Dieciséis

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Narra Draco Malfoy

No podía dejar de pensar en Isa.
Sé que estaba enojada.
Más que enojada.
Ella me odiaba.
Realmente me odiaba.

Y ahora tenía mi varita, ¿qué se supone que debía hacer? ¿decirle a mis padres antes de que ella realice alguna estupidez?

—¿Así que besaste a esa asquerosa traidora a la sangre Gryffindor? —apareció Astoria Greengrass.

Demonios, era bastante molesta.

—¿Qué? —me hice el desentendido.

—¡La besaste! ¡No puedes hacer eso, se supone que somos novios!

¿Acaso me estaba haciendo una escena?

Esperen... ¿¡SE ESTABA PONIENDO A  LLORAR?!

—¿Qué va a pensar la gente? ¿Nuestros padres? ¿Mis padres? —no dejaba de sollozar, pero era algo exagerada y bastante dramática.

—Astoria yo...

—¿Ella te obligó verdad? —dijo un poco más calmada mientras secaba sus lagrimas de cocodrilo-. ¿Usó la maldición imperius?

¿Qué?

—No —dije rápidamente.

—¿Entonces? —encarnó una ceja.

—¿Entonces, qué? —dije de mala gana y ella rápidamente abrió la boca para decir algo pero yo la ignoré y continué hablado—: ¿Por qué estás esperando un tipo de explicación? No eres mi madre, y estás loca.

Sus ojos se abrieron como platos.

—¿Disculpa? ¡Eres un grosero! —Chilló—. Draco Malfoy, tienes suerte de que mis padres hayan aceptado comprometernos ¡considerando la situación de tú padre!

—Nunca quise nada de esto... Astoria. Ni siquiera me pareces atractiva.

Está bien, quizá lo último estuvo de más. Pero quería que me dejara de una vez en paz.

—¡¿Quién no querría salir conmigo?! ¡Eres un...!

—¿Pasa algo? —mi madre interrumpió a la loca antes de que pudiera insultarme, aunque realmente no me importaba mucho.

Me limite a encoger los hombros y responder relajadamente:

—Supongo que Astoria y su familia ya terminaron su estadía en la mansión Malfoy.

—¡Te arrepentirás! —gritó furiosa y se fue marchó de la habitación agregando un empujón (no tan sutil) en mi.

No pude evitar sonreír ante la risa que me dio esa situación. Lo siento, no puede darme lastima esa chica.

—¡Draco! —me regañó mi madre-. No me produce risa, esa era una gran oportunidad.

—Madre, al señor tenebroso no le importará con quien me comprometan ustedes, intentará de matarnos de todas formas.

—No intentará matarnos, Draco —intentó reconfortarme—. No si le entregamos a Potter. Por eso debes encontrarlo, nuestra vida cambiará completamente si somos quienes lo entreguemos. Además, Bellatrix cumplirá su promesa y nada le pasará a tú amiga Blac...

—¿Bellatrix cumplirá su promesa? ¿En serio lo crees?

Mi madre mi miró en silencio.

—¿Puedes jurarlo? —volví a insistir.

—No —negó con la cabeza—. Pero al menos nosotros estaremos a salvo.

—Pero...

—Pero nada, Draco —me cortó de golpe y se marchó, ya que al parecer había alguien a fuera de la mansión.

INEFABLE [Draco Malfoy]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora