Contenido explícito.
-Jhon, yo...
-Espera, -Le interrumpí. -hemos estado juntos por más de tres meses, -Me acerque un poco más.- Te he amado desde hace más de un año. -Esboce una sonrisa nerviosa. -¿No crees que deberíamos intentarlo? -Pregunté. -Intentar algo serio, ser novios.
-Dime que es solo una pequeña broma inocente. -Respondió ella, sus ojos empezaban a humedecerse. -Dime que tú intención fue esa.
Sentía que mi corazón saldría de mi pecho.
-No es ninguna broma. -Constate. -Yo quiero llevar más allá esto.
-Jhon. -Llevo sus manos a su rostro, tapándolo levemente. -Yo no te amo.
Sentí que mi corazón se partía en miles de pedazos, era muy dramático pero lo que acaba de sentir dentro de mi debía ser eso.
-¡Te lo dije! -Exclamó. -Te dije que no debían haber etiquetas ni mucho menos sentimientos.
Guarde silencio.
-Me dijiste que te gustaba, es lo mismo que le dices a cualquiera para llevártela a la cama.
-Tú no eres una cualquiera. -Respondí.
-Pero quisiste hacerme tuya. -Respondió. -Desde hace mucho tiempo atrás. Pensé en divertirnos pero, no pensé que tú sentirías algo por mi. -Respiró hondo. -Lo siento Jhon, pero no siento lo mismo que tú. Te quiero, pero no es suficiente.
-¿Es por el jodido del niño estúpido, verdad? -Solte de golpe.
-Lo siento Jhon. -Respondió. -No te debo explicaciones pero, si necesito saber el porqué de mis sueños.
-Deberías olvidarte de eso he intentarlo conmigo. -Por un momento, mi voz se quebró. -¡¡Estarías mejor conmigo que con él. Él es solo un niño mimado!! -Grite, el enojo me estaba cegando. -¡¡Tú y tus malditos sueños tenían que joderlo todo!! -Golpeé el tablero del auto. De pronto, sentí un fuerte golpe en el brazo. Había sido ella, había formado un puño y su ceño estaba fruncido.
-Deja tu maldito enojo de una vez. -Interrumpió. Quede impresionado por tal acción, ella estaba roja. -Tu maldito problema es conmigo, no con él. Tú y yo teníamos algo casual, solo cogiamos cuando queríamos; yo no desarrolle sentimientos por ti, por ende, pude estar con alguien más así como tu pudiste estarlo pero no lo hiciste. -Respiró hondo. -Madura y acepta la situación. -Acto seguido, se dió la vuelta, abrió la puerta del copiloto y salió del auto.
Respire hondo nuevamente, no podía forzar aquello, en parte era mi culpa, sabia lo que sentía por ella y aún así acepte su propuesta. Tenía razón, debía ser maduro y aceptar aquello.
Salí del auto lo más rápido que pude.
-Ale. -La detuve antes de que entrara a casa. -Yo... -Trague grueso. -Debí ser sincero contigo cuando te me propusiste, debí haberte dicho que no.
Ella solo observó.
-No quisiera que cambie nuestra relación pero, se que pasará. -Me acerque un poco más hasta donde ella estaba. -Me comporte como un niño, mi comportamiento no fue el mejor.
-¿Sabes? Tienes razón. -Junto sus labios por un momento. -No debiste estar con alguien como yo, cuyos sueños joden todo. -Respondió de golpe. -No creas, no has sido al primero que le jodo la vida. -Se giró, emprendiendo marcha hasta la puerta de su casa pero, justo antes cerrar la puerta, se colocó de lado y medio me observó. -Feliz noche, Jhon. -Acto seguido, entró a la casa y cerró la puerta.
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¿Cómo saber sí es el chico correcto?
Mistero / ThrillerCreyeron que, tal vez, sufría de una enfermedad mental pero no era así. Sus sueños le mostraban lugares, sucesos y personas que ella no recordaba, pero lo que más la atormentaban eran unos ojos de color intenso. ¿Por qué?, ¿quién era?, ¿qué quería...