39.

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Me he vuelto a despertar, esta vez mejor. Me he puesto a andar y he llegado a un pueblo, no se cual es. Entre a una tienda, y vi a una dependienta al lado de una ventana. Se me quedó mirando y cuando me miré lo comprendí, tenía la ropa podrida. Le pedí ayuda y me dejó unos pantalones de su trabajo. Fui a la casa donde había pasado mis últimos momentos con Julio, todo estaba igual, pero todo estaba cubierto por una gran capa de polvo. Le dí al interruptor de la luz, no funcionaba. Fui a mi armario, toda la ropa seguía ahí pero ya no olía a nada. Me puse un pantalón y una camiseta básica. Volví a la tienda a la que había ido antes y le devolví el pantalón. La chica, me invitó a tomar un café, y yo acepté, fuimos a una cafetería cercana y me pedí un café con leche. Me lo trajeron y estaba demasiado caliente.
-¿Cómo te llamas?- me dijo mientras miraba el café.
-Me llamo César.- dije con voz baja.
- ¿Te ocurre algo?- me contesto intentando encontrar mi mirada perdida.
- ¿Me dejas usar tu móvil?- mire rápido hacia sus ojos.
-Claro.
Me desbloqueo el teléfono y marqué el número de Julio. Tras varias llamadas me dí por vencido, supuse lo peor, había muerto o me había dejado. Pero cuando mire la fecha me di cuenta de que se habían pasado dos años desde que nos tiramos desde el acantilado. Le devolví el teléfono y le tomé un trago del café. Corrí hacia el baño y me puse a vomitarlo. No podía parar, y cuando me pude poner erguido me miré al espejo. Seguía igual que cuando me tiré de acantilado. Me puse a llorar, no podía parar y cuando menos lo esperaba empezó a agrietarse el espejo. Dejé de mirarlo y paro de crujir. Salí del baño y le pedí el número a la chica quizás podría ser la única que me ayudara. Me acerqué a ella y me despedí le dí las gracias y antes de irme le pedí su número, se llamaba Melanie. ( por favor leer Sangre en mi biografía que no vais a entender nada de esto)
Volví a mi antiguo pueblo, no pasé por mi casa quería olvidarme de mi antigua vida, aunque doliera pero no de él, no de Julio. Fui a mi antigua casa de madera, subí por una de las paredes hasta llegar a la habitación de mis padres, rompí la ventana y saltó la alarma. Entre y con el sonido zumbante de la alarma me puse a buscar la caja fuerte de mi madre. La encontré puse mi fecha de nacimiento y cogí un par de fajos de billetes de 50€. La policía iba a tardar poco en llegar y me iban a pillar, no sería un gran problema, estoy en mi casa pero lo último que quiero explicar es que probablemente he estado muerto dos años en la orilla de la playa donde me suicide con mi novio, o con mi exnovio. Pensaba salir por la ventana pero ya no tenía escapatoria. Me senté en el suelo me tapé la cabeza con las manos y grité, los sensores de las alarmas acababan de reventar.

Límite (Erótico-Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora