Algo inevitable [Wileven]-TERMINADA

Vigésimo primero: "Te atrapamos, maldito"

─¿Y entonces?─me paré enfrente de Will con los ojos cerrados ─¿Cómo me veo?

Pasé casi toda la mañana encontrando algo bonito para ponerme, en unas horas iba a ser el concurso. Llevaba puesto un vestido que me llegaba dos dedos arriba de la rodilla, unos bonitos zapatos, y un ligero maquillaje.

La verdad, que irme de fiesta había ayudado un poco, pero mi mente seguía dando vueltas.

─Ah... dos, tres.─contestó el como si no le importara, abrí los ojos con el ceño fruncido. No pudo aguantar su cara seria y se rió ─Es broma, es broma.

Me senté al lado de el haciendo puchero.

─Eres la mujer mas hermosa de este planeta.─pasó sus manos por mi cintura, iba a darme un beso pero lo detuve.

─Vas a correrme el labial.─le advertí.

─Yo soy el que se va a correr, pero dentro de ti ¡hermosa!─sentí mis mejillas arder, le di un empujón riendo.

─Basta, no ahora.─se acercó a mi rápidamente y me besó, luego se paró para irse a su habitación.

Maldito, se había salido con la suya.

***

¿Lo habíamos hecho bien? Las caras de los jueces con tan serias que me están temblando las piernas, Will me mira y me toma de la mano. Por un segundo me siento mas fuerte.

─En tercer lugar, quedan Luisa y Maria.─ellas festejaron muy felices, yo y Will nos miramos nerviosos.

─En segundo lugar, Will y Jane.─abrí la boca con una sonrisa.

Will gritó feliz y nos abrazamos.

Segundo lugar... eso... es más de lo que esperaba, sin duda.

─¡No lo puedo creer!─los chicos se acercaron a nosotros a darnos un abrazo.

─¡Atención, atención!─nos llamó un juez ─¡Los ganadores tendrán una fiesta aquí en este mismo lugar, pueden invitar a sus amigos. Los demás se pueden retirar!

Después de una media hora la fiesta comenzó, nos divertimos tanto, bailamos en medio de todos, felicitamos a los demás equipos, nos divertimos tanto que las horas pasaron como segundos.

Yo no había tomado alcohol, pero la mayoría sí, por suerte convencí a Will de que no tomara porque iba a ser horrible ser la única cuerda de regreso a casa.

Me acerqué a la mesa que estaba llena de bocadillos para servirme un poco de ponche. Ya con el, me fui de regreso a el baile, pero, al momento de pasar entre la multitud una chica pasó corriendo junto a mi haciendo que la bebida se me derramara en el vestido.

Todos dejaron de bailar para mirarme, la estúpida chica ni siquiera se había dado cuenta de lo que había hecho y siguió corriendo. Maldije a lo bajo viendo mi vestido blanco manchado de rojo.

─¿Estás bien?─me preguntó Will acercándose a mi.

─¿Tu que crees?─di la vuelta para ir al baño, el me siguió.

─¿Quieres que entre contigo?

─No, no, espérame aquí.─me metí al baño intentando sacar lo rojo pero se me hizo imposible.

Esto es genial, ahora parece que maté a alguien.

Mirándome al espejo, observé como de uno de los cubículos salía esa chica que me tiró el ponche. Era muy hermosa de cerca. Quise darme la vuelta y reclamarle, pero yo no quería problemas así que tan sólo vi como se lavaba las manos y salía como si nada.

Al menos ya sé porque no se fijó en mi.

Convencida de que la mancha no se me iba a quitar suspiré y me acomodé el cabello, que también estaba hecho un desastre. Salí del baño buscando a Will con la mirada, al encontrarlo fruncí el ceño.

Esa chica le estaba coqueteando a MI NOVIO, maldita ¿qué se cree? Me acerqué molesta a ellos, Will se notaba incomodo por algo que ella le decía.

─Entonces... ¿tienes novia?─le preguntó con una sonrisa coqueta, una asquerosa sonrisa para mi gusto.

─Ah, fíjate que si tiene.─jalé a Will a mi lado tomándolo del brazo ─Puedes irte con tus trucos de zorra por otro lado.

Caminé con el hacia la salida, muy molesta. De repente, comenzó a sonar por todos lados Alone de la banda Heart, solté un chillido de impotencia porque era la canción que mas aborrecía en el mundo.

Ahora quise salir mas rápido de ahí, pero mis pies se sintieron inestables al pisar agua que por alguna razón había en el piso. Terminé cayendo al piso con Will.

¿Por qué de repente me estaba yendo todo mal?

─Mi cabeza.─se quejó Will sentándose en el piso.

Me ayudó a pararme tomándome del brazo. Las voces de los chicos me llamaron la atención, voltee hacia ellos pero lo que mis ojos captaron me dejaron con los ojos abiertos.

Atrás de los chicos que nos saludaban sonrientes estaba Damián, dándole unos dolares a esa misma chica. Así que... ¿el fue el encargado de todo eso?El siempre ha sido.

Me acerque sigilosamente, el miedo que sentía antes se estaba convirtiendo en enojo.

─Lo del agua en el piso fue ingenioso.─le dijo Damián a esa chica riendo, mi cólera subió hasta el cielo ─Ahí está, todo el dinero. Te puedes ir.

Ella le hizo caso desapareciendo en la oscuridad de lo noche. Yo no pude mas y levanté mi mano, lo hice levitar hasta que chocara contra la pared. Por fortuna una pared impedía que los demás nos vieran.

Cuando salí de mi escondite el abrió los ojos asombrado, es obvio que no me esperaba. Aún levitando, lo golpee un par de veces mas contra la pared, luego vi que se desmayó.

Lo dejé en el piso limpiando mi nariz.

─¿Qué... mierda?─la voz de Will me hizo dar un salto.

─Rápido, cárgalo hasta la casa.─el frunció el ceño ─No, no, mejor cárgalo hasta su casa, no quiero problemas con Joyce.

El no entendió nada pero terminó por hacerlo, a este le iba a sacar información a golpes si es necesario. La hora de la verdad había llegado, por fin me iba a enterar de todos los secretos que guardaba.

─Te atrapamos, maldito.─murmuré para mi misma.

LaEscritoraPerrona

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