Capítulo 6 - Venta

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Una semana, una puta semana postrado en la cama sin poder hacer nada más que recibir las visitas momentáneas de Roi y Agoney. Si sigue aunque sea un solo minuto más tirado en ese colchón se va a volver loco... en fin, más de lo que ya está.

- Está cicatrizando muy bien -le informa Agoney- en unos días estará como si nada

- Sé que vais al restaurante de los Galassia a vender el licor -suelta de repente el rubio

- Sí, y?

- Quiero ir -afirma Raoul

- Te estás recuperando de un balazo y ya quieres otro? -pregunta Agoney alzando una ceja

- Vais a llevar a Roi

- Y qué?

- Que no quiero que vaya, él solo tenía que hacer el licor -afirma seriamente Raoul- si queréis a alguien que conozca el producto, voy yo

- Es muy peligroso, pelapatatas -le advierte Agoney

- Y por eso no quiero que vaya Roi

- Joder... -maldice el moreno

- Oye y a ti qué más te da? -se indigna el rubio

- Pues que no estuve una semana curandote el hombro para que ahora te me mueras, la verdad -ríe el mafioso

- Me debéis una -contraataca Raoul ignorando la confesión de Agoney- tú y tu familia, Roi se queda aquí

Los ojos oscuros y profundos de Agoney se clavan en los del rubio, pero Raoul no se achanta y le sostiene la mirada con determinación. Agoney acaba cediendo y aparta su vista antes de andar hacia la puerta.

- Y quiero dejar de ser el camarero y el pelapatatas -pide Raoul antes de que el otro chico desaparezca por la puerta

- Ufff -rueda los ojos el moreno- hablaré con papá a ver qué puedo hacer

Agoney abandona con desgana la habitación dejando a Raoul dentro. A los pocos minutos, unos golpes en la puerta sobresaltan al chico que descansa en la cama.

- Pasa, Roi!

- No soy Roi -afirma la recién llegada cerrando la puerta tras ella

- Glenda? Qué haces aquí? -pregunta extrañado Raoul

- Descubrir qué pretendes -sentencia la chica- a mi hermano ya le comiste el coco pero hay algo muy sospechoso en ti y no voy a parar hasta descubrir qué es

Raoul mentiría si no admitiera que dos segundos con Glenda le han asustado más que el disparo que encajó hace una semana. Comerle el coco a Agoney? De qué habla?

- Solo quiero formar parte de tu familia -sentencia Raoul

- Así que es eso...

- Qué? -pregunta Raoul sin comprender nada

- Lo has descubierto, has descubierto lo de mi hermano y como es el heredero vienes a ver si cuela y puedes chupar del bote -deduce Glenda- es eso, no?

De qué coño habla? Raoul no tiene ni idea de a qué se refiere Glenda. Qué cojones es "lo de Agoney" y por qué iba él a chupar del bote sabiéndolo?

- Oye, no sé de qué me hablas -se defiende Raoul- yo solo quiero vender alcohol y formar parte de los negocios de tu familia

- Mira, sinceramente, los negocios de mi padre no me importan lo más mínimo -se sincera la chica- pero como mi hermano lo pase mal, te juro que te mato, está claro?

- Sí sí -asiente Raoul alzando los brazos mostrando su inocencia

- Ale, recuperate pronto -sentencia la chica dándole dos palmadas en el hombro casi recuperado que le arrancan una mueca de dolor

La chica sale de la habitación cruzándose con Roi, que acaba de entrar.

- Joder, hoy es el día de las visitas o qué? -pregunta Raoul frotándose el hombro dolorido

- Qué ha pasado? -pregunta Roi sentándose a su lado

- La hija de los Vanneti que está loca -sentencia Raoul- ha dicho nosequé de que he descubierto algo y que si le hago daño a Agoney me mata

- Oh -se muerde la sonrisa el de ojos verdes

- Oh, qué? -pregunta Raoul

- No, nada nada -ríe Roi negando con la cabeza

Y a este qué le pasa? De verdad, va a actuar alguien con normalidad hoy? Raoul habla de forma despreocupada con su amigo cuando Agoney irrumpe en la habitación.

- Le convencí -sentencia Agoney- convencí a mi padre, cree que es una buena prueba para ver de qué pasta estás hecho

- Vamos! -celebra el rubio

- Que me he perdido? -pregunta el de ojos verdes sin comprender nada

- Tu amiguito que está loco -sentencia el moreno enfurruñado

- Qué has hecho? -pregunta Roi

- Una tontería, eso hizo -sentencia el moreno

- Te quieres callar ya? -pregunta Raoul- me enteré de que te iban a llevar a la entrega de licor de hoy y les he dicho que no, que voy yo

- Y has hecho eso porque...? -interviene el de ojos verdes

- Porque es idiota -afirma Agoney ganándose una mirada furiosa por parte del menor- vale vale, ya me callo

- En serio, Roi, quiero hacerlo -le insiste el rubio

- Vale, como tú veas... -se encoge de hombros Roi

- En serio te da igual? -pregunta Agoney sorprendido

- No, obviamente no me da igual -le corrige el de ojos verdes- pero este tío es un cabezón, cuando algo se le mete entre ceja y ceja es imposible sacarselo de ahí

- Joder... -suspira Agoney- pues venga, vámonos -avisa dandole a Raoul un toque con el revés de la mano al estómago

Raoul recoge lo que cree necesario de la habitación y se dispone a seguir a Agoney, pero antes.

- Roi, espérame vale? Voy a volver, te lo prometo -afirma Raoul

- Claro que vas a volver, mala hierba nunca muere -ríe el castaño antes de estrechar a su amigo entre sus brazos

- Adiós, Roi, no te preocupes que está en buenas manos -le guiña un ojo el moreno confirmando cada vez más la teoría que se cuece en la mente de Roi

- Ya veo, ya -ríe el amigo del rubio

Agoney sale de la habitación encabezando la marcha y Raoul se deja guiar por los pasillos de esa casa que aún no conoce en profundidad. Viendo esto, el rubio se anota mentalmente estudiarse todos los recovecos de la casa cuando tenga tiempo, pues puede suponerle una ventaja. Cuando llegan al aparcamiento, dos coches están esperandoles. En uno están Nero y el tío de Agoney esperando. En el otro, que Raoul supone que es el suyo, Bruno. Agoney y él se sientan y el coche arranca.

- Cuál es el plan? -pregunta Raoul rompiendo el silencio

- Vender el alcohol -sentencia Bruno

- Parece sencillo -se encoge de hombros

- Eso es porque no conoces a los Galassia -ríe Agoney

- Bueno, sois los Vanneti no tenéis de qué preocuparos, no? -pregunta el rubio

- Definitivamente, no conoces a los Galassia...

Y es cierto. Raoul se ha estudiado al dedillo la familia Vanneti pero no conoce nada del resto de familias. Qué esconden los Galassia y por qué una familia tan importante como la de Agoney toma tantas precauciones por un simple intercambio de bienes con ella? Solo de pensarlo, un escalofrío recorre todo el cuerpo de Raoul. Da igual, de todos modos ya está metido hasta el cuello y si hay que enfrentarse a otra familia de mafiosos, Raoul está más que dispuesto.

91 DAYS (Ragoney) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora