TODO SEA POR FAMA (EMILIACO).

29. Yo no tengo miedo a amarte.

(NARRA JOAQUÍN)

Habían pasado algunos días desde el concierto de Emilio.

Claramente estaba muy feliz que las cosas estuvieran el calma, estamos en el proceso de perdonar e ir paso a paso, porque si queríamos estar juntos, teníamos que sanar muchas heridas.

Sabía que Emilio me amaba, pero aún así era inevitable sentirme un poco inquieto ante toda la situación y adaptarme al cambio que tenía él conmigo.

Tampoco es que tengamos algo oficial y quería seguir así, hasta que yo esté seguro que, bueno, no haya otra cosa que venga y nos arruine, porque lo amo y eso no va a cambiar, lo amo en todas las formas incluso si esto no funciona lo seguiré amando como amigo.

-Entonces ¿Seguirás evitandome?

-¿Diego?

-Hola -sonrió recargandose en el marco de la puerta-

-Hola ¿Qué haces aquí? -pregunté extrañado-

-Vine a ver un rato a Ren -dijo adentrándose a mi habitación- ¿Cómo estás?

-Muy bien -sonreí- Quería pedirte una disculpa por el otro día, necesito compensarlo.

-Claro que sí, sólo dime cuándo.

-Estoy libre ahora ¿Alitas? -pregunté  sonriendo-

-Acepto.

-Bien, solo agarro mi chamarra y mis vamos.

-Joaquín necesito decirte algo, no solo vine a ver a Renata, también a ti.

-Vale, dime.

Se acercó a mi y me tomó de la cintura.

-Eh ¿Qué pasa? -pregunté extrañado y separandome un poco de él-

-Voy a ser muy directo -suspiró- desde hace tiempo me llamaste la atención y no me acerque por Emilio, porque sabía que él te seguía amando y porque pensé que él te conquistaria de nuevo, pero lo único que ha hecho ese pendejo es dañarte tu corazón.
¿Y sabes? Está vez ya nada me detiene y te lo digo de frente, me gustas Joaquín y voy hacer de todo para conquistarte porque no voy a esperar más, ya le di mucho tiempo a Emilio.

-Espera ¿Qué? ¿Qué está pasando? -pregunté en tono de nerviosismo-

-Te estoy diciendo que me gustas Joaquín y yo no tengo miedo de amarte, yo no soy Emilio.

Se acercó lentamente a mis labios, lo observé y por alguna extraña razón no quise separme.

"Yo no tengo miedo a amarte"

Sonó tan bonito.

(NARRA EMILIO)

-¡EMILIO! -gritó María entrando al cuarto junto con Roy-

-Hola -sonreí- ¿Cómo están?

-Bien -contestó Roy y María asintió con la cabeza- Venimos rápido para hacerte una pregunta ¿Qué planes tienes hoy?

-Quería ir a la casa de Joaquín un rato, pero no me contesta, así que nada ¿Por qué?

-Bueno, en ese caso, Adrián pasa por ti a las nueve para irnos de fiesta.

-¿A dónde?

-Tu no te preocupes, nosotros nos encargamos, ahora necesitamos irnos, te veo al rato.

-Bien...¿Puedo invitar a Joaquín?

-Ya está invitado, no te preocupes.

Salieron de mi habitación y me tiré a la cama.

Sonreí, sólo con mencionar su nombre mi corazón se acalera, a veces me odio por pensar en esas cursilerías pendejas, y hasta me burlo de ellas, pero te pasa cuando menos te lo esperas.

Agarré mi teléfono y volví a llamarlo, está vez atendió al tercer tono.

-Hey, hola -contestó Joaquín al otro lado de la línea-

-¿Cómo estás precioso? Te estuve marcando.

-Estoy bien y lo siento, estaba en el cuarto de Ren y dejé mi celular cargando. En fin ¿Cómo estás tú?

-Muy bien ahora que te escucho.

-Eres un cursi.

-Solo contigo -dije sonriendo- te marcaba para ver si irás a la fiesta.

-Ah, sí, si voy ¿tú?

-También ¿Te veo ahí a las nueve?

-Si, está bien.

-Ya quiero verte.

-Yo también -contestó Joaquín y sonreí- pero necesito irme, voy a ir a comer, te veo en un rato.

-Sí, provecho, me saludas a Eli y Ren.

-Te quiero -dijo en voz baja-

-Te amo bebé.

Colgué y volví a sonreír ¿Cómo es posible que Joaquín me saque tantas sonrisas?

(NARRA JOAQUÍN)

Había besado a Diego y no pude decírselo a Emilio.

-¿Todo bien? -preguntó Renata bajando las escaleras-

-Creo que no...