Crazy School Lovers

XXXIV

Ji Min sacó la llave de su casillero para abrirlo.

- ¿es cierto lo que todos andan diciendo? –preguntó Tae Hyung.-

- ¿Qué es lo que andan diciendo? –Ji Min lo miró curioso.-

- Que Min Yoongi te está cortejando. –dijo el menor, emocionado.- ¿por qué no le habías dicho a tu mejor amigo que el alfa más popular y más deseado del colegio te está cortejando? Eres un suertudo.

- ¿qué? –las mejillas del mayor enrojecieron.- ¿Quién dijo eso?

- ¡es cierto! ¡lo veo en tu rostro! –Tae Hyung soltó una leve risa.- todos lo saben, los han visto.

- Eso no es cierto. –negó con su cabeza.- él y yo solo somos amigos.

- Ya no me mientas. –lo empujó suavemente.- dime ¿Cómo se siente el cortejo? ¿es tan lindo como todos dicen? Lástima que nunca lo podre saber por mí mismo.

- Él no me está cortejando, solo es coqueto como con todos los omega. –a pesar de que lo negaba, en el fondo estaba emocionado.-

Nunca le había cruzado por la mente que Yoon Gi lo estuviera cortejando, creía que solo estaba jugando y que le coqueteaba como a otros, pero al escuchar lo que los demás creían le hizo cuestionar si su respuesta era del todo cierta, después de todo, las rosas y las cosas que le decía no eran cosas de amigos ¿o sí? Pero ¿cómo saber si quería estar con él? Negó y abrió el casillero, allí encontró una nueva carta.

- Es él. –susurró a un volumen casi inaudible en lo que una sonrisa aparecía en su rostro.-

Abrió dicha carta y comenzó a leerla.

Seguramente te preguntarás quién es esa persona que piensa tanto en ti, que te deja cartas y poemas, te preguntarás si algún día conocerás su rostro, si se atreverá a verte a los ojos y no a hablarte a través de papeles. Si es así, entonces quiero que sepas que estoy más cerca de ti de lo que crees, soy quien menos esperas.

Debes recordar la tarde en que, en la oscuridad de mi habitación tú y yo hicimos cosas que esta sociedad le prohíbe a menores, desde entonces me enamoré de ti, a mí no me importa tu pasado, ni tu posición social, ni lo que eres, ni lo que haces, lo único importante es tu belleza inigualable, tu inteligencia, carisma, tu sonrisa, tus ojos hermosos, amo tu risa, amo tu forma de ser, Park Ji Min, yo te amo. Pronto sabrás quién soy.

Al terminar de leer la sonrisa de Ji Min se había desvanecido, parecía algo decepcionado, suspiró guardando la carta y sacando sus libros.

- ¿qué pasa? –preguntó Tae Hyung.- ¿dijo algo malo?

- No es Yoongi. –murmuró.-

- ¿Cómo lo sabes? –ladeó levemente su cabeza.-

- Es uno de mis clientes. –cerró el casillero.- vámonos, llegaremos tarde a clase.

El menor asintió y caminó a su lado mientras trataba de subirle el ánimo.

Jung Kook los miró cuando pasaron al salón y los esperó en el asiento donde siempre se sentaba, al ver a Ji Min sonrió; se sentaron junto al menor y lo saludaron, Tae Hyung lo miraba de vez en cuando, comenzaba a llamar su atención.

- No se por qué te esfuerzas en negarlo si es muy obvio. –dijo Tae Hyung.-

Ji Min rodó los ojos y negó.

- ¿de qué hablan? –preguntó Jung Kook mirando a uno y luego al otro.-

- De que a Ji Min lo están cortejando y a él le gusta pero lo niega.