XV

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—¡No me satisface, Kim! —gritaba KyungSoo—. ¡No creo en tu explicación!

A HeeChul sólo le faltaba arrodillarse. Rodeados por su equipo, KyungSoo y HeeChul continuaban enfrascados en su discusión.

—Querido, por lo que más quieras, trata de ser razonable...

Como aquello seguía estancado, algunos reporteros volvieron a concentrarse en la televisión, desde ahora, un concursante estaba dando la sorpresa. A KyungSoo lo que menos le importaba era el programa. Un joven con lentes de fondo de botella se acercó.

—Joven KyungSoo...

—Que te quede claro, HeeChul —seguía discutiendo él—. ¡De mí no se burla nadie!

—Joven...

KyungSoo se volvió hacia el chico, viendo con desprecio su rostro y su traje barato.

—¿¡Qué quieres tú!?

—Es posible... —titubeó el chico al ver que el enojo se dirigía hacia él—, es posible que "Dios" encuentre al responsable.

KyungSoo lo miró de arriba para abajo.

—¿Quién diablos eres tú? ¿Te estás burlando de mí?

—Soy Yoo KiHyun —respondió asustado el chico—. El nuevo jefe de cómputo.

—¿Y Dios es tu asistente, o qué?

HeeChul aprovechó que ya no lo atacaban para recuperar el aire. Qué bueno que KyungSoo tenía otro hueso para roer.

—Lo que quiero decir —explicó el joven con timidez—, es que hay un programa de rastreo en la red llamado GOD que significa...

—No tienes que traducirme, inepto, sé inglés. ¿Y ese programa puede hallar al hacker, o como se llame?

—Para eso lo crearon los japoneses.

—Benditos japoneses. Usa tu Dios cuanto antes —KyungSoo se dirigió a los reporteros—. ¡Y pobre del que resulte responsable! ¿Por qué carajos están tan sonrientes?

—¡Un tipo está a punto de ganarse el millón! —respondió uno de los reporteros.

KyungSoo tardó un momento en ponerse al tanto. ¿De qué le hablaba ese idiota?

—¿El millón del Gran Tesoro? —recapacitó él.

—¡Ya sólo le falta una pregunta! —le informó otro reportero.

Al mismo tiempo sonó el timbre de su celular. KyungSoo vio el número del director general de Canal Azur en su pantalla.

—SiWon ¿qué está pasando? —respondió—. ¿Decidiste entregar en premio?

—¡Por supuesto que no! —dijo SiWon en off—. ¡Tú sabes que el objetivo del programa es castigar la cultura!

—¿Entonces qué...?

—¡Que Kris es un idiota! ¡No sé cómo se le fue el programa de las manos!  ¡Ni cómo ese hijo de puta de Park ChanYeol está respondiendo a todo!

—¿Park ChanYeol?

—¡El concursante, un maldito muchacho! ¿No estás viendo el programa?

KyungSoo se fue hacia la pantalla. Los reporteros de hicieron a un lado para dejarlo pasar. Quedó al frente, viendo a ChanYeol a todo color, en alta definición y con sonido dolby atmos. En ese momento, la cámara hacía un close up de su atractivo rostro juvenil, sonriente, haciendo que un hoyuelo se marcara en una de sus mejillas, seguro de sí mismo y, por alguna razón, a KyungSoo no le pareció tan desconocido. ¿Dónde había visto antes esa expresión?

Park ChanYeolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora