CAPÍTULO OCHO

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Sanha......

Mi padre ya estaba enterado de las tonteras que hice al intentar creerme inmortal por lo cual tuvimos una conversación y dejamos claro que debía entrenar, ¿para qué si no tenía nada especial? pero él cree que es lo correcto y yo también. Para no interrumpir mi educación nos reuniríamos por las noches.

Un ovni de luces violetas sobre mi casa sería demasiado para las noticias locales y mi padre tampoco podía tomar un taxi luciendo "tan normal"  El camino hacia Ibarra estaba lleno de maizales gigantescos, era más fácil culpar a "los gringos" pues todos creen que ellos odian al resto del mundo incluso a ellos mismos; con todo papá me había asegurado que su nave no dañaría los cultivos porque hace mucho que dejaron de usar productos radioactivos para movilizarse, en su lugar, utilizaban minerales.

Llamé un taxi y le dije que recorriera el camino que cualquier autobús haría, me limité a mirar por la ventana para buscar la señal pintada por mi padre.

-Ojalá sepa lo es pintar. -dije.

-¿Perdón?

-Nada. -Empecé a ver letreros de "Stop" pintados con un semi triángulo una línea y tres puntos, lo comparé con el dibujo que mi padre me había marcado y en efecto era ese. -Déjeme aquí, ¿Cuánto le debo?

-Son 12 dólares. -le di un billete de 10 y uno de 5, me entregó el vuelto y se marchó.

Me adentré en el maizal donde la señal era más grande y claro; no hace mucho había leído un relato de terror relacionado con el lugar donde ahora mismo estaba y mi mente no paraba de repetir las escenas una y otra vez.

-Maldito libro, malditos niños, y maldito maíz. -las hojas del suelo crujían cada vez que daba un paso. A lo lejos vi una luz; era papá.

-Sentí tu miedo desde que saliste del auto.

-Lo entenderías si hubieras leído lo que yo, casi me dan tres infartos. -mi respiración era pesada porque casi al final me había decidido por correr, no vaya a ser que salga algún tipo con una oz. 

Papá me abrazó, mis brazos se quedaron colgando al no saber como reaccionar pero luego sentí la necesidad de también hacerlo, de sentir su protección y cariño porque al final de cuentas es lo que había pedido durante mucho tiempo y ahora lo tenía.

-Aún no puedo creer que esto esté pasando, te di por muerta por mucho tiempo. -sus manos acariciaban mi cabello como si tuviera miedo de que desapareciera.

Por un momento pensé lo que realmente quería decirle, pero las mejores palabras no son las que salen del cerebro.

-No quiero que me dejes otra vez papi. -escondí mi llanto infantil y lo abracé con mas fuerza todavía.

-No lo haré, no me perderás tan fácil. -Limpió mis lágrimas con un pañuelo y al sonreírme yo también lo imité.

Krasto.....................................................

Sanha no parecía asustada con esta nueva forma de viaje; varios amigos terrícolas me habían comentado que se parecía a un vuelo en avión; hasta parecía que le gustaba, corría de una ventana a otra para ver cada planeta y estrella, los nombraba de una manera extraña pero era así como ella los conocía.

-Hija, perdón que interrumpa tu curiosidad pero tengo que pedirte que tomes asiento. -Hizo lo que le pedí y ajusté su cinturón.

-¿Hay algún problema? 

-El planeta en el que nos resguardamos está un poco lejos y tenemos que tomar un atajo. -repetí el mismo proceso con mi cinturón.

-¿Osea que el atajo es peligroso?

-No pero siempre hay un sacudón fuerte cuando cruzas un agujero negro. Activación de las coordenadas 2.34.168.321.09.0005. Control de motores activados, estabilización de oxígeno al 88% 

-Los mandos se han completado al 100% ¿desea realizar el impulso? -El asesor de todas las máquina se llamaba Lili, fue creada para detectar problemas y solucionarlos con eficacia.

