongi, ya hablamos.
No quiso discutir y lo esquivó yendo a la habitación de su padre. Al entrar él estaba viendo televisión con Holly durmiendo a su costado y a pesar que sonrío, se notaba cansado. Y eso preocupó a los hermanos Min.
Ella se acercó donde su padre y se sentó en el filo de la cama, Yoongi se apoyó en el umbral de la puerta, viendo como Yoonhye hablaba con su papá.
—Papá ¿te sientes bien? Te veo cansado.
—Estoy bien hija, tu lo has dicho sólo un poco cansado.
Yoonhye acariciaba el pelaje de Holly.
—Ya no deberías trabajar, no necesitas pagar nuestras universidades. Nosotros estamos trabajando para eso.
Su padre se negaba rotundamente pero después de tanto insistir aceptó, ya no iba a trabajar. Lo dejaron descansar con Holly dentro.
En la cocina, ella preparaba algo para comer, por que se moría de hambre y aunque su hermano lo negara él tambien tenía hambre.
—Caramelito ¿Crees que deberíamos hablar con ese doctor sospechoso que dijo que nos conocía la otra vez?.
Se sirvió un poco de agua y apoyó los codos en la isla.
—No lo sé. –respondió removiendo la olla de sopa.
—Yo creo que sí, siento que ese doctor sabe todo y no nos quiere decir.
Ella volteó con la cuchara aún en la mano.
—¿Y tambien piensas que papá nos está ocultando algo?
—Siendo sinceros. Sí. Y sé que ese doctor nos lo puede decir.
Yoonhye volvió a su labor y después de unos minutos apago la estufa y sirvió dos platos.
Su hermano se sentó frente a ella.
—Bien, mañana hablaremos con ese doctor. Y nos dirá que tiene papá. ¿Pasas por mí a recogerme?
—Ya.
Averiguarían lo que tiene su padre. Ellos saben que algo no anda bien y necesitan saber que es. El único que los puede ayudar en este momento es ese doctor que atendió a su padre la vez que enfermó, pero lo que mas se preguntaban era ¿Quién es ese doctor para ellos?
Ya en la noche, Yoonhye estaba leyendo un libro pero su mente no dejaba de pensar en como Jimin conocía a Jiwon.
La última vez que lo vio fue hace dos años en un viaje de visita a su abuela a Daegu. No hablaron pero si se vieron, tan solo competieron mirados por 3 o 4 segundos en un pequeño centro comercial. Yoonhye recuerda que ese día, lo vio con un ramo de rosas en la mano, y supuso que era para su nueva pareja. Ella pensó que cuando lo volviera a ver el sentimiento seguiría ahí y que las mariposas revoloteen en su estómago pero no fue así. Ya no sentía nada por Jiwon, solo asco y pena. Y ella sintió tal libertad que por fin saboreó ese sentimiento que ya lo había superado y lo dejó bien atrás y enterrado.
Estaba claro que ahora el único chico que le gusta es Jimin. Y que él es el único que lograba detener su corazón cada vez que estaba cerca de ella. Ni siquiera con Jiwon pasó eso.
Jimin era diferente, y que aún así con las cosas que llegara a soltar sin querer lo quería, y lo quería demasiado.
...
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Diferente a las demás; [Park Jimin]
Romance¿Cómo fue que me enamoré de ella?... Min Yoonhye no es como las otras chicas, no usa tacones ni ropa diminuta. No usa maquillaje y tampoco viene de una familia adinerada. Sin embargo, su sencillez y generosidad fue suficiente para enamorar a Park Ji...