XXVII

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____:

- ¡Chicos, miren quién vino y no solo de visita! - presentó Sol mi llegada.

Ellos voltearon hacía nosotros ya que se encontraban de espaldas.

- ¡Ey! Enana veni - me llamó Alejo y fui hacía ellos.

- Hola chicos.

Saludé con un beso en el cachete a Alejo y a Sebastián. Cuando me acerqué a saludar a Mauro me tiró del brazo haciendo que cayera sobre él y me abrazó.

- Se te extraña wacha, tenes que venir más seguido - dijo aún abrazándome.

- Tengo una buena noticia con respecto a eso - un carraspeo hizo que Mauro fuera soltándome poco a poco.

- ¿Y vo' quien so'? - preguntó Alejo refiriéndose al hombre detrás de mi, Santiago.

- Chicos, el es Santiago, mi novio - los presenté.

Los chicos sobre el sofá no de inmutaron, solo lo miraban de una manera muy particular, por no decir mal.

- ¿Y este wachin? - Sebastián se prendió un cigarro.

- Es el novio de ____ chicos, saluden... - dijo Sol incomoda por la situación.

Mauro se paró frente a Santiago y lo inspeccionó, le tendió la mano y se la estrecharon.

- Hola wacho, soy Mauro.

Después se levantó Alejo y Sebastián. Los cuales lo saludaron de la misma manera.

- Soy Alejo, un gusto capo.

- Me llamo Sebastián.

Un silencio un tanto incomodo reino el lugar.

- Bueno... - rompí el incómodo silencio y los chicos pasaron de mirar mal a Santiago a mirarme a mi felices - Nosotros... vinimos a vivir acá - dije y apreté mis labios esperando respuesta.

- DOOU.

- ¡Ya era hora wacha se te re extraña!
Intercambiamos algunas que otras palabras, me hicieron sentir súper cómoda en aquel lugar.

Las ganas de peguntar por Tomás seguían latentes mientras hablaba con las personas a mi alrededor.

- Bueno, yo me voy a ver si puedo arreglar el auto - dijo Santiago y me besó en los labios.

- Bueno bueno... soltando - escuché decir a alguien y nos separamos.

- Toma - Sol y le tendió una llave - Para que no tengas que andar golpeando, te presto la mía. Va a haber que hacer copias.

- Gracias, bueno después vuelvo, cuídate - me dijo y salió por la puerta.

A penas cruzó la puerta pregunté.

- ¿Y Tomás? ¿Está acá?

- Está arriba, parece que no fue un buen día para él, ¿no escuchas la música? - Alejo apuntó arriba.

- Si... no me había dado cuenta.
No me había dado cuenta que desde algún lugar provenía música un poco bastante alta.

- Si ya le voy a decir que en un toque le baje porque el nene tiene que dormirse temprano, que no se haga el vivo - dijo Sol -Otro nene más, esta enojado y se encierra el boludo - reí.

- Veni vamos así te vas acomodando - Sol tomo mi mano - Y ustedes, muevan el orto y ayuden con los bolsos.

- Sí mamá - dijeron los tres al unísono en tono de burla.

- Si señora se dice - jugó Sol.

Subimos y mientras más nos acercábamos a una de las puertas más fuerte se hacia la música.

Solo Es Cuestión De Tiempo ; C.R.O (Segunda Temporada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora