Fuerza (Inazuma Eleven)

CAPITULO 50

No puedo evitar soltar una carcajada sonora cuando dicen que son el nuevo Epsilon y que viene a retarnos de nuevo.

Todo se queda en silencio y las miradas se plantan en mi persona mientras yo intento aguantarme de la risa taponando mi boca con ambas manos.

-Perdón, perdón, es que me ha hecho gracia la seguridad que tenéis en todo esto después de la última vez.

-Eres un ser insoportable.-me dice su capitán.

-Sí, me lo comentan mucho.

Nací así. ¿Qué le vamos a hacer?

Me preparo para luchar contra ellos con uñas y dientes. He olvidado que me dolían hasta partes del cuerpo que no sabía que tenía.

Hurley a decidido que se queda con nosotros. No piensa permitir ese tipo de comportamiento de nadie.

Es el momento de la verdad.

No se me escapa ni una, veo como miran a Shawn. Eso no avecina nada bueno pero cuando intento explicárselo a Aquilina esta me manda a calentar con el resto.

Por suerte lo deja en la defensa. Eso garantiza que Aiden no salga a flote como una boya en medio del mar. O eso quiero pensar.

Arranca el partido.

No tardamos en percatarnos de que son mucho más rápidos que antes y sus técnicas más poderosas.

Atacan a la velocidad del rayo pero Mark los para. No tiene problema en ello, por lo que sonrío victoriosa y me echo el pelo hacia atrás con airosidad.

Me siento como una hermana orgullosa.

Esto hace crecer a nuestro espíritu de superación.

No dudamos ni dos segundos en atacar también y en quitarles el balón en cuanto lo cogen. Nosotros queremos ganar pero ganar de verdad, y por un motivo que merece la pena.

Hay una parte crucial en la que mis miedos se confirman, cuando Dvaling le pasa la pelota a Shawn y le pide que tire.

Intento detener la situación pero Aiden no me escucha por mucho que vaya detrás de él gritando que pare, que no continúe.

Es como si pudiese oír sus pensamientos. Está claro que en estos instantes no queda nada de Shawn en su mente, y esto se intensifica cuando consiguen parar la Ventisca eterna varias veces.

Le escucho decir una y otra vez que tiene que ser perfecto.

Al final ni si quiera les hace falta una supertecnica para parar el tiro porque de tanto intentarlo ha conseguido que el chut sea muy flojo en todos sus aspectos.

Su rostro palidece aún más y la mirada se le queda perdida en algún punto del cielo. Conozco a la perfección esa reacción.

Me acerco corriendo y lo atrapo en volandas antes de que se caiga de culo al suelo. Pese a no darse ningún golpe puedo ver como se rompe en mil pedazos por dentro.

El comentario de Dvaling lo ha destrozado. Ha conseguido destruirle esa doble personalidad que estaba tan bien construida.

-¡Shaw!¡Shawn!-lo agito con suavidad.-¿Qué te pasa?

Sigue con la mirada perdida y no me contesta.

Me empiezo a poner nerviosa y grito su nombre cada vez con más fuerza mientras intento hacer que reaccione de cualquier forma. Incluso dándole palmaditas en la cara.

Antes de que a mi me de una crisis nerviosa, Erick me agarra de la cintura y me atrae hacia él para que deje hueco de maniobra para llevarlo al banquillo entre Mark y Sharp.