Capítulo 45 - Revelación

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La hora de la quedada con Roi y su hermana llega pero Agoney, que no ha dormido en toda la noche por estar con Raoul, no tiene ninguna gana de salir de la cama. No está. Se ha ido y no sabe cuándo lo volverá a ver. Decide dejar de lamentarse y seguir con su vida, tienen un plan que tramar.

-Buenos días -le saluda un sonriente Roi cuando entra por la puerta de su habitación

"Buenos días aún que no sabes la que ha montado tu amiguito..." se muere por decirle el moreno.

-Buenas, y mi hermana? -pregunta algo desanimado Agoney, gesto que no pasa desapercibido por el castaño ya que el moreno siempre tiene una sonrisa que ofrecer a todo el mundo

-Ahí dentro, creo que echando la cena de ayer -hace una mueca el de ojos verdes- y Raoul?

-Se fue -suelta de golpe el moreno sobresaltando a Roi

-Cómo que se fue? Dónde se fue?

Agoney se limita a encogerse de hombros sin saber muy bien cómo explicarle a Roi lo que ha pasado esta noche.

-Tiene que haber una explicación...

-Me lo contó todo, Roi -explica Agoney susurrando para que su hermana no los oiga- me explicó su plan, sus motivos para venir, todo...

-Joder... y cómo estás? -pregunta algo perplejo el castaño

-Le dije que no me importaba, que prefería que se quedara conmigo, pero se fue y yo no pude hacer nada

-Él es así -le consuela Roi acariciándole la espalda para tranquilizarlo- cuando se le cruzan los cables... tú dale tiempo, quizás se dé cuenta de que no tiene sentido irse y alejarse de todo

-No, Roi, iba muy en serio, de hecho creo que no volverá hasta que se vea capaz de empezar a llevar a cabo su venganza

-Joder... y qué vas a hacer?

-Creo que voy a cubrirle -asiente convencido el moreno- darle una coartada pero sin ayudarle

-No entiendo

-Raoul ahora tiene la confianza de gran parte de la familia, puede que incluso la de mi padre -explica el moreno- es una misión suicida intentar atacarle yéndose y perdiendo su confianza, así que voy a darle una coartada, algo que explique que se haya ido sin decir nada y que no eche atrás a nadie a la hora de regresar

-Por qué haces eso? Sabes que así tendrá más facilidad para cargarse a tu padre, no?

-Lo sé -asiente Agoney- pero mira, mi padre es un puto mafioso que está más lleno de mierda de lo que te puedas imaginar, tiene a muchos enemigos detrás y cada vez menos fuerza, pues estamos perdiendo adeptos ya que no simpatizan con su forma de gobernar

-Hostias... no tenía ni idea...

-Solo lo sabemos los más cercanos a él, eso podría hacerle vulnerable a ojos de otros enemigos -se encoge de hombros el moreno- el caso es que no hay que ser muy listo para averiguar que a mi padre le quedan dos telediarios si la cosa sigue así

-Entonces te parece bien que se lo cargue? -pregunta sorprendido el de ojos verdes

-No es eso... me dolería, pero no sé... al fin y al cabo mi padre y yo nunca hemos tenido muy buena relación, ya lo sabes... Me está costando mucho ordenar mis prioridades -confiesa Agoney- y cuando al final mi padre muera, yo quiero tener conmigo a Raoul, así que necesito su nombre limpio

-O sea que no vas a ayudarle porque es tu padre y no quieres que muera, pero vas a facilitarle las cosas porque le quieres y quieres que en un futuro la familia pueda confiar en él? -resume Roi con un cacao mental más grande que el de Agoney- un poco contradictorio, no?

-Yo qué sé, Roi? Tengo un mareo que ni yo sé lo que quiero -exterioriza el moreno prácticamente tirándose de los pelos- solo necesito que Raoul esté bien... y creo que me da igual que tenga que pasar por encima de mi padre para ello... pero eso me asusta, qué clase de hijo soy?

-Agoney, eso de que a los padres hay que darles cariño incondicional es falsisimo, vale? El cariño se lo tienen que ganar y si tu padre ha sido un capullo contigo toda su vida, es normal que aunque le quieras, prefieras a Raoul -explica Roi- te ha hecho perder tu infancia rodeado de armas, te ha hecho esconder tu verdadero yo por el qué dirán, te quería casar en contra de tu voluntad por el negocio... es comprensible que te cueste querer a un hombre que te ha tratado tan mal durante toda tu vida...

-Cómo sabes todo eso?

-Porque a Glenda le hizo lo mismo, y ella no es que esté muy apegada a vuestro padre tampoco... yo creo que es perfectamente entendible

-Desde fuera es muy fácil decirlo, el mal hijo no eres tú...

-Al contrario, yo mejor que nadie sé lo cabrones que pueden ser los padres, los míos me abandonaron cuando no tenía ni cinco años... por muy padres míos que sean, yo no les puedo querer y estaría dispuesto a matarlos por salvarle la vida a Raoul, por ejemplo -explica el castaño- no querer a tu padre no siempre es ser mal hijo, igual es que él no ha sido buen padre

-Joder pero a ti te abandonaron, no me compares...

-Y él ha hecho que tú estés a punto de abandonarte a ti mismo, Agoney, cuando Raoul y yo llegamos eras todo fachada, sonreías siempre aunque te estabas muriendo por dentro por estar escondido de todo el mundo -le intenta hacer entrar en razón Roi- si Raoul no hubiese llegado a tu vida, te habrías casado con Aitana, no es así?

-Sí... -asiente cabizbajo el moreno

-Y a tu padre le hubiese dado absolutamente igual tus sentimientos, igual que pasó de los de Glenda cuando la casó con el capullo que se cargó a vuestra madre -razona el de ojos verdes- además, los dos sabemos de sobra que sabe que eres gay, solo que ha preferido ignorarlo por el qué dirán y por no dejar la familia en manos de un "maricón" abiertamente, si un padre te quiere no te hace esconderte por muy mafioso que sea...

Y por un momento, Agoney se plantea la posibilidad de que Roi tenga razón. Y si en realidad está encubriendo a Raoul no sólo porque le quiere sino porque en el fondo una parte de él mismo quiere deshacerse de su padre y los grilletes que representa? Justo cuando ve salir a su hermana del baño con una mirada decidida para montar el plan de asesinato de su cuñado, lo entiende. Es la misma mirada que la suya. El rencor acumulado, la ira... es la mirada con la que conoció a Raoul.

Y probablemente sea el amor que le ha hecho perder la cabeza definitivamente o que le ha devuelto la cordura, pero al fin sus dudas se han despejado por completo.

-De qué hablaban? -pregunta inocentemente Glenda

-De que vamos a cargarnos a ese capullo de una vez por todas -afirma Agoney con un doble sentido del que sólo él es consciente

91 DAYS (Ragoney) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora