Cuadragésimo cuarto: "Si sale negativo..." [T2]

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¿Cómo carajos le voy a contar esto a Will? Apenas si volvimos después de 8 años, que no es para nada poquito, también apenas caigo en cuenta de que de verdad somos un "estamos en eso" y apenas tengo 26 años, mierdaaaa.

Esto está mal, no quiero ser madre aun, puede que ya esté en edad pero no vengo preparada. No tuve una madre que me diera un ejemplo a seguir, mi infancia básicamente se trató de engaños para hacer experimentos conmigo, luego tuve a Hopper pero el no era mujer, Joyce solo me explicó que era la menstruación pero nada más. La garganta se me secó por completo, las manos me sudaron a más no poder y sentir temblar un poco mi cuerpo...

Una duda surcó mi mente haciéndome poner los pelos de punta, quizá era la parte más complicada de todo, maldición, ¿quien es el padre? Puede ser Will o... Mike, si es de Mike juro que me suicido. Claro, después de tener al niño, no sería capaz de quitarle la vida alguien, si de abandonarlo, pero no de matarlo.

Eso me recuerda que yo he matado personas en mi niñez, pero si era defensa propia no creo que cuente. No puede ser, me estoy desviando del tema.

Un momento, a todo esto, todavía no se si estoy embarazada. Un retraso lo tiene cualquiera, tal vez dos semanas ya es mucho pero todo es posible, quizás tengo una enfermedad, eso es. Me reí sin nada de gracia, casi sonó histéricamente, que estupida soy, obviamente no estoy esperando un hijo.

La puerta principal se abrió haciéndome dar un brinquito del susto, toqué mi pecho exaltada, Will entró acompañado de una sonrisa amable y una bolsa cargada de cosas. La hambre se me había ido por la sorpresa de hace rato, puede que no esté embarazada pero le tengo que decir sobre la falta de sangre en mis bragas.

─He llegado.─anunció sacudiendo la bolsa de comida en sus manos.

─Tengo que decirte algo.─dejó lo comprado en la mesita del centro y me observó con curiosidad.

─Cuéntame, soy todo oídos.

Apreté los labios buscando las palabras correctas para decirlo sin que suene mal, y digo, hablar de tu menstruacion no es algo de lo más cómodo posible. Al darme cuenta de que no había ninguna forma agradable para dar a entender solté aire por la nariz.

─No me baja.─por fin dije quedito, avergonzada a montones. El entrecerró los ojos frunciendo las cejas, presionó sus labios entre sí y miró el techo, casi se vio pensativo.

Pensé por un instante que diría algo tranquilizador como: "Tranquila, no pasa nada, seguro y no estás embarazada". En cambio, el nada más me miró de nuevo cruzándose de brazos, aún con esa expresión estúpidamente tierna en su rostro.

─¿Qué cosa no te baja?─quise darme una bofetada mental al procesar sus palabras, es increíble que no lo haya entendido.

─La menstruacion, Will.─solté perdiendo mi pudor, le vi con cara de pocos amigos.

─¿Y eso que significa?─abrí la boca realmente sorprendida, el quito su cara seria para reír levemente ─Obviamente estoy bromeando contigo, se lo que es eso, lo que no entiendo en por qué no te baja.

─¡Pues porque hay una posibilidad de que esté embarazada!─ahora si que se sorprendió como esperé que lo hiciera desde un principio ─No deberías bromear con algo tan serio.

─¿Estás embarazada?─abrió la boca con una sonrisa, fruncí el ceño. Si no me equivocaba en su rostro entero se había abierto una ventana, la ventana de la esperanza que me aterró un poco ─Dios, voy a ser papá.

─Will.─intenté decirle las cosas como eran, pero el se adentró aún más en su emoción.

─No lo puedo creer, ¿que será? Tal vez una hermosa niña o un fuerte niño.─comenzó a caminar alrededor sin quitar esa estupida sonrisa.

─Will.─volví a llamarlo insistente.

─Arleth es un precioso nombre, o Paco, o Gabriel, o Beatriz, o...

─¡Will!─le grité por fin logrando que se girara a mi interrogante. Tomé aire y lo miré sintiendo la peor vergüenza de mi vida ─No sé si es tuyo o de Mike,─la sonrisa se evaporó tan rápido que casi que la extrañé ─aparte de que no estoy completamente segura de estar embarazada, puede ser otra cosa.

Su mirada ahora estaba fija en el piso, advertí que se estaba enojando por su ceño fruncido, en ese momento quise desaparecer totalmente. Se supone que las personas normales no tienen estos problemas con el embarazo porque las personas normales no les son infieles a sus novios de toda la vida con su ex mejor amigo.

─Vamos al hospital, nos sacaremos la duda.─casi sonó como una demanda pero entendí que nada más era el enojo colado en su vos, en realidad su mirada estaba llena de duda dirirgida hacia mi.

No quisiera ir a un hospital a qué me inserten una aguja por el brazo y me analicen para saber mi estado actual, pero no importaba si yo quería, era la necesidad que me obligaba, ya que, como lo saben un hijo no debe tomarse a la ligera.

─Está bien.─acepté después de casi un minuto en silencio.

No esperamos nada más para irnos, caminamos hasta la puerta y el la abrió por mi. Salimos a paso veloz, pero antes de que diéramos la vuelta por el pasillo la puerta de Mike se abrió completamente de golpe. Nos detuvimos forzosamente, no quiero detallar como se veía su rostro pero estaba mal, incluso peor que la última vez.

Nos miramos por unos minutos sin hablar, pude sentir a leguas la gran pena en sus ojos, el quería disculparse pero lo más probable es que o su orgullo le haya ganado o las palabras se le habían ido.

─Andando, Jane.─me dijo Will tomando mi mano. Por fin seguimos nuestro camino hasta el hospital más cercano.

***

Volvimos al mismo hospital que hace ya casi una semana de habernos hecho los estudios, el doctor dijo que ese día los resultados ya iban a estar listos. La palabra "nerviosos" no se acercaba ni siquiera a lo que estábamos sintiendo, era tan aterrador pensar en un bebe en nuestras vidas al igual que... maravilloso. Si les digo la verdad, esta semana estuve pensando mucho, llegué a la conclusion de que si esos resultados dan positivo tal vez todo cambie para bien, seria como un nuevo inicio para nuestras vidas.

Pero si sale negativo... bueno, no sé como es que reaccionaria.

─En un momento les entrego los exámenes.─nos informó el doctor con una sonrisa cordial, quise devolvérsela pero los nervios me lo impidieron. Se fue y nosotros nos quedamos en silencio, ambos estábamos pensativos.

Escuché a Will suspirar a mi lado.

─Si sale negativo...

─Will, no.─le interrumpí con la voz cansada, no quería hablar de nada acerca del bebe hasta ver los resultados.

─Lo siento.

Pasé saliva sintiendo la garganta extrañamente seca, la tension era palpable en el aire. La mano de Will sostuvo la mía con fuerza, eso realmente lo agradecí porque de alguna manera, me hizo sentir segura.

─Aquí están.─el doctor se fue tan rápido nos entregó el sobre.

Mi dios, estaba en mis manos, la respuesta estaba en mi manos, y no figurativamente sino literalmente estaba en mis malditas manos. No esperé un segundo más y lo abrí, impaciente por saber, comencé a leer rápido y cuando por fin lo supe abrí la boca.

Una sonrisa me surcó los labios de inmediato y miré a Will.

─¡Estoy embarazada!─me lancé a abrazarlo como una loca.

No pensé que esto me alegraría tanto, pero de verdad lo hace.

─¡Sí!─exclamó el en un grito de victoria. A los minutos de procesar la noticia mi mente viajó a una persona, y esa era Mike. Me toqué la frente con impresión.

Debo de decirle a Mike que estoy esperando un hijo de Will.

LaEscritoraPerrona

¿Por qué siempre me duele la espalda al escribir? Debo de trabajar en mi postura, amikos.

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Algo inevitable [Wileven]-TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora