28.Verdad a medias.

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Mi padre negó con la cabeza. Sí él no sabía menos yo entendía cómo era qué tenía a un hermano enfrente de mí.
Salí de mis pensamientos cuando note que Lauri discutía con mi supuesto hermano.

-... qué así sea - dijo Lauri - no necesito de tu aprobación.

- Ni yo de la tuya - dijo mi supuesto hermano.

-¿Pero qué? - dije perdida sin saber de qué hablaban.

- Vamos a tener una pelea amistosa - dijo Lauri riendo.

-¿Y éso es divertido?- le pregunté molesta por su actitud.

- Es algo personal - dijo mi hermano - y no creo que lo entiendas.

-¿Entenderlo? ¡Claro que no entiendo que ambos se agarren a golpes!

- Elisa - dijo mi padre - quiero que hablemos en privado.

-¿Ahora?- dije sorprendida.

No quería perderme su pelea "amistosa" pero seguí a mi padre.

Se detuvo frente al cuadro donde estábamos yo y Lauri.

- No se qué orilló a tu madre a ocultarlo - dijo cansado - pero se que es tu hermano y siente responsabilidad hacia tí.

-¿Responsable por mi? No me conoce.

- Déjalos pelear- dijo el calmado - ambos deben confiar el uno en el otro.

-¿A éso le llamas confiar? Yo no entiendo nada.

- Es el honor de ambos el que está en juego.

- Yo...

- Tu esposo quiere demostrar que es digno de tí.

Miró el cuadro. Ambos estábamos frente al cuadro.

Lo ví sonreír.

- Tu madre sabía que él sería tu esposo,que tú lo elegirías.

Note algo extraño en el cuadro. Había cambiado.  Lauri se veía algo extraño... Muy serio. Y detrás de nosotros estaba el chico, mi supuesto hermano.

- Él no estaba en el cuadro - dije notando que también yo cambié.

- Es normal, las personas cambian - dijo mi padre con nostalgia.

- A veces no son quién crees - dije pensando en mi supuesto hermano.

- Otras veces son todo lo contrario - dijo mi padre - reflejan su interior con nitidez.

- Debería regresar...

Cuándo entramos me sentí realmente decepcionada. Ellos no peleaban.
Estaban sentados en el piso riendo.

- Era una plática entre hombres - dijo Lauri.

-¿Así que ya dejaste que él sea tu esposo?- preguntó mi hermanito.

- Éso no te incumbe - le grité.

- Tu hermano dice que te estuvo siguiendo - dijo Lauri cambiando el tema.

- Al menos no se parece a mí - dije burlándome de él.

- Llevas una rutina muy predecible - se quejó James.

-¿Y cómo perdiste a mamá?- le pregunté.

- Eso es algo que no hablaré contigo - dijo él.

-¿Y cuándo será?

- Nunca.

- Me parece que debemos buscar una habitación para él - dijo Lauri interrumpiendo.

Siempre tratando de salvar la situación.

- Qué sea lejos de mí - pedí con enfado.

- Por mí está bien - dijo James - así no tendré que soportar tus ruidos.

-¿Cómo sabes que hago ruidos?

Me puse de los mil colores cuándo insinuó eso. Supuse de qué hablaba.

- Los siento - dijo Lauri algo avergonzado - creo que mencioné que hablas en sueños.

-¡A ustedes no les importa lo qué yo haga !- estalle.

- Qué mal carácter,te pareces a mamá.

No pude más y le solté una cachetada. Me encerré en mi... Bueno,en nuestra habitación sin ganas de hablar con nadie.
Y recordé la carta que James me dió.
La abrí con algo de impaciencia.

Ella tenía que decirme porque nos dejó. Y porqué no supe de James hasta hoy.
¿Lo haría? ¿Y dónde estaba ella?
¿Qué fue lo qué pasó para que huyera?

Cláusula secreta (Editada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora