Estos son siete chicos licántropos de distintas edades, clase social, estilo de vida e historias que estudian en la misma escuela, apenas en su adolescencia intentando descubrir lo que es el amor y el placer carnal terminan envueltos en una serie de...
Cuando Jung Kook llegó a casa fue a ver dónde estaban sus padres, para asegurarse de que no hubiesen visto nada.
- ¿mamá? ¿papá? –dijo abriéndose paso por la cocina, al llegar vio a su madre abrazando a su padre con mucha fuerza.- ¿pasa algo?
Jung Shin soltó a Il Soon y miró a su hijo con una sonrisa en sus labios, secando algunas lágrimas de sus mejillas.
- Hola cariño. –dijo Jung Shin, la madre de Jung Kook.-
- ¿por qué lloras? –el menor se acercó.-
- Es que hoy me dieron una buena noticia. Una grandiosa noticia. –él tomó las manos de su hijo y lo miró manteniendo aquella dulce sonrisa.- vas a tener un hermanito. ¡estoy embarazado!
Jung Kook lo miró sorprendido y algo desconcertado, tratando de analizar lo que estaba pasando. Había sido hijo único por trece años y esta noticia lo tomó por sorpresa, puesto que él pensaba que siempre iba a ser el hijo consentido de aquel matrimonio.
- ¿de verdad? ¿no estás jugando conmigo, mamá? –miró a su padre y luego de nuevo a su madre.- wow... no sé qué decir o cómo sentirme con esto.
- ¿no te emociona tener un hermanito? –Jung Shin lo miró con expresión de tristeza.-
- Claro que sí, es solo que estoy muy sorprendido. –Jung Kook abrazó a su madre y besó su mejilla.- felicidades mamá. Recuerda dejar todo cuando crezca para tus nietos.
- Gracias nene. –él levantó una ceja.- aún falta mucho para eso, solo tienes trece años, así que no estés pensando en hacerme abuelo todavía.
Besó la frente de Jung Kook y fue a seguir preparando la cena, Il Soon lo abrazó por la espalda acariciando su vientre mientras que el menor los miraba con algo de nostalgia, imaginando como seria estar en esa situación, entonces dejó de ver a sus padres y se vio a sí mismo y a Chan Yeol; sonrió y negó, salió de la cocina y fue a su habitación.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mientras tanto, Nam Joon besaba con pasión y deseo los labios de su amante, poco a poco bajó por su mandíbula hasta llegar a su cuello, el cual comenzó a lamer y succionar, disfrutando de los jadeos de aquel chico que estaba cada vez más excitado.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
