ֆɛʋɛռ ֆօʊʟֆ [NCT Dream]

🍀챕터 26🍀

...Y mientras tanto, en la "próspera" aldea...

Renjun estaba angustiado, mientras observaba toda la escena con terror y asombro. Podía ver los restos y extremidades de varios pobladores ahora fallecidos, tirados por doquier; ya fueran piernas, brazos, pies, etc. Mientras que la gran mayoría estaba inconsciente.

Los ojos del menor estaban cristalizados, no podía creer que aquello hubiera sucedido a su hogar; al lugar que lo vió crecer y desarrollarse en un ambiente pleno y cómodo, hasta la llegada de aquel poderoso y temible demonio blanco, quién se hacía llamar a sí mismo con el nombre de Taeyong.

Renjun estaba desesperado y angustiado, no sabía dónde estaban sus pequeños amigos y estaba demasiado preocupado por saber en dónde rayos se encontraban. Repentinamente, llegó Yuta con una espada manchada con un espeso líquido negro, la cual supuso que se trataba de sangre fresca.

-¿Qué pasó aquí?- preguntó Renjun, con sus ojos bien abiertos y a punto de llorar como el niño pequeño e inocente que era.

-Ese monstruo vino aquí y causó la devastación en todas partes. Como si fuera poco; devoró a la minoría de los pueblerinos pero no destruyó el poblado en su totalidad, ya que dijo que aún no era la hora del "apocalipsis"- respondió Yuta, mientras sacudía la filosa espada.

-¿¡DÓNDE ESTÁN CHENLE Y JISUNG!?- preguntó Renjun; alterado y entre lágrimas desesperantes.

-Tranquilo... Él está por aquí- respondió ahora Sicheng, para luego tomar la mano del menor y empezar a guiarlo hacía el hospital de la comunidad, el cual aún seguía en pié siendo seguidos por Xiaojun. Al cabo de unos minutos, los tres chicos llegaron a su destino y finalmente se dirigieron hacía la habitación en dónde se encontraba Chenle. Hasta que finalmente, ingresaron a la habitación.

Renjun empezó a llorar desconsoladamente, mientras veía el estado en el que se encontraba el menor. Acarició su mejilla con suavidad, mientraa sollozaba constantemente.

-¿Mmm?... ¡Oh Renjun!... ¿Dónde estuviste? Te extrañé tanto- confesó Chenle, entre susurros.

-¡CHENLE! ¿¡DÓNDE ESTÁ JISUNG!?... Dime qué pasó con él- le pidió el mayor de ambos, al contrario quién tragó en seco.

-Ji-Jisung... É-Él.. Taeyong se lo llevó con él... ¡JISUNG NO ESTÁ!- aclaró Chenle, ahora con las lágrimas brotando de sus ojos como heridas.

Renjun retrocedió, no podía creer todo lo que estaba pasando. ¿Qué había hecho Jisung para merecer aquello?... No podía permitir que él se siguiera saliendo con la suya.

-Chenle... Él no volverá a tocar a más nadie, yo salvaré a Jisung, Jeno, Jaemin, Haechan y a Mark.. Yo los salvaré a todos de ese demonio y cuando todos ellos sean libres yo lo destruiré a él aunque sea lo último que haga- recalcó Renjun, ahora con la rabia contenida en su corazón. Los ojos de Sicheng se abrieron como platos al ver que los objetos que se encontraban en distintas partes de la habitación empezaban a flotar abandonando así su estado normal.

Una sonrisa orgullosa se dibujó en los labios de Xiaojun, los poderes de Renjun se hacían cada vez más fuertes y si seguía de esa forma, muy pronto podría enfrentar a Taeyong con todas sus fuerzas.

Pero primero habían cosas que debían ser resueltas, para que todo avanzara de buena forma: el espejo mágico del lago debía ser extraído y Taeyong debía ser encerrado en él.

-Renjun, aún tenemos mucho por hacer si queremos derrotar al demonio blanco. Esta guerra está llegando a su parte más mortífera y muchos perecerán en el proceso.... Sé que tú tienes el potencial y la fuerza para vencerlo, sólo debes mantener la benevolencia y la honestidad en tú corazón y con esas armas podrás vencer a la oscuridad y desterrarla para siempre en los más profundos confines del espejo mágico- recordó Xiaojun, con una sonrisa dibujada en su rostro.

-Confiamos en ti para detenerlo- exclamó ahora Sicheng, con una enorme sonrisa que transmitía confianza. Las cosas volvieron a sus respectivos lugares, dejando a Renjun feliz y orgulloso de sí mismo.

-Llamen a Jungwoo y a Yuta... La hora de la verdad está cerca y la maldad no podrá detenernos... Salvaré a mis amigos aunque sea lo último que haga- volvió a recordar Renjun, para sí mismo. Pero lo que no sabía el chico, es que Chenle ya tenía todo planeado para el gran encuentro con Taeyong.

Quizás era arriesgado, pero él haría lo que sea con el fin de salvar a Jisung, para así volver a tenerlo en sus brazos y darle todo el amor que el menor merecía.

..Y en la tétrica mansión de los demonios...

Jisung aún seguía atado en aquella cama, el sitio seguía igual de oscuro y sus pelos continuaban erizados. Quería salir de ese encierro pero no podía, habían toda clase de monstruos en el primer piso que podrían destruirlo con solamente un chasquido; debía permanecer sano y salvo para así poder encontrarse con Chenle.

Desde su lugar, podía escuchar los gritos y gemidos de placer y satisfacción por parte del demonio blanco, quién sin duda estaba en medio de un acto sexual, con quién sabe con cual persona.

-Señor mío... Sácame de aquí por favor, yo no quiero morirme- suplicó el pequeño Jisung, con las lágrimas saliendo de sus ojos con rapidez.

De repente, un fuego púrpura rodeo toda la cama en el que el menor se encontraba, cosa que lo aterró aún más. ¿Acaso ese monstruo lo asesinaría?.

Su siniestra risa resonó en sus oídos como sonoros ecos que retumbaron e hicieron temblar toda la oscura y tenebrosa habitación, que lo mantenía prisionero. De entre las llamas se formó una figura delgada y por consiguiente esta última se hizo corpórea revelando finalmente a su verdugo. Las extrñas llamas se apagaron, a la par que el monstruo se presentó.

-Ay... Se sintió tan bien... ¡Oh! Pero si es el pequeño Jisung- dijo el demonio, mientras se acercaba de forma lenta y amenazante hacía el menor, quién empezó a temblar.

-Por favor señor demonio... No me dañe- suplicó el menor con inocencia.

-¿Y quién dijo que yo vengo a dañarte? ¡Deja de pensar esas cosas!... Pero la hora cero ha llegado, vamos a encontrarnos con el pequeño Chenle y cuando él esté en mis manos... Este mundo se convertirá en un paraíso lleno de delicias sin iguales para mi especie- soltó Taeyong entre sonoras y escalofriantes carcajadas que atemorizaron al menor. ¿Ahora quién lo salvaría de aquello?.

>*~°{🐍}°~*<

N/A

Hola!! Sé que demore en actualizar discúlpenme por eso :"(. La verdad es que no me he sentido bien últimamente y me está costando escribir esto... Pero Dios mediante conseguiré terminala^^.

Por favor, noticar si hay alguna falta ortográfica para poder corregirla. Gracias por leer, bye💕👀.