Naruto: El As de Gabriel

Rayos del alba

Deslizó las manos por el mango de Durandal, mientras descargaba un golpe directo en contra del Mandamiento de la Verdad, generando un inmenso viento que rodeó a ambos combatientes. Mantuvo el paso, aleteando su par de alas, haciendo fuerza con la espada sagrada hacia abajo, intentando cortar en dos a aquel demonio con toda su fuerza.

Halberd se moví, desviando la ancha y pesada hoja de Durandal, dejando un hueco inmenso en la defensa del Saint, saliendo disparado por el golpe del puño de Galand, estrellándose de lleno contra el suelo, levantando una inmensa nube de polvo. El mandamiento movió su lanza, desviando el fuego generado por el otro Saint que avanzaba hacia ellos, descargando una serie de lanzas de luz envueltas en fuego y rayo. Apretó el agarré y golpeó a Dulio con Halberd, mandando al ángel contra el otro extremo del cráter, generando otra nube de humo.

Galand volvió a estirarse en sus cuatro metros de altura, moviendo su arma. Clavó la punta en el suelo y tiró, sacando un cacho del mismo suelo, lanzando la enorme roca contra Naruto. Movió Durandal, cortando aquel escombro lanzado por el enemigo, recibiendo un agarre férreo del demonio y encontrándose contra el suelo, escupiendo sangre, soltando algunas maldiciones. Galand de la Verdad apretó el agarre, sonriendo.

Se apartó, esquivando una masiva carga de rayos en su contra.

―Parece que aun peleareis en mi contra―declaró el demonio, mostrándose calmado, sin preocupación por que lo vencieran―. Es innecesario que lo hagáis. No estáis a mi nivel. Pero disfrutaré con vuestra sangre escurriendo por mis manos, jajajaj.

Naruto apretó el agarre sobre Durandal, levantándose. Aunque no pudiera usar el Sunshine, no permitiría que aquel demonio se le escapara como el anterior, causando más desastres por todo el mundo humano. No se lo podía permitir. No quería ver a más personas muertas.

Dulio limpió la sangre escurriendo por su boca.

―Si no estuviéramos en una ciudad, usaría la totalidad de Zenith Tempest para acabarlo―declaró el Saint, demostrando que se estaba conteniendo en la batalla. Y era cierto. Solamente estaba usando una ínfima parte del poder de la Longinus, por lo que la desventaja entre él y Galand se debía más al entorno que al poder en sí―. Lo que haremos, será hacerte retroceder.

―¿Uh?

Galand movió el arma, bloqueando Durandal y una espada de luz envuelta en llamas, sintiendo una gran presión sobre él, generando que el suelo bajo sus pies se rompiera ligeramente, dejándolo algo sorprendido por lo que ambos Saint lograban.

Estando distraído, Naruto se coló por debajo de la defensa del Mandamiento, mandándole un tajo con todas sus fuerzas, estrellando al demonio Primigenio contra el otro extremo. Dulio generó llama que lanzó en contra de este, rodeándole por completo.

Aunque sabían que eso no lo detendría.

Dulio se estrelló contra el suelo, escupiendo sangre por el golpe. Sobre él, Galand se mostraba satisfecho viendo la sangre por el rostro del Saint, apretando el agarre sobre Halberd, alzándola sobre su cabeza, dispuesto a ejecutar al ángel de diez alas blancas.

Y lo intentó.

Durandal se movió, bloqueando a Halberd, generando una ligera brisa de viento. Galand movió la cabeza, encontrándose con una lanza de luz en su ojo derecho. Gritando, el Mandamiento se quitó de encima del exorcista, llevando la mano contraria al ojo, notando como sangre escurría entre sus dedos, molesto ligeramente.

Movió a Halberd, intentando cortar a su adversario, encontrándose nuevamente con Durandal impidiendo tal acto. Frustrado, Galand pateó a Naruto, estrellándolo contra el suelo. Generó masa oscura, mandándola en contra del Saint más joven, esperando que ello acabara con el ángel, sonriendo cuando oyó un gemido de dolor.