Por un beso -♡Ae Y Pete♡

Capítulo 25 (Peticiones)

—¡Pete!

—¡¡NO QUIERO!!

—¡Tú eres el que dijo que quería!

—¡¡PERO ESTÁ MUY OSCURO!!

—¡No te muevas mucho que me caigo!

—Lo siento...

Se preguntarán ¿por qué tantos gritos?

Pues... Lo que pasa es que quiero darme una ducha, pero el baño está muy oscuro, me da miedo entrar ahí, Ae me está cargando en su espalda y trata de convencerme de que todo está bien.

—¿Te acompaño? — me preguntó Ae con un tono inocente.

Mis ojos se abrieron ampliamente.

—¿Seguro de que te quieres bañar conmigo? — dije sorprendido por el atrevimiento de mi novio.

—¡N-no hablo de eso! — me respondió tartamudeando, en un tono nervioso
—Hablo de que sí quieres que te acompañe a entrar al baño...

—Ah... Y-ya entendí, l-lo siento...

Que mal pensado soy, claro que Ae jamás pensará en bañarse conmigo. No me molestaría, pero sé que él nunca querrá hacer algo así conmigo.

—Esta bien... — le respondí aferrando mis piernas más a su cintura.

Escuché como Ae susurró algo, pero no lo escuché, entramos al baño y si, estaba muy oscuro.

—Se ve como la inocencia de Pond — dijo Ae observando lo oscuro que estaba todo.

—Y la de Tin... — dije escondiendo mi rostro en la espalda de Ae.

—Pete, es hora de que me sueltes para que te bañes — dijo mi novio soltando mis muslos.

Solté mis brazos del cuello de Ae, y también mis piernas de su cintura. Con mucho lentitud caminaba por el baño.

—Dejaré la puerta abierta para que la luz que entra por las cortinas de la habitación ilumine un poco el baño, así no estará tan oscuro — me dijo saliendo del baño, pero antes agarré su mano.

—¿Para d-donde v-vas? — le pregunté con mucho miedo de que me dejara solo.

—Voy a salir de la habitación, te vas a dar una ducha y yo dejaré la puerta abierta, sí me quedo... — escuché como Ae tragó seco — ya sabes... Tengo que salir de la habitación para darte privacidad.

Cierto, sí Ae se queda lo más seguro tendrá que colocarse mirando hacia una pared o algo así, dado que la puerta del baño estará abierta por completo.

—Esta bien, sólo... No te alejes tanto — le dije soltando dudosamente su mano, no quería que se fuera.

¿No comprendes que a tu lado me siento seguro?

—Tranquilo, estaré acomodando el sofá de la sala para dormir allí.

No se podía ver casi nada por la oscuridad, pero por alguna razón la cara de Ae se veía perfectamente con ayuda de los rayos de luz que dejan pasar las cortinas de mi habitación, él tiene una sonrisa tan encantadora que me hace sonreír también, esa sonrisa que él me muestra casi todo el tiempo, es la sonrisa que hace que mi corazón ya no tenga más miedo.

—Ae... Tú puedes dormir en... La cama c-conmigo — mis palabras casi no salían, esa petición fue muy difícil de hacer.

—No... Yo dormiré en el sofá — Ae hizo una pausa y sin darme cuenta se acercó hasta mi oído para susurrar lo siguiente — no es muy bueno que duerma en la misma cama que tú... Mi corazón no podría soportarlo.