Maldigo haber prometido a Nillie llevarla al parque después de la escuela. Estoy cansada hasta los cojones, mi cuerpo no va a soportar un esfuerzo. Esto gracias a mi ingenuo marido que pensó que hacerlo en él sofá sería una buena idea. Ahora rezo para que de puro milagro mi hija no se acuerde de la promesa que hice estando medio dormida.
─Exijo un masaje.─le dije a Will tirándome a la cama. El se rió quitándose las gafas de lectura y colocó el libro que instantes atrás estaba leyendo encima de la mesita de noche.
─Petición aceptada.─contestó poniendo sus manos en mi espalda.
─Como si tuvieras la opción de rechazar, maldito.─me reí junto con el.
Sus dedos y palmas comenzaron a hacer círculos en las partes justas de mi espalda, suspiré sintiendo tanto alivio. Tenía unas manos mágicas para dar masaje, te podía sacar el estrés en tan sólo unos minutos. Por desgracia, además de buen masajista es un ninfómano de primera. Sus manos bajaron a mi trasero y le dio un buen apretón, gemí teniendo aún los ojos cerrados.
Sonreí de lado y bajé mi pantalón un poco, dejando a la vista mis bragas negras. Lo escuché pasar saliva y me calenté al instante. Me di la vuelta y lo atraje hacia mi para besarlo, dejándolo encima mío. Lleve su mano derecha a mi entrepierna e hice que la tocara, dejé escapar un suspiro contaminado de placer. El apartó mis bragas sin quitarlas y pasó su pulgar por mi clitoris, suave pero a la vez tan sensual.
─¡Dios mío!─el grito aterrado en la puerta principal de nuestra habitación hizo que nos separáramos de golpe. Imagine lo peor por un segundo, al ver a Max riendo a carcajadas solté aire calmándome.
─¿Qué te sucede?─solté subiendo mi ropa de la parte de abajo, Will se apartó de mi limpiando su labio inferior, no se notaba muy feliz pero, ya conocía a Max y sus bromas ─Pensé por un momento que eras Nillie, estúpida.
─Tienes suerte de que sea una buena tía y la halla mandado a cambiarse a su cuarto.─puse los ojos en blanco ─Son unos cachondos imparables ¿he? Los he encontrado en estas situaciones tantas veces que perdí la cuenta.
─Eso sucede porque no tocas, querida.─esta vez le respondió Will saliendo de la habitación directo al baño ─Si me disculpan, tengo una erección que bajar.
Cerró la puerta de golpe. Max se rió por lo sucedido, yo por otro lado hice una cara de pato. También me había quedado con ganas de un orgasmo.
─Cuando la fui a recoger a la escuela Nillie dijo que la llevarás al parque.─contó Max mirándose las uñas después de cesar sus risas ─Iré a teñir mi pelo de azul ¿está bien?
Mierda, mierda. Si se acordó. Suspiré procesando las palabras de Max.
─¿De azul? ¿En serio?─cuestioné con una ceja levantada, le observé su cabello rojizo casi rubio ─Ese que traes está muy bonito.
─Si pero estoy muy aburrida. El maldito de Lucas se fue todo el fin de semana a dar consultas a quien sabe dónde.─se encogió de hombros ─Estoy sola. Tal vez me masturbe teñida de azul.
Sabía perfectamente que estaba bromeando pero no puedo negar que es algo que ella haría. Al irse de la casa me metí en la ducha, me despejé por aunque sea unos minutos. Nillie estaba en su quinto año de la escuela primaria y en serio me tenía agotada. Al salir de el baño me pude una ropa lo más cómoda posible, estaré caminando unas dos horas en el parque, mejor estar preparada.
Cuando caminé a la sala me encontré con Will en la mesa del centro, arrodillado y poniendo algo en la libreta de Nillie, quien estaba a su lado riendo. Ella era castaña, sus ojos parecían entre un verde oscuro y café, era realmente hermosa, pero tal vez solo lo digo porque es mi hija. Nah, que va, si que es hermosa. Me apresuré a ir hacia Will y quitarle el lápiz, el me miró con el ceño fruncido.
─¿Que te he dicho de hacer la tarea de Nillie? Es su responsabilidad, William.─el le dio una mirada cómplice a la niña a su lado, miré a Nillie y la apunté con mi dedo ─Y usted, señorita, la próxima vez que te vea evadiendo tus tareas estarás castigada.
─Papá sólo me ayudaba con una letra.─se justificó cruzada de brazos, Will la imitó.
─Sí, sólo la ayudaba con una letra.
─¿No se cansan de darme la misma excusa siempre?─rodé los ojos poniéndome en cuclillas, Nillie se abalanzó a mi para intentar rodearme con sus pequeños brazos. Tenía ya 10 años, sus brazos eran más fuertes pero no lo suficientemente largos.
─No te molestes, mami.─sus besos en mis mejillas me hicieron reír levememente ─¿Me ayudas con la tarea de matemáticas?
Puse los ojos en blanco de nuevo, esta vez con una sonrisa. Saqué el libro de matemáticas de su mochila, apenas abri la primera pagina pude leer en letras grandes las iniciales "N y R". Nillie me arrebató el libro avergonzada, tenia un leve sonrojo en su pálida piel. Me reí sintiendo un revoloteó en el pecho.
Mi hija ya estaba creciendo, y yo no podría estar feliz.
LaEscritoraPerrona
Un final feliz, para una historia feliz... o al menos la mayoría. Okey, si les gustó esta historia no olviden que tengo otras dos más sobre el elenco de Stranger Things e It en mi perfil.
Una llamada "No te entiendo" que es sobre Millie Bobby Brown y Finn Wolfhard.
También tengo una Wileven:
Si se leyeron el spam muchas felicidades, me agradas. Pero si lees mis novelas, también felicidades, pero porque ahora te amo :3
Voten y comenten si les gustó.
PD: Si quieren pueden darme ideas para nuevas novelas, me quedaré en Wattpad para ratoooo :)
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Algo inevitable [Wileven]-TERMINADA
FanfictionEsto es un fanfic de lo que pasa cuando Will y Eleven se van del pueblo junto con Joyce y Jonathan (osea el final de la 3ra temporada de Stranger Things) Will no conocía mucho a Eleven al inicio de la mudanza, jamás hicieron contacto, o al menos no...