Historias De Terror

Tiempo De Sangre

Mi madre y yo vivíamos de forma modesta pero no nos faltaba nada, teníamos una tienda en la cual vendíamos de todo un poco y con eso nos manteníamos, yo en ese entonces estudiaba en la mañana y en las tardes le ayudaba a atender el negocio y dejaba mis tareas para la noche y los fines de semana salía en la noche con amigos.

En ese entonces no pasaba nada raro pero después comencé a notar que iban tipos extraños a la tienda a buscar a mi madre, siempre los veía cuando yo estaba por llegar allí a trabajar. Le preguntaba a ella quiénes eran pero nunca respondía, me decía que no había nada de que preocuparse y entonces decidí no preguntar más.

Después de varias visitas de esos hombres nuestras ganancias ya no eran las mismas, ya nos quedaba muy poco, no entendía por qué si siempre vendíamos cosas y teníamos buenos clientes, mi madre sólo decía que era normal en cualquier negocio tener sus altas y bajas pero que después nos recuperaríamos pero no fue así.

Hubo un día en la noche en el que yo no quise salir con mis amigos y me dirigí a la tienda para ayudarle a mi madre un poco ya que tampoco tenía trabajos que hacer y vi que esos tipos estaban con mi madre y al parecer discutían con ella, me oculte para tratar de oírlos pero fue más mi sorpresa cuando vi que uno de ellos sacó una pistola y comenzó a apuntarle a ella, yo entre en pánico pero sabía que si interrumpía nos podría pasar algo peor a las dos.

Frustrada sólo me quedé ahí viendo que pasaba, sentí un gran dolor al ver como ese hombre le disparaba a mi madre y yo estaba ahí sin hacer nada. Después de eso salieron huyendo y para mi buena suerte no me vieron, entre corriendo y encontré el cuerpo de mi madre tirado en el suelo y aún estaba viva, llamé a emergencias pero fue demasiado tarde, cuando llegaron ya estaba muerta a causa del balazo que recibió en el pecho.

Pasó su velorio y entierro y yo me quedaba horas frente a su tumba llorando por su partida, me había quedado sola y no tenía a nadie más pero tomé fuerzas para prometerle en su misma tumba que vengaría su muerte así fuera lo último que hiciera en mi Vida y así iba a ser. Reabrí la tienda para poder seguir manteniéndome y traté de continuar mi vida aunque fuera difícil y por otro lado me dediqué a investigar un poco por que la habían asesinado para planear mi venganza.

Comencé a preguntarle a los clientes más cercanos y me dijeron que esos hombres que rondaban el barrio eran personas que cobraban dinero a los lugares con más ganancias, era algo así como una extorsión para que no le hicieran nada a los dueños o destruyera los negocios y una de esas personas a las que le pregunté me dijo que tal vez ellos habían sido quiénes mataron a mi madre y tenían razón, ellos fueron por que yo misma los había visto hacerlo.

Pasó un mes y estos malditos habían dejado de ir a la tienda y no sabía cómo buscarlos pero eso cambiaría, llegaba el fin de semana y apareció uno de ellos y justo fue a mi tienda y me preguntó que si era nueva allí, lo que me daba a entender que no sabía que yo era hija de esa mujer que asesinaron y lo cual usaría a mi favor para vengar la muerte de mi madre. Fingí que si era nueva, que me habían contratado para manejar el lugar y me fui ganado un poco su confianza.

Estábamos conversando y justo llegan otros dos de ellos incluyendo el que disparó el arma, sentí tanta ira pero tuve que controlarme para poder ser amiga de ellos, así se pasaban los días hablando con ellos hasta que les dije que yo quería hacer lo mismo que ellos por que seguramente se ganaba más dinero y eso era lo que yo quería, o lo que les hice creer. Lo pensaron unos días y al final me aceptaron en su organización, una vez dentro acabaría con ellos y con los que pudiera para que ya no le hicieran más daño a personas inocentes sin importar lo que pasara conmigo al final.

Cuando ya llevaba seis meses con ellos ya sabía hasta donde vivía cada uno lo que era perfecto para mi, así me vengaría de todos por separado, comencé con el que disparó. Lo llamé para concretar una cita en su casa para hacer unas supuestas cuentas, antes de llegar conseguir un calmante que le pondría en su bebida para hacerlo más fácil ya que era más grande y fuerte que yo y no podría con él. Una vez que llegué a su casa le ofrecí servirle un trago y mientras se lo servía puse la sustancia en el y se lo di.

Minutos después comenzó hacer efecto y a quedarme casi dormido, aproveché el momento para atarlo a su silla, un par de horas después despertó y me miró intrigado al verse atado, parecía no entender lo que pasaba pero le expliqué todo, le dije que yo era la hija de esa mujer que habían asesinado fríamente en su propia tienda y que yo los había visto, conocía sus caras y me vengaría de cada uno por quitarme a la persona que más amaba en el mundo comenzando por él. Desesperado trató de zafarse pero no podía, yo sólo podía reírme al ver su cara de pánico y comenzó a suplicar por su vida.

- ¿Acaso ustedes tuvieron compasión de mi madre? Le dije. Obvio no, simplemente la asesinaron sin piedad y lo pagarán.
Saqué una navaja que guardaba en mi bolso y lo apuñale múltiples veces hasta que dejó de respirar,  toda su sucia sangre cubría el lugar y ahora seguían los otros dos. Tomé su celular y les mande un mensaje para que se reunieran en la casa de él para que no sospechaban nada y me escondí mientras llegaban para tomarlos por sorpresa, minutos después llegó sólo uno y ve a su amigo muerto en la sala cubierto de sangre.

Sin esperar más me lancé sobre él gritándole que pagarían por lo que le hicieron a mi madre mientras le corté el cuello con la misma navaja, cae al suelo desangrándose poco a poco mientras finalmente muere. Ahora sólo faltaba su jefe pero no llegaba, justo cuando pensaba en irme de allí y planear como asesinarlo me sorprende por la espalda, después de forcejear un poco logre quitarle la pistola que llevaba y era justo con la que había asesinado a mi amada madre, se quedó inmóvil pero luego me dijo que si le hacia algo más de sus hombres me buscarían para matarme pero no me importó, no lo pensé más y le dispare justo en la cabeza matándolo rápidamente.

Busqué armas en la casa ya que como eran hombres malos era obvio que tendrían por si acaso llegaban más de sus hombres y así fue, desde dentro de la casa vi como se aproximaban varios armados y me preparé para disparar sin importar si sobrevivía o no, total, ya había asesinado a los que quería y había cumplido mi promesa de vengar la muerte de mi madre.

Logré matar a todos hasta que me quede sin balas, así que ya no tenía como defenderme pero noté luego que tenía una herida grave en el abdomen de una bala y me estaba desangrando rápidamente, entendí que ahí perdería mi vida también pero me moriría feliz por que iría a encontrarme quizá con mi madre en el cielo. Mientras el momento llegaba sólo pensaba en que hubiera sido de nuestras vidas si no hubiese pasado nada, tal vez seguiríamos en la tienda y yo lograría graduarme al fin pero eso ya no sucedería.

Nunca hubiera siquiera pensado en convertirme en una asesina a sangre fría pero a veces hay situaciones que pueden llevar a que una persona tome ese tipo de decisiones y este fue mi caso, todo lo que hice fue por ella y por vengar su muerte injusta y tal vez más muertes que haya habido en manos de esos malditos. FIN.