INEFABLE [Draco Malfoy]

Siete

El día estaba más cálido que de costumbre, pero el frío seguía inundando mi piel y la brisa golpeaba mi respiración segundo por segundo.

Ron y yo habíamos llegado a una especie de pueblo el cual se encontraba bastante deshabitado, pero antes de entrar, nos sentamos un momento en unas roca, ya que habíamos caminado por horas. Mi amigo seguía sin tener la suficiente fuerza para aparecerse en algún lugares, además, no sabíamos a dónde ir.

¿Deberíamos seguir buscando los Horrocruxes?

¿Deberíamos volver a casa? ¿Casa? ¿Acaso yo tenía una "casa"?
¿Ron planeaba volver con su familia?

—¿Planeas volver a la madriguera, Ron? —pregunté sin más para romper el hielo.

Se veía mucho más calmado y relajado.

Me miró directamente a los ojos y supe de inmediato que estaba arrepentido, además negó levemente con la cabeza:

—Quisiera volver... si esto ya hubiera terminado, pero no. No ha terminado.

Me quedé en silencio mientras revoloteaba la nieve que estaba en pies.

Pensé en la suerte que tenía Ron.
Una vez que esto terminara, él podría irse a su casa, con su familia... su mamá, papá, hermanos y hermana... toda su familia iba a estar esperándolo. 

Yo sólo tenía a Remus, mi padrino. Él era literal la única familia que me quedaba y ni siquiera sabía si estaba con vida. Claro, además de esa loca psicópata de Bellatrix.

—Gracias por venir conmigo —volvió hablar mi amigo—. No hubiera podido lograrlo sin ti... y sé que debe haber sido duro dejar a Harry, lo siento.

No supe que decir así que simplemente le sonreí y asentí levemente, no tenía por qué perdonarlo, yo había tomado mi decisión.

—Tenemos que volver, lo sabes ¿no? —hablé por fin.

—Lo sé. ¿Pero cómo lo haremos?

Me preguntaba exactamente lo mismo.
Pero para tranquilizarlo, intenté buscar soluciones...

—Quizá podamos enviar un patronus o... ir al Valle de Godric... es un lugar bastante importante para Harrry y...

—Sí, Isa... —me interrumpió—... pero es demasiado arriesgado, ¿no crees? quién-tú-sabes espera que Harry vaya.

—Lo sé —asentí con la cabeza—. Pero ahí nació Harry y murieron sus padres, además Volde...

Me detuve al hablar porque a lo lejos se escucharon unos murmullos, probablemente carroñeros.

Nos alejamos un poco del lugar en donde estábamos y nos adentramos en el pueblo. Ron me dijo que lo siguiera mientras apuntaba un bar que se encontraba en medio del lugar.

Estaba siguiéndole el paso bastante bien, pero un carroñero apareció desde un pasaje y se interpuso entre ambos. No vió a Ron y mi amigo tampoco se percató de esto, él simplemente siguió corriendo y vi cómo entró al bar.

El carroñero rápidamente atacó mientras movía su varita.

—Partis Temporus —dije rápidamente y un escudo temporal de fuego evitó que su hechizo me tocara. Cuando el escudo se esfumó rápidamente volví a gritar:

—¡Expelliarmus!

El carroñero salió volando, yo agarré su varita y corrí lo más rápido posible. Intenté llegar al bar al que Ron había entrado pero estaba rodeado por carroñeros así que corrí hacía otros callejones ocultos para poder tomarlos por sorpresa y atacarlos.

Saqué mi varita y la puse en posición de ataque, mientras observaba a los carroñeros desde mi escondite pero un movimiento me hizo darme vuelta de golpe.

¿Qué?

¿Cabello rubio?

¿Ropa sofisticada?

¿Varita hecha de madera de espino?

Eso no es un carroñero.

—Desmaius —dije impulsivamente y Draco cayó aturdido e inconsciente.

Oh, diablos.