TODO SEA POR FAMA (EMILIACO).

8. ¿Te quieres casar conmigo?

(NARRA EMILIO)

Sentí un ardor en mi mejilla, segundos después caí en cuenta que Renata me había dado una cachetada.

-Ni se te ocurra tener un ataque aquí, suficiente haz hecho -dijo Renata frustrada-

-Renata deja de hablarle así a Emilio

-Él fue el culpable del ataque de mi hermano como no quieres que le hable así a un...

Todo estaba pasando muy rápido y yo solo sostenía el cuerpo de Joaquín en mi brazos
Mientras Elizabeth llamaba, Renata solo maldecía y lloraba.

-La ambulancia estará aquí en dos minutos, cariño ¿Puedes bajar a Joaquín? -levanté mi vista y pude ver a Elizabeth llorando-

-S-si -respondí-

Tomé su pequeño cuerpo y lo cargué, se ponía pálido cada minuto que pasaba y eso me asustaba.
Sabía lo peligroso que podían ser los ataques para Joaquín.
Bajé las escaleras cuidando que nada golpeará contra su cabeza.
Llegando a la puerta pude oír las sirenas de las ambulancias.
Y atrás estaba Elizabeth junto con Renata.

-Tuvo un ataque de nuevo Joe -dijo la mamá de Joaquín en cuanto un paramédico se bajo de la ambulancia-

-Joaquin Bondoni, 17 años, pónganlo en la camilla y denle oxígeno.

Otros dos paramédicos bajaron la camilla y lo recosté en esta.
Subieron a Joaquín en la ambulancia y le siguieron Elizabeth y Renata.

-Cariño, sube.

Me quedé paralizado, tratando de procesar todo. Concentrándome en respirar y no tener un ataque.

-Emilio no vendrá -oí a Renata- déjalo.

-¿Alguien podría quedarse con él?

Sentí como lágrimas bajaban por mi rostro.

-Estoy bien, al rato te llamo Elizabeth -susurré-

Me di la media vuelta y salí corriendo.

(NARRA JOAQUÍN)

*Flashback 7 años atrás*

-Hola pequeño moquito ¡Feliz cumpleaños!

-Hola Emi, muchas gracias.

-¡Ya tienes diez! ¿No es genial? -gritó Emilio emocionado-

-¡Claro que si!

-Al rato te daré tu regalo -susurró el pequeño Emilio a la oreja de Joaquin-

-¿QUÉ ES? -exclamó Joaquín emocionado-

-¡Sorpresa! ¡Pero mientras vamos a jugar!

-Jorge dice que tener un pastel rosa es de niñas -susurró Joaquín llorando- y que esta mal.

La fiesta había acabado y Joaquín se encontraba llorando por culpa de uno de sus compañeros del colegio.

-No llores moquito, tener un pastel rosa esta de pelos, es lo mejor. Eso te hace ser especial

-P-pero...

-Shh, ya, no llores -Emilio abrazó a Joaquín suavemente, como si se tratase del cristal más frágil del mundo- todo esta bien chiquito.

-¿Te quedarás conmigo hoy?

-Hoy y siempre, pero para que no estés triste te daré tu regalo. Espérame aquí un segundo.

-Pero...

-¡Espérame! -dijo Emilio corriendo hacía la casa-

Joaquin se sentó en una pequeña roca del patio y trazaba círculos en su rodilla, aburrido, nunca le gustaba esperar a Emilio porque siempre se tardaba.

-Listo, pero cierra los ojos -Emilio llegó hasta donde estaba Joaquín con sus manos detrás de su espalda impidiendo ver el regalo-

Joaquín obedeció y se tapó los ojos.

-¿Seguro que no ves?

-Nop

-¿Segurisimo? ¿Cuántos dedos tengo aquí?

-¿Tres?

-Bien, no estas viendo.

Joaquin sintió como algo se posaba en su pequeñas piernas.

-Listo pequeñín, ábrelos.

Rápidamente quitó las manos de su cara y lo primero que vio fue a Emilio arrodillado con una pequeña cajita entre sus manos.

Bajó la vista a sus piernas y ahí se encontraba un pequeño chicharo para la oreja con una E grabada en el.

-¿Qué es esto Mailo?

-Eso es un chicharito para que cuando tengas tu primer concierto lo utilices tiene mi letra y yo tengo uno con la J de Joaquín ¿no es genial? Ya sabes, es de la suerte -dijo Emilio sonrojado y nervioso ya que Romina se había reído en su cara y le dijo que era demasiado cursi, pero sabía que su moquito le gustaban las cosas cursis aunque a veces no entendiera del todo el significado de estas. Lo que importaba era ver a Joaquín feliz-

-¡ES PERFECTO! Muchas gracias Emi, enserio me encantó -Joaquín lo observaba fascinado y con ansias de tener su primer concierto para estrenarlo-

-B-bueno...-el pequeño Emilio sudaba de las manos y le dolía la rodilla pero eso no arruinaría la sorpresa que le tenia a Joaco- Y-yo estuve pensando en un regalo bonito para ti, lo consuilte con mi mamá, mi mapá, romi, kiko, ren y tu mamá, todos decían que era muy cursi y que lo más probable es que me dijeras que no, porque no me bañaba y b-bueno no sé digo si me dices que no, esta bien...

El pequeño Joaquín lo miraba confuso.

-Recuerdo aquella vez en mi casa me dijiste que te querías casar conmigo y yo te dije que me esperaras porque aun no trabajaba y ahora ya estoy cantando y tengo un poco de dinero ahorrado.
Así que moco ¿Te quieres casar conmigo?

Emilio sonreía nervioso esperando la respuesta de Joaquin, que estaba procesando todo

-¡S-si! ¡Si quiero! -El pequeño Joaco se abalanzó encima de Emilio y los dos cayeron al pasto-

Lo había visto tantas veces en películas junto con su hermana Renata y no se imaginaba a nadie más que no fuera Emilio.

Los dos empezaron a reír, mientras que por la ventana eran observados por sus familias.
No dejarían que nadie les quitara esa felicidad, nunca.

*Fin del flashback*

-Creo que está despertando...