Solo Es Cuestión De Tiempo ; C.R.O (Segunda Temporada)

XXXVIII

-¡Jodeme que casi te garchas a Tomás! – exclamó Sol con la vista fija en la calle mientras conducia.

-En serio, y me siento re mal… Sol yo me acorde de algunas cosas…

-¿Y te acordaste, le contaste?

-No, si le contaba no me lo sacaba más de encima olvidate.

-____.

-Necesito tiempo, entende que es difícil el va a tener un hijo con OTRA yo estoy comprometida no se puede es mucho problema - me crucé de brazos.

-Boluda ni que estuvieramos en los tiempos de antes, se puede hacer cargo tranquilamenten y vos podes terminar ¿Por qué te complicas tanto? Si se quiere se puede – aparcó el auto frente el lugar el cual no pisaba hacia tiempo, el trabajo.

Suspiré pesadamente y odié por un instante ser adulta y tener que trabajar, más sintiéndome así.

-Ya te dio paja ¿no?

-Un poco – hice una mueca de disgusto.

-Ves, si eligieras a Tomás ni trabajas – rio y yo rodé los ojos.

-Gracias por traeme amiga, chau… - salí del auto.

-Te quiero no me odies por decirte la posta – dijo para después marcharse.

Entré al edificio a paso lento prolongando mi llegada a la oficina de Camila. Iba a saludarla y agradecerle por haberme dado esos días.

Al estar llegando vi salir a Alejandra de la oficina de Camila, me miró detenidamente y sonrió maliciosa oh no, ahí viene.

-Hasta que decidiste volver y dejar de chuparle la guita a tus amigos y a mi novio.

-Cállate mejor – iba a seguir mi caminata y me detuvo atravesando su brazo en el pasillo - ¿Me dejas pasar? – rodé los ojos cansada.

-Hablemos primero.

-¿De que queres hablar? Yo no tengo nada que hablar con vos - me crucé de brazos.

-De Tomás, de mi hijo, de mi y la persona que se esta interponiendo, vos - arqueé una ceja y reí irónica.

-¿Sabías que estás haciendo una chiquilinada no? Yo no estoy con Tomás.

-Pero queres, ¿te pensas que yo no me doy cuenta? Me doy cuenta de como lo miras y como lo queres enganchar. Te voy a decir una sola cosa, cuidado, porque si el me deja yo no voy a dejar verle a su hijo, fijate que tanto lo queres y que estas dispuesta a que el pierda por vos. Tambien quiero que te vayas de la casa, urgente.

-Estas loca, correte o te corro, a mi no vas a venir a amenzarme y mucho menos decirme que mierda tengo que hacer, deja de joderme porque me vas a conocer.

-Y vos a mi – acercó su rostro al mío mirandome mal.

-¿Qué pasa aca? – Camila salió de su oficina y nos miraba expectante.

-Nada, le daba la bienvenida – Alejandra sonrió falsamente.

-___ veni pasa – me llamó Camila del otro lado.

-Voy - mire a Alejandra la cual aún no sacaba su brazo - Con permiso – Alejandra quitó su brazo y ambas nos miramos mal para luego seguir con lo nuestro.

-Hola Cami, venía a agradecerte por ser tan comprensiva conmigo y darme unos días. Me hizo muy bien – sonreí calidamente.

-No pasa nada esta bien bella, igual necesito que después me cuentes que paso… que onda tu vida.

-Mañana si queres tomamos un café en mi casa y hablamos, ¿te parece?

-Oh si, me parece perfecto – sonrío – Bueno, tengo que seguir con unas cositas linda ¿necesitas algo más?