32. Comienzo del fin

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Los 9 días antes del ataque todos estuvieron entrenando, todas las manadas, clanes, demonios y algunas hadas y ninfas guerreras, se prepararon para la mayor batalla de la historia sobrenatural, el fracaso supondría una gran victoria para las brujas, pero si ganaban, la paz tan deseada por todos sería lograda.

Durante esos días se fue perfeccionando el plan, cada guerrero tenía claro su función, atacar a las brujas y dejar la vía libre a Aria y Aurora para que ellas vencieran al consejo de brujas. Por ello, Aria y Aurora tenían un entrenamiento más intensivo que el resto, Aurora sabía que en el mismo momento que pisara el lugar del consejo, ellos la reconocerían si no lo hubieran hecho ya, por lo que pensaba utilizar la varita.

Andrew y Diego estaban preocupados por ellas, por su forma de comportarse en ese tiempo, querían ayudarlas, pero ellas no los dejaron, ambas sabían que enfrentarse al consejo tenía su riesgo, sobre todo para Aurora, pues el gasto de energía sería importante, ni siquiera Aria podía ayudar a Aurora, lo cual la frustraba.

El día llegó, todos fueron al lugar acordado, Aurora hizo los hechizos para proteger a todos de la magia de las brujas, y para hacer pasar a hadas y a ninfas por brujas, ya que resultaba más fácil cambiarlas a ellas que a los licántropos, vampiros y demonios. Cada hada y ninfa junto a un grupo de licántropos, vampiros y demonios, fueron distribuidos, unos fueron a la ciudad directamente, otros atacaron los vehículos de las brujas y se hicieron pasar por ellas, mientras que el resto esperan el momento para entrar, ya que como habían acordado, no entrarían todos de golpe.

La operación empezó por la mañana, y el último grupo entró entrada bien la tarde. El último grupo era formado por: Aurora, Aria, Andrew, Diego, Leonardo, Andrés y Marius. Ellos fueron el último grupo por precaución, ya que si las brujas sabían que Aurora era una traidora, el plan fracasaría.

Algunas brujas se extrañaban del aumento tan repentino de la ciudad, pero sobre todo de ver tantos sirvientes, ya que no era normal que una bruja tuviera tantos sirvientes y paseara por la ciudad con todos. El grupo de Aurora iba seguro por la ciudad, Aurora había hecho un hechizo para conseguir los planos de la ciudad, por lo que sabía perfectamente como llegar al edificio del consejo.

Sin embargo Silvia estaba prevenida, desde hacia unos días Maria se había mudado con ella en espera para el ataque, ambas estaban seguras de que el resto de especies sobrenaturales atacarían en poco tiempo, y no se equivocaron.

-Ya estamos llegando - anunció Aurora a sus acompañantes.

-Ya he mandado el mensaje al resto para que empiece la batalla - anunció Andrew.

Aurora asintió y continuó andando tan tranquila, ella y su grupo hablaban por el link de la manada, ya que antes de entrar en la ciudad Aurora integró a Andrés en la manada Nueva Esperanza, solo a él, ya que él era el único que no formaba parte de ella.

La batalla empezó trayendo el caos, las brujas intentaban huir de la masacre que hacían los invasores, aquel caos que las brujas creaban al correr para llegar a un lugar seguro, les dio una excusa a Aria y al resto para poder correr hacia su objetivo.

-Pensaba que las brujas eran más valientes - se burló Aria por el link.

-Eso mismo - apoyó Diego a su pareja.

-Solo las brujas guerreras son realmente valientes - dijo Aurora por el link - el resto se hacen las valientes frente al resto, pero cuando hay que demostrarlo huyen - todos se rieron por el link, pero intentaron disimular.

-Eso ocurre con muchas personas, no solo las brujas - dijo Andrew.

-Es cierto, lo puedo jurar - afirmó Leonardo - yo estuve preso de las brujas, que había muchos que al principio se hicieron los gallitos, pero al poco se comportaban como perritos amaestrados.

Todos se rieron mentalmente, pero no podían mostrarlo ya que sería llamar la atención. No tardaron ni dos minutos en estar frente del edificio del consejo, Aunque y Aria entraron, mientras el resto se quedaban fuera para asegurarse de que nadie entraba.

