- Oh..eso dices ahora..-
-¡Mikuni-san por favor! Detente. ¡Solo vinimos por unas cuerdas y ya! No queremos seguir escuchado esto por favor..-
Mahiru se veía bastante exaltado y sus acompañantes no entendían por qué, en cambio Mikuni parecía ser un experto en las facetas del castaño pues ni se inmutaba por las "súplicas" que este le hacía.
- ¿Por qué? ¿Por qué te recuerda a tu madre? ¿Te hace sentir tan culpable que quieres que guarde silencio?-
A pesar de todo el rubio mantenía una sonrisa nada agradable, como si estuviera planeando sacar de quicio al niño y eso estaba logrando poco a poco.
- ¡Oye bastardo! Detente antes de que provoques algo malo. Esto ya no es gracioso-
- Por primera vez estoy de acuerdo. Por favor darnos las cuerdas, las pagamos y déjanos ir. No estamos interesados en que..-
Mikuni puso sus manos sobre el mostrador para apoyarse en este y acercarse a susurrar algo al oído de Mahiru. Solo este pudo escuchar, pero aquello había logrado hacerle retroceder totalmente aterrado.
- ¿Mahiru? ¿Te sientes bien?-
Kuro en ese momento no pensaba que algo pudiera asustar tanto al niño, por qué literal este estaba a punto de echarse a llorar, pues sus ojos de la nada se pusieron cristalinos y su cuerpo no paraba de sacudirse ligeramente. Además de que se había "caído" al suelo mientras negaba con su cabeza. Parecía estar en shock.
- ¡¿Que le dijiste bastardo?!-
- Eso no importa. Por cierto, toma las cuerdas y no te preocupes por pagar, es por haberlos hecho escuchar mi historia..¡chauu!-
El rubio dejo unas cuantas cuerdas sobre el mostrador y se marchó a quien sabe que parte de la tienda, pues entró a un sitio que estaba cubierto por una cortina bastante larga.
En cambio ambos chicos se acercaron a su asustado amigo, quien no dejó de temblar en ningún momento y ni siquiera se puso de pie.
- Vámonos Mahi, no te puedes quedar con ese tipo.-
-Estoy de acuerdo con el perezoso. Debemos irnos ahora..así podrás descansar por lo menos unas horas-
El castaño parecía no escucharlos, era como si estuviera en otra dimensión totalmente distanciada de cualquier persona. Lo único nuevo que hizo fue cubrir sus orejas y agachar lentamente su cabeza.
- Y-yo no lo hice...y-yo no lo hice..-
Eso era lo único que repetía miles de veces a tal punto que llegó a preocupar a sus contrarios quienes trataron de levantarlo pero seguía negándose a pararse.
- Oye Shirota, hay que irnos ya-
Misono comenzaba a desesperarse pues el estar en la tienda no era muy agradable y aún así seguía acompañado a cualquiera del circo que quisiera ir, para protegerlos de su hermano mayor, solo que esta vez falló.
- Si Mahi, vamos a casa-
Kuro ponía su mejor cara para tratar de convencer al niño de que se fueran, pero su intento fue fallido de igual forma. No importaba cuántas veces tomara la mano del castaño y tratara de hacer que se pudiera de pie, este aún se negaba.
- ¡¿Quieren cerrar la maldita boca de una vez?!
Ambos chicos se sorprendieron de semejantes palabras de Mahiru. Como un chico tan dulce y tierno les había dicho esas fuertes palabras? Actuaba diferente ahora.
- Oye Mahiru, respira y ponte de pie por favor-
- ¡¡T-tu también me llevarás!!¡¡¡ Y no lo voy a permitir!!! ¡¡Prefiero morir antes que regresar!!-
El dulce y cálido brillo de los ojos del niño había desaparecido para ahora hacerse presente un frío y asustado mirar. Incluso las pupilas del chico se hicieron pequeñas hasta el punto en que era difícil reconocer el color de estás.
- Suficiente, es hora de irnos-
Y sin permiso alguno, Kuro tomó al chico de la cintura y lo cargo en su hombro como si fuera un costal, pero por alguna razón el chico se quedó tieso y no soltó alguna otra frase más hasta que llegaron al circo.
- ¡Nii-san! ¿Dónde estabas? ¿Y por qué tienes cargado a Mahiru? ¿Pasó algo?-
- Mikuni de nuevo. Será mejor llamar a Lily ya mismo-
Hyde se ofreció para ir por Lily y así lo hizo, no tardando más de 5 minutos en traer a su hermano con él.
- ¿Sucedió con Mikuni verdad?-
- Así es. No tenemos idea de que le haya dicho. Pero debe ser algo muy horrendo-
Lily pido a su hermano que pusiera con cuidado al niño en el suelo para poder revisarlo ahí mismo.
- ¿Esto ha pasado antes?-
- Frente a alguien ajeno del circo no. Mahiru siempre ha sabido cómo comportarse de una manera linda. No entiendo que pasó-
Continuará..
Uno mas jajaja, el doce a penas lo estoy escribiendo así que puede que hoy no lo publique.
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¿La vida en un Circo es así?
FanfictionKuro estaba perdido en medio de un pueblo que no conocía, hasta que una chica misteriosa le ayudó a salir de la fuerte lluvia que atacaba ese lugar, llevándolo a un circo del cuál su "salvadora" formaba parte. Ahora para poder quedarse deberá aprend...