Renata: ¿Puedes apurarte? Caminas muy lento –le decía a su hermano mayor que venía con la vista fija en su celular. Vestía con un pantalón negro un poco roto de la rodilla derecha y una playera amarilla un poco arrugada, tenía su cabello un poco despeinado y usaba unos tenis blancos. –Te hubieras puesto tu camisa rayada, te va mejor. Y te hubieras peinado...
Joaquín: En primer lugar, no me apures, vamos con tiempo, en segundo, no critiques mi ropa, por favor. Sólo es una salida con Diego, y es al cine, así que así estoy bien.
Renata: Si tú lo dices... -sonrió para sus adentros recordando que siempre pasaba horas encerrado en su cuarto arreglándose cuando iba al cine con Emilio. No quiso mencionarle que este último asistiría a la salida, suficiente era con haberle dicho a su mamá que obligara a Joaquín a que la acompañara.
Llegaron al lugar a tiempo y Textos ya se encontraba ahí, los saludó y les comentó que el chino estaba buscando donde estacionarse, así que comprarían los boletos de una vez. Para Joaquín, parecía que habían pasado años desde que había salido con ellos sin tanta incomodidad, ya que sentía que eran más amigos de Emilio que de él, pero ahora también eran bastante cercanos a Renata. Platicaban en lo que estaban formados hasta que unos rizos familiares desviaron la atención de Joaquín. Era él.
Emilio se iba acercando junto con su amigo Diego hacia su dirección, no sabía que iba a venir. Vestía una playera blanca estampada sin mangas dejando al descubierto sus brazos y unos pantalones negros, se miraba bien. Joaquín instantáneamente llevó sus manos a su cabello en un intento por acomodarlo. Después se salió de la fila y corrió.
Renata: ¿A dónde vas? –le gritó.
Joaquín: ¡Al baño! –dijo en un grito ahogado. Su hermana se giró y observó a Diego y a Emilio acercándose lo que causó su risa –Le dije que se cambiara como tres veces...
Diego: Sentimos la tardanza –decía saludando con un beso en la mejilla a Renata –Fue culpa de este niño, se cambió de ropa como diez veces –dijo señalando a Emilio quien desvió la mirada haciendo una mueca con la boca.
Emilio: Wey...Joaco se fue apenas me vio –suspiró –Te digo que no quiere saber nada de mí.
Renata: Te aseguro que no fue por eso...sólo fue al baño. –la miró de reojo y notó que estaba un poco sonrojado –Bueno, iré a comprar palomitas...
Diego: Iré contigo –se fue con ella, tomándola ligeramente del brazo - ¿Qué se te antoja comer? Yo invito.
Renata: En realidad no tienes que hacerlo –sonrió de lado.
Diego: Oye, si vamos a fingir hay que hacerlo en serio... le guiñó el ojo provocando una sonrisa en la pequeña.
Joaquín intentaba acomodarse el cabello de manera desesperada en el baño, también trataba de arreglarse la playera, odiaba no haberse probado alguna otra cosa. Pero no sabía que Emilio iría, ¿qué hacía ahí? No estaba listo para verlo, no así. Todos los días se trataba de preparar mentalmente para verlo en los compromisos de trabajo, ya tenía un sistema para enfocarse en él únicamente como Aristóteles, pero ahora, estaba ahí, luciendo increíble con su sonrisa y Joaquín había decidido no arreglarse como protesta ante la exigencia de su madre de fungir como chaperón. Nunca había odiado tanto a su hermana por haberle ocultado ese ligero detalle.
"Soy un desastre, ¿qué voy a hacer? Pensé que todo estaba bien, pero mi corazón late con el simple hecho de verlo, no quiero tenerlo cerca, me duele mucho. ¿Qué hago?, ¿hasta cuándo vas a dejar que paren mis sentimientos por ti, Marcos?"
Emilio: ¿Joaco? –su voz hizo que el castaño se sobresaltara y que todos sus intentos porque su corazón se tranquilizara fueran en vano. Estaba ahí, en el baño con él; se acercó un poco - ¿Estás bien?

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Sólo si es contigo - Emiliaco
FanfictionLa historia de los jóvenes actores, Emilio Osorio y Joaquín Bondoni. Protagonizando una historia que marcará la historia de la televisión mexicana, descubrirán su identidad y sus propios sentimientos, enredándose en un amor fuerte e inocente. ¿Podrá...