-Recibido, iniciemos el impulso.

-Por favor colocarse las gafas de seguridad. -Nos colocamos las gafas y activé el control de impulso, la nave aumentó su velocidad y liberó peso; el paso solo duró 5 segundos.

Al final del viaje y tras un aterrizaje exitoso en la terminal fuimos examinados por el grupo de médicos para evitar la expansión de cualquier tipo de virus o bacterias. Sanha tuvo que ser llevada al departamento medicinal por una inyección para sus náuseas.

-¿Cómo te sientes? -aún tenía un poco de fiebre.

-Como si hubiese subido al martillo 100 veces.

-¿El martillo?

-Es un juego mecánico, algún día te llevaré.

-Si te sientes mejor podemos iniciar el recorrido por tu hogar. -Se sentó de golpe y el color volvió a sus mejillas.

-¡Vámonos!

-Despacio, al inicio sentirás mareo debido al cambio de densidad de los elementos atmosféricos, tenemos unos parecidos a los de la Tierra pero eso no quiere decir que puedes ir por ahí corriendo y saltando.

-Haré lo que me pidas papá. -Sonreí.

Iniciamos desde nos encontrábamos, recorriendo el edificio médico, en su mayoría los sanadores, como eran conocidos los doctores, eran jóvenes porque las mentes frescas siempre descubren e innova.

Las fábricas no usaban gases contaminantes, el combustible era extraído de minerales que aportaban al cuidado del ambiente. Los trabajos son designados de acuerdo a las habilidades del individuo, todo sirve, todo se reconoce.

-¿Cómo es el dinero? ¿Cuánto ganan?

-Nada, el científico vale lo mismo que el obrero. Mira a tu derecha, todo lo que ves son ciudadelas, todos los cubos cuentan con las mismas condiciones.

-¿Pero supongo que tienen hijos, abuelos, dónde se mete tanta gente?

-Los niños permanecen con sus madres hasta las primeras 750 primaveras o 5 años terrestres, luego son evaluados y llevados a los departamentos de educación y entrenamiento, siempre están en contacto con sus padres, el estado emocional es el más importante en el desarrollo. Por otro lado, los adultos mayores igual son trasladados a los edificios que están en los campos para que reciban el reconocimiento por su aporte y entregarles los mismos servicios que dieron.

-La verdad suena a una utopía pero no todo es bueno, ¿o si? -Sanha tenía razón, no podía existir el bien sin el mal.

-Siempre hay la parte oscura pero intentamos ser justos y cuando las leyes son violadas se presentan a juicio con la asamblea, el consejo de guardianes y el Maestro Alpha.

Estábamos llegando a la sede principal del Templo Olimpo donde se administraba la seguridad y bienestar de todo el planeta. La fachada fue diseñada en un estilo greco-romano.

-Y ese hija es el edificio principal de todo el planeta, hay tres más alrededor pero aquí es donde se maneja todo.

-¡Wow! Una vez soñé con un lugar parecido a este pero era más brillante porque el sol daba justo en el obelisco del centro y distribuía a toda la plaza. -Los detalles de la hora amarilla que tenía Sanha me sorprendieron.

-Por hoy ha sido suficiente, vamos al cubo para que descanses.

-Nooooo gracias, si no llego a casa mi mamá me va a estampar el palo de la escoba en la cara.

-Ya hablé con ella mientras estabas en el colegio, aceptó que permanezcas conmigo además que desde ahora estarás bajo mi cuidado.

-¿Cómo es eso? Según yo, la madre es la que tiene prioridad en la custodia, a menos que....

-A menos que ella no sea tu madre. Es un golpe duro y entiendo si...

-No es eso, solo que no quiero darye falsas esperanzas, si piensas que haré de este planeta mi hogar no lo haré, nacì humana y quiero morir así.

-Nada de eso Sanha, lo que quiero que sepas es que siempre tendrás un lugar a donde ir, que cuando mires a las estrellas veas otro hogar.








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