Capítulo IX: La extraña droga

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- Yo..¡sabes que eso no importa ahora! -

- Osea que prefieres que te hubiera dejado en ese horrible lugar. De haber sabido jamás te hubiera salvado y llevado al circo-

El ambiente se estaba poniendo tenso, no solo por la discusión de los dos chicos, también el castaño estaba actuando de una manera muy extraña para la vista del peliceleste.

-¿Mahiru? ¿Te sucede algo malo?-

El mencionado solo negó sin decir una sola palabra. Se veía nervioso y Kuro tenía la idea de que aquello que hablaban los contrarios solo estaba incomodando al niño, pues además de todo este se estaba abrazando a sí mismo como si tratara de proporcionarse un poco de calor a pesar de que el clima era bastante agradable.

Cuando Kuro tocó el brazo de Mahiru pudo sentir lo helado que estaba. ¿Como era posible? Ni siquiera había una explicación lógica, tal vez solo se estaba enfermando o asustando. La mente de Kuro estaba cada vez más confundido.

- ¿Quieren oír una vieja historia de un vendedor como yo? Bueno, no me importa por qué igual la contaré-

- ¡¡No te atrevas bastardo!!-

-Hace muuucho tiempo atrás, cuando Misono tenía unos seis años...-

~Flash Back~

Unos hombres que ocultaban sus apariencias con unas tenebrosas capas negras parecían hablar de algo que para el niño pelimorado resultaba bastante extraño, en cambio para su contrario, un niño rubio era algo de todos los días y no significaba nada bueno.

- Misono..escúchame con atención. Cuando te diga corre, hazlo, no mires atrás y sigue sin importar que-

El pequeño niño no sabía que pasaba pero asintió. Confiaba mucho en su hermano mayor y sabía que si obedecía al pie de la letra todo estaría bien.

El niño rubio espero a que uno de los hombres se le acercara y como pudo se escabulló entre las piernas de este para distraerlos a todos y darle la oportunidad a su pequeño hermano de huir.

- ¡¡Corre Misono!! ¡¡No te detengas!!-

El niño obedeció y corrió lo más rápido que pudo, saliendo de ese lugar que por años había considerado una jaula.

~Fin del Flash Back~

El pelimorado interrumpió ese relato que odiaba escuchar. No importaba que gracias a eso estuviera con vida, simplemente no le gustaba el hecho de haber tenido una vida tan miserable en ese lugar y el solo hecho de recordárselo, le ponía la piel de gallina.

- Cállate..es suficiente..-

- ¿Por qué? Te trae malos recuerdos? Pudimos haber muerto ese día pero fue una suerte que me hicieras caso por última vez...-

Kuro estaba cada vez más confundido con todo. Y por más que su mente le pidiera una explicación o que los chicos siguieran con ese relato, el ver al castaño le congeló las palabras.

Se veía tres mil veces peor que cuando empezaron a hablar. Literalmente se había puesto pálido y su piel era fría como un hielo. Algo estaba asustado y mucho.

- Mahiru-kun sabe también de lo que hablo..¿o me equivoco? Aquella droga que mató a tu madre frente a ti es lo que te aterra recordar. Por ello te ciegas a afrontar la realidad.-

- N-no tengo idea de que habla. No recuerdo a mis padres y solo está haciendo que me asusté así que le pido que pare. No me gusta para nada esto.-

Mahiru aún hablaba pero de forma nerviosa. Parecía que aún no lograba calmarse en lo absoluto. ¿Pero por qué? ¿Qué era lo que tanto le asustaba?

- ¿A que droga te refieres?-

Kuro aunque no supiera mucho de él pueblo en el cual estaba, quería ayudar. Si esa cosa les ponía de nervios a todos significaba que algo malo pasaba.

- Esa droga es usada en niños que son robados o que son hijos de los mismos científicos que la crean. Se usa en bebés principalmente. Y solo tiene un objetivo, cambiar la mente del infante para traerlo literal como un "zombie" y que obedezca las órdenes. Para hacerlo más sencillo, esa droga te cambia totalmente. Era usada en los chicos que debían ser enviados a la guerra, pero eran muy cobardes como para caminar por el campo. Al momento de inyectarles la droga ellos tomaban una actitud muy agresiva. Pero si se usaba en niños que ya eran agresivos, esta los ponía peor o solo mejoraba su actitud completamente. Por ello no es muy segura de usar.-

- ¿Qué clase de hombre haría algo así?-

- Si dices eso es por que no conoces a las personas de este pueblo. Puede que la mayoría sean amables pero en lo más profundo de encuentran los más viles y crueles humanos.-

Si lo que decía ese chico era verdad, por qué Kuro no había visto nada parecido? Le resultaba difícil el creer que unos simples aldeanos pudieran llevar a cabo tan horrible hazaña a niños que aún no sabían ni hablar o defenderse.

- Pero, Mahiru sabe más de esto, ¿no?-

- Y-ya de lo dije. No de nada de lo que están hablando..-

- Oh..eso dices ahora..-

Continuará..

Se los juro, hasta yo tengo los pelos de punta cuando Mikuni habla o hace algo. Le tengo un poco de miedo. Y para aclarar..los dibujos ni imágenes son míos. ¡Créditos a sus respectivos autores!

¿La vida en un Circo es así?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora