TODO SEA POR FAMA (EMILIACO).

12. EsquirexEmiliaco.

(NARRA EMILIO)

Desperté abrazando a Joaquín, lo tenía entre mis brazos, apachurrandolo, era tan pequeño y no quería soltarlo.

-Buenos días pequeño -dije acariciando su mejilla y lo único que obtuve fue un ronquido, sonreí- Joaacoo.

-Hahmmgh

-Joaquín despierta....

Después de diez minutos por fin abrió los ojos.

-Molestas mucho ¿sabías? -dijo tallándose sus ojitos-

-Y tú duermes mucho bebé.

-Te apuesto que apenas son las ocho de la mañana -dijo enrollándose en mi de nuevo-

-Ocho con cinco -contesté-

-Bueno pues yo seguiré durmiendo y tú preparas el desayuno ¿sí?

-¿Y mi beso de buenos días, novio?

-Nop, esa excusa no vale -contestó riendo- buenos días -dijo besando mi mejilla-

-Pero...

-Pero nada, amigo mío -dijo escondiéndose en mi cuello-

-Voy hacer como si no lo oí -contesté besando su cabeza-

-JOAQUÍN BONDONI GRESS LEVÁNTATE AHORA MIS...oh, Emilio, hola corazón.

Era nada más y nada menos que Elizabeth.

-Buenos días Elizabeth -sonreí-

-¿Mamá? -dijo Joaquín saliendo de las sábanas-

-Joaquín Bondoni tú y yo vamos a hablar y tú también Emilio ¿usaron condón?

-No, no, no, no, no mamá como crees.

-¿NO UTILIZARON CONDÓN?

-MAMÁ NO PASO NADA.

-Miré seguimos con ropa -dije quitando la sabana-

-Ah bueno -suspiró- gracias dios, entonces pueden bajar a desayunar y limpien este desastre que de seguro fuiste tú Emilio.

-No como cree suegra -y oí la risa de Joaco-

-Ya te conocen -contestó-

Dicho esto, Elizabeth salió del cuarto dejándonos nuevamente solos.

-No soy tan desastroso.

-Eso ni tú te lo crees -contestó besando mi mentón-

-Bueno, quizá un poco.

Después de bajar a desayunar y arreglar el cuarto, nos arreglamos para ir a una sesión de fotos para la revista Esquire.

-¡MOCO YA VAMONOS! -grité bajando las escaleras-

-¡YA VOY!

-¿Y tú qué haces aquí? -preguntó Renata bajando las escaleras-

-Buenos días Renata ¿cómo estás?

-Bien, gracias.

-Estoy esperando a Joaco para ir a una sesión de fotos.

-Ah bueno.

-Ren, necesito hablar contigo -dije esperando a que no me mandará a la chingada-

-Dime.

-Quiero hacer las cosas bien, ayer Joaco y yo hablamos y...

-Te voy a parar ahí Emilio, cuando duren más de dos semanas sin pelear vienes y me dices. Mientras, no pienso gastar mi tiempo escuchándote para que después venga Joaquín llorando por tu culpa -dijo y se fue-