cap. 3 La Fiesta parte 1

3.2K 189 33
                                    

Pensamiento de la castaña

No sé lo que está pasando con Lauren, primero me trata mal y ahora me defiende de un tal Mahone; nunca pensé que convivir con gente de mi edad fuera tan estresante..., Pero ver su imagen firme con autoridad avasalladora, dejando sin habla a todos mis compañeros, siento una admiración profunda; nadie se le opuso en el salón, ni él que me insulto por mi forma de vestir, él se miraba con demasiada rabia contra mí, pero no intento nada, bajo la cabeza y me pidió disculpas, mordiendo cada palabra con gran esfuerzo, entretanto una tensión reinaba en todo el salón; el profesor solo se quedó estático, esperando que se terminara la furia de Lauren..., ¿Aún no entiendo porque todos le tienen tanto miedo?

Después de terminar el primer periodo de clases, me dispongo a ir a agradecerle a Lauren, por haberme defendido ella sale del salón demasiado rapido, pero no es impedimento para seguirla; después de todo siempre he tenido buena condición física, trotando o caminando puedo hacerlo por horas sin sentir fatiga, así que la alcanzo en cuestión de minutos; la llamo varias veces pero ella me ignora completamente o no me escucha, hasta que me colma la paciencia y la tomo del brazo para detenerla..., un muy grave error; con una fuerza descomunal, siento que me toma del brazo ejerciendo una opresión en el y me enfrenta con impaciencia...

-¡Mierda payasita me asustaste! ¿Acaso quieres morir?, ¡si valoras un poco tu vida, nunca me vuelvas a tocar de esa forma! (mientras suelta el agarre)

-¡Solo quería agradecerte que me hayas defendido, no tenías que ser tan tosca conmigo! (sobo mi brazo adolorida, ella es demasiado fuerte)

-¡No te defendí así que no me agradezcas nada, es solo que ese imbécil me irrita, así que lárgate y no te me acerques entiendes!

-¡por qué me tratas así, si apenas nos conocemos, además mi nombre es Ca... digo Karla, no payasita! (por estar enojada casi suelto mi nombre, es que ella me hace perder el control)

te trato así por qué se me pega la regalada gana, algún problema con eso Paya... sita! (me lo decía con mucho fastidio)

Eres una grosera Lauren! ¡que te cuesta tratarme amablemente y decirme por mi nombre, acaso es tan difícil de entender que me llamo Kar..la, vez es muy fácil!

-¡Bueno ahora sí ya me hartaste no te iba a hacer nada, pero parece ser que pides a gritos que me cobre el favor..., entonces escúchame payasita, yo nunca hago nada sin pedir algo a cambio!

-¿De qué hablas?

Pues que ahora me perteneces y voy a hacer lo que me plazca contigo, así que esta va a ser la forma que quiero mi pago!

Veo a Lauren acercarse peligrosamente a mí, agarrando fuertemente mis manos y ponerlos encima de mi cabeza, sentía su cuerpo pegarse demasiado junto al mío, mientras su rodilla se posiciona entre el medio de mis piernas, su mano libre comienza a descender hasta llegar a mi blusa, comenzando a desabrochar botón por botón y su respiración pesada pegaba en mi cuello, me estaba asustando demasiado por lo que estaba haciendo; en el pasillo no se miraba ninguna persona, estábamos completamente solas, su mirada fiera me causaba escalofríos de miedo, solo veía un odio profundo en ella; pensé que me iba a hacer algo, pero de repente suelta su agarre y se separa para soltarse a reír, como si lo que acabará de hacer fuera un chiste.

-Cálmate payasita no te pienso hacer nada; es una lástima que no estés tan buena..., como puedes ver no puedes ofrecerme nada, no me sirves ya lo comprobamos ¡así que aléjate por tu bien, vete a contar un chiste o lo que sea que hagan en su circo!

LA REBELDE DE MI CORAZÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora