A la mañana siguiente Joaquín se despertó primero y quiso escabullirse a su cama, sin embargo, en cuanto se liberó de las cobijas y se iba a levantar los brazos de Emilio lo rodearon impidiendo que se moviera.
Emilio: No te vayas... -inundó su cara en el cabello de su solecito.
Joaquín: Amor, mi mamá puede venir –dijo sintiendo una electricidad recorrer su cuerpo con la respiración de su Emilio sobre su cuello, pensando a la vez que era hermoso que no lo dejara ir.
Emilio: Dile que te caíste, que por fortuna yo estaba aquí para agarrarte. –Joaquín se volteó para quedar de frente a él y le besó la nariz. –Por cierto, buenos días, amor.
Joaquín: Buenos días, guapo –le acarició la mejilla y se levantó del piso.
Emilio lo miraba acomodarse en la cama, amaba verlo en pijama, sentía que podía estar a su lado siempre. Decidió levantarse y se dirigió al baño para lavarse la cara y los dientes. Al regresar se acercó a Joaquín para revisarle la temperatura.
Joaquín: Ya me siento mejor.
Emilio: Si, por lo visto ya no tienes fiebre, en la noche si pudiste dormir bien a pesar de los mocos. -trataba de no mostrarse cansado, no había descansado al 100%, ya que se despertó cada hora para asegurarse de que estuviera bien, aún así, para él había sido perfecto dormir a su lado.
Joaquín: Si descansé bastante a gusto...a tu lado. ¿Si te dejé dormir?
Emilio: Pues te diré que, quisiera más noches así...sólo si es contigo.
En ese momento fueron interrumpidos por sus celulares que recibieron un mensaje al mismo tiempo. Ambos rieron y lo revisaron al mismo tiempo, era un mensaje de la producción de la novela.
"Emilio y Joaquín, el productor Osorio les solicita su presencia en su oficina mañana temprano a las 8:30 am para tratar situaciones recientes, próximos eventos y cuestiones del proyecto. Favor de llegar puntuales."
Joaquín: ¿Sólo nosotros dos?, ¿qué crees que nos quiera decir?
Emilio: No lo sé –dijo extrañado leyendo detenidamente el mensaje, se quedó pensando después de leer "situaciones recientes" –Me da mala espina.
Joaquín: A mí también... -dijo con voz tenue haciendo que Emilio notara que había pensado en voz alta.
Emilio: Tú tranquilo –dijo sonriendo –De seguro no es nada de lo que nos estamos imaginando. Todo saldrá bien.
Joaquín le devolvió la sonrisa, aunque no estaba muy convencido. Emilio le había dicho que él lo defendería, pero no quería que llegara el momento de hacerlo, no lo quería meter en problemas y mucho menos que algo saliera mal con su papá. Trató de no pensar mucho en eso y disfrutar la mañana con su novio. Desayunaron juntos en familia, todos se alegraban de que Joaquín estuviera mejor, platicaban de muchas cosas que Emilio en verdad se sentía parte de ellos, así como ellos ya eran parte de él. Al terminar Emilio se ofreció a lavar los trastes en lo que Joaquín se metía a bañar.
Sra. Elizabeth: Emilio, muchas gracias por todo. –dijo en cuanto entró a la cocina con trastes sucios. -Por estar aquí y por lo mucho que te preocupas por mi hijo.
Emilio: Yo lo quiero mucho, y en serio siempre trataré de que esté bien.
Joaquín salió del baño sin playera ya que se le había olvidado, fue a su habitación y vio a Emilio recostado en su cama, esté se incorporó al verlo y le sonrió. Tomó una playera y no pudo notar que su novio lo miraba de forma intensa.
Joaquín: ¿Estás bien, amor? –dijo poniéndose la cabeza.
Emilio: Creo que en serio me gustas mucho... -dijo un poco sonrojado. Joaquín le sonrió le se acercó para besarlo tiernamente en los labios. –¿Cómo te sientes?
Joaquín: Mucho mejor, sirvió que pasé la mejor noche de mi vida.
Emilio: Un día hay que repetirlo, precioso. –le besó la nariz. –Me siento más tranquilo de que estés bien. Yo debo de reportarme con mi madre, no quisiera irme...
Joaquín: Agradezco mucho todo lo que has hecho por mí, pero sí tienes que ir a casa. –lo abrazó de la cintura. –Amé tanto tenerte aquí.
Emilio: Y así estaré pegadito a ti mucho tiempo.
Se despidió de Joaquín y de su familia y partió para su casa. En el camino intentó mandarle mensaje a su padre para preguntarle de que se trataba la reunión de mañana, intento inútil como siempre ya que nunca le contestaba los mensajes. No quiso tomarle tanta importancia, sólo quería pensar en que su bonito ya estaba mejor y esperaba no se estresara demasiado por el asunto.
A la mañana siguiente, ambos chicos llegaron temprano justo como se les había indicado. Joaquín llegó con su madre y Emilio corrió a abrazarlo. Entraron a la oficina del productor quien les pidió se sentaran con una leve sonrisa, una sonrisa que su hijo odiaba.
Osorio: Sé que es muy temprano, pero les tengo la noticia de que saldrán en el programa de Cuéntamelo ya justamente en unas horas más.
Sra. Elizabeth: ¿Ahorita?
Osorio: Si, fue una sorpresa la premura y lástima, odio tener que avisarlo así, pero es una buena oportunidad. Así que quiero hablar de ciertos detalles que tratar ahí.
Emilio: ¿Cómo qué? –algo en él se había relajado, pero al observar a Joaquín muy nervioso se puso un poco a la defensiva.
Osorio: Lo más seguro es que les pregunten lo de siempre, acerca del beso. Sería buena idea decir que si habrá besos en la novela.
Joaquín: ¿Besos?
Emilio: ¿Más de uno? –rio levemente.
Osorio: Si, ya Pablo y Santi están trabajando en los guiones finales y muchas cosas ya están completas y autorizadas y bueno no creo que ustedes tengan inconveniente, ¿o sí?
Emilio: Para nada, bueno no sé Joaco.
Joaquín: No...por mí, no... –dijo tímidamente; el productor los miró severamente, mirada que Emilio no iba a dejar pasar por alto.
Emilio: Sabes que quería formalizar con Joaco, y bueno, medio tocando el tema, si te quería decir aquí enfrente de él y de su madre que ya somos novios y nos queremos.
Osorio: Si..., ya lo habías comentado; también de eso quiero hablar.
Emilio: Chingada madre...
Osorio: Yo soy feliz si tú eres feliz, Emilio, eres lo más importante de mi vida. Admito que no se me está haciendo fácil la idea, pero te apoyo. Joaquín, sé que eres un buen chico, y confío en que quieras a mi hijo...
Joaquín: Si, señor de eso no tenga la menor duda...
Osorio: Está bien, como papá, sepan que los voy apoyar, sólo hagan las cosas bien. –Ambos chicos sonrieron y sólo pudo suspirar al verlos –Sin embargo...
Emilio: Puta madre....
Osorio: También soy su productor, su jefe, por lo tanto, quiero y tengo que ser muy claro con ustedes. No quiero que hagan pública su relación.
Próximo: Quisiera besarte.
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Sólo si es contigo - Emiliaco
Fiksi PenggemarLa historia de los jóvenes actores, Emilio Osorio y Joaquín Bondoni. Protagonizando una historia que marcará la historia de la televisión mexicana, descubrirán su identidad y sus propios sentimientos, enredándose en un amor fuerte e inocente. ¿Podrá...