-Vaya, vaya, vaya - dijo Silvia mientras aplaudía - pero si es Aurora - la miró con una sonrisa maligna - la bruja traidora que ha estado ayudando al resto de especies sobrenaturales, o debería decir híbrida - Aurora apretaba fuertemente la mandíbula mientras Silvia hablaba.

-La guerra tiene que acabar - sentenció Aurora - esta guerra a durado demasiado y ha causado muchas muertes, esto se acaba aquí.

-Tienes razón - dijo Silvia - esto acaba aquí, pero no de la forma que tú esperas - varios brujos alzaron sus varitas con intención de atacar a Aurora y Aria. Pero nunca lo lanzaron porque perdieron sus varitas.

-Aurora tiene toda la razón - dijo Coral saliendo de las sombras - esta guerra ha causado demasiadas muertes inocentes, ya es hora que el reinado de las brujas termine de una vez por todas - todos estaban asombrados, ninguno imaginó que Coral pudiera ser parte del movimiento contra las brujas.

-Vaya, esto no me lo esperaba - pensó en voz alta Aurora.

-Yo siempre he estado en contra de esta estúpida guerra, por eso me aseguré de proporcionarte la mejor instrucción, sabía que tú podrías acabar con todo esto - dijo Coral poniéndose a su lado, Silvia estaba que echaba humo por las orejas.

-¡Tú también eres una traidora!, has deshonrado no solo a las brujas, también a este consejo, tú formaste parte de él - gritó Silvia llena de enojo, todo estaba saliendo de su control.

-Si formé parte del consejo supremo, fue para intentar cambiar las cosas, no soy la única que piensa que las cosas deben cambiar, hay muchas brujas que quieren el cambio, pero no se manifiestan por miedo a que las maten. Es más, mis amigas y yo ya esperábamos este ataque, ahora ellas están ayudando a los atacantes.

-¿En serio? - preguntó Aurora sin estar muy convencida.

Coral asintió y la sonrió, pues era cierto, fuera de ese edificio las amigas de Coral ayudaban a los invasores contra las brujas y sus sirvientes, muchos de ellos no se lo creyeron al principio, pero ellas les dijeron que eran aliadas, que ellas también querían acabar con la opresión de las brujas, y aunque no confiaban mucho, aceptaron su ayuda, haciendo que la batalla resultara más fácil para ellos.

Mientras dentro dentro del edificio del consejo empezaba la batalla de hechizos, al principio Aria se mantuvo atrás por petición de Aurora, petición que obedeció a regañadientes. Cuando Coral y Aurora empezaron a conseguir quitarles las varitas, fue entonces que Aria fue al ataque.

Al cabo de un rato, la inmensa mayoría del consejo había perdido la varita, Coral también la había perdido, por lo que poco pudo hacer a partir de entonces, ya que su magia sin varita era débil, por lo que se dedicaba a ayudar a Aria protegiéndola.

Llegó a un punto en que tod@s bruj@s del consejo hicieron un hechizo conjunto para vencer a Aurora, Aurora consiguió detener el hechizo, pero su varita se rompió, el consejo pensó que por eso ya la tenían vencida, pero se equivocaron.

Aurora sin varita lanzó su hechizo más poderoso, el consejo intento hacer frente a ese hechizo, pero fracasaron. Aurora con ese hechizo mató a la mayoría, solo los tres más poderosos sobrevivieron, pero solo Silvia consiguió ponerse en pie después del hechizo, sin embargo todas las varitas habían sido destruidas, por lo que Silvia era incapaz de hacer frente a Aurora.

-Esto se acabó - dictó Aurora - ni todos juntos podíais vencerme, ahora estás sola y sin varita, rindete, esto terminó.

-Te equivocas, la auténtica batalla ahora empieza - dijo Silvia desconcertando a Aurora.

Antes de que Aurora se diera cuenta, una niebla negra apareció, cegando a Aurora, Aria y Coral. Cuando la niebla se disipó dejó ver a una mujer junto a Silvia.

-Tengo el honor de presentaros a mi antepasada - dijo Silvia con una sonrisa siniestra - Maria Muñoz - las tres chicas se quedaron en shock ante la realidad que se les presentaba.

La híbrida convertida: entre magia y colmillos *Completada*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora