Latidos prohibidos. [KTH+JJK]

💫Capítulo 42.

🌈Amarte siempre.🌈

-No me iré tranquilo, necesito saber que mi hermano estará bien... papá, déjame llevarlo conmigo -Hyungsik estaba preocupado, sabía que sus padres podrían tomar malas decisiones y acabar por hacerle daño a Jungkook.

-Deja de meterte en donde no te han llamado -El hombre suspiro sin saber su detrás de la puerta su hijo menor estaba escuchando todo -Sigues siendo menor de edad, no finjas que puedes hacerte cargo de Jungkook.

-Lo que no quiero es que lo mandes a uno de esos lugares... -Jungkook pegó un poco más su oreja a la puerta buscando escuchar más claro.

-Puedes estar tranquilo, se quedará aquí. Yo me encargaré de hacerle ver sus errores y haré que se olvide de ese chico -La voz de su padre sonaba segura pero muy seria, tan seria que incluso Hyungsik tuvo miedo... ya no quería irse. -Y ya deja de jugar al defensor, me estas cansando. He dicho que tu hermano se queda aquí y es mi última palabra

-Pero papá...

-Nada, el día que tengas tus propios hijos podrás educarlos como se te de la gana mientras tanto déjame evitar que tu hermano acabe por convertirse en una linda mujercita

El en verdad quería hacer entrar en razón a sus padres, quería exigir que dejarán de meterse en la vida de Jungkook pero de nada serviría pues era el mismo Jungkook quien debía frenarlos... y eso no pasaba porque el incluso ya había comenzado a marcar distancia con Taehyung.

[... ]

Hyungsik se había ido y su hermano menor no podía extrañarlo más, si bien el mayor llamaba todos los días para preguntarle como estaba no era lo mismo... No podía abrazarlo y llorar en su hombro tanto como quería. Estaba cansado de las miradas llenas de odio que sus padres le dedicaban día tras día, cansado de rezar cada noche pidiéndole a Dios que lo perdonara por su "pecado" y no porque el en verdad lo sintiera así, era por simplemente obedecer...

Había estado evitando a Taehyung, no le respondía los mensajes ni las llamadas, evitaba abrir la ventana para no tener que verlo y en salón de clases se sentaba en un rincón apartado de todos, incluso de Jimin que en más de una ocasión se había intentado acercar a el. Se le notaba decaído, bajo sus ojos habían un par de sombras oscuras, sus labios estaban un tanto resecos y su cabello nuevamente negro ya no se veía brillante como antes.

¿Qué más podía hacer? Si decidía seguir con Taehyung sería enviado a una especie de reformatorio, uno de esos lugares de los que Hyungsik le había contado antes... No quería ir ahí, no quería ser castigado con golpes ni ningún otro tipo de mal trato, ya era demasiado el desgaste que sentía que le provocaban las palabras hirientes de sus padres.

Un día nuevo, por primera vez después de dos semanas había abierto la cortina dejando que los rayos dorados del sol bañaran su rostro, Taehyung se encontraba vistiendose y eso le alegro pues así no se daría cuenta de que lo estaba observando...

Pero se moría de ganas por abrazarlo, por decirle que en realidad lo extrañaba demasiado y que dolía demasiado el no estar juntos, extrañaba sus besos, sus manos acariciando su piel, extrañaba perderse en sus lindos ojos, extrañaba peinar su cabello tan suave, extrañaba contar sus lunares... que le cantará al oído.

Maldita sea extrañaba todo de el.

-¿Me perdonaras por alejarme de ti tan repentinamente? -Dejó la pregunta en el aire pues obviamente no obtendría una respuesta.