INEFABLE [Draco Malfoy]

Cuatro

No quería ser la típica que llora porque le rompieron el corazón.

No quería odiar a Draco.

No quería sentirme así.

No quería nada de esto pero todo estaba sucediendo.

¿Qué rayos eran estas estupidas noticias del profeta? Es decir, ¿con qué fin? ¿Estábamos en medio de una guerra y a ellos les importaba publicar acerca de un estúpido noviazgo?

"Quizás ese es el mejor motivo para hacerlo..."

Me imaginé la voz de Sirius diciéndome alguna bobada como esa.

Ay, Sirius... definitivamente nunca superaré lo que paso. Lo que esa maldita te hizo... ¿es normal sentir tanto odio hacía una persona?
Creo que si arrebata a tú única familia, sí.

Un montón de carroñeros aproximándose me hicieron rápidamente salir de mis pensamientos. Intenté regresar con mis amigos pero sin darme cuenta había camino demasiado. Estaban tan lejos que ni siquiera podía visualizarlos.

Decidí esconderme detrás de unas rocas grandes y esperar a que se vayan, pero uno de los idiotas tropezó cerca de mi roca y logró verme.

—¿Y tú quién eres?

No respondí.

—¿Quién eres, eh? —volvió a insistir—, me resultas muy familiar...

El hombre pensó por unos momentos y pareció como si se le prendería la ampolleta.
—Yo te he visto husmear en otros lados... y también en... ¿Eres amiga de Potter?

Impulsivamente moví mi varita y dije las palabras:
—¡Desmaius!

Rápidamente otro carroñero vino hacía el lugar y me lanzó un hechizo pero lo esquivé velozmente y volví atacar.

—¡Expulsó! —el hombre salió volando por los aires y cayó cerca de los demás carroñeros. Yo solo corrí lo más veloz que pude en dirección hacía mis amigos.

Una vez que ya estuve lo suficientemente cerca, recordé nuestros hechizos de protección. Me había alejado lo suficiente para salir del círculo que nos protegía. Pero ya estaba de nuevo en él, los carroñeros no podían vernos.

Llegué lo suficientemente exaltada pero ninguno lo notó. Harry y Ron estaban teniendo una horrible conversación.

—No esperes que me ponga a dar vueltas por la carpa y el lugar porque hay otro maldito cachorro que tenemos que encontrar. Limítate a añadirlo a la lista de cosas que no sabes —Espetó Ron con mucho enojo.

¿Qué demonios estaba sucediendo?

Plaf, plaf...la lluvia comenzó a caer cada vez con más fuerza, yo seguía preocupada por los carroñeros y los tontos de mis amigos seguían discutiendo. Hermione solo intentaba callar a Ron.

El miedo se reflejaba en los ojos de Harry, estaba ocurriendo lo que el más temía.

—No es que no esté maravillosamente aquí —volvió habla Ron—, con un brazo destrozado, sin nada que comer y congelándome el trasero todas las noches. Lo que pasa es que me esperaba... no lo sé, un poco de progreso después de tantas semanas.

—Ron —intervino mi amiga con una voz tan ligera que no estoy segura si alguien más la pudo oír...

—Creí que sabías en donde te habías involucrado —Insinuó Harry.

—Sí, yo también.

—Hey... no es momento para esto —me involucré esta vez yo—, hay unos carroñ...