A la mañana siguiente, Jin despertó gracias a unas caricias siendo repartidas por su rostro, luego fueron a su cabello y lo último que sintió fue los finos labios de su novio en su nariz.
- Mmm, si despertaré así siempre, te traeré a vivir conmigo, Min Yoongi.- dijo a la par que abría sus ojos encontrándose con la sonrisa de gomita, como le había apodado HaNeul luego de haber comido un paquete de gomitas que extrañamente eran unos dientes con encía y las comparó con la sonrisa de su tío preferido.- Buenos días, mis amores ¿Cómo amanecieron? -
- Bien, hyung, aunque con hambre, pero no quería alejarme para ir a preparar algo.- dijo sentándose con su espalda apoyada en el respaldar de la cama.
- En ese caso, tomaré un baño rápido y te preparo algo de comer, hoy será un día ajetreado.- dijo besando su frente para ir directo a la ducha y bañarse.
Yoongi se sentó en la cama con su espalda apoyada en el respaldar de la misma, hoy tenían cita con el doctor para su control mensual, si él no se equivocaba en las fechas, estaría entrando al cuarto mes, su pancita había crecido un poco más en las últimas semanas, y cómo olvidar de que sus mejillas se habían abultado más. A ojos de Seokjin, Yoongi, era una pequeña bolita preciosa de mejillas rojas.
- Yoongi, andando, la comida está lista.- llamó Jin para luego ayudarlo a levantarse de la cama.
Llegaron al comedor y frente a Yoongi estaba un gran banquete, pan tostado, mantequilla, mermelada, huevos revueltos, jugo de naranja, croissant relleno de queso y jamón. Sin esperar mucho, el menor esperó a que su novio se centara para poder servirse y saciar su hambre.
- Hyung, recuerda que hoy es la cita con el doctor y debemos ir por el regalo de Jiminie.- dijo mientras comía un trozo de manzana.
- Lo sé, ya he hablado con el rector y tengo toda la tarde libre.- respondió mientras se levantaba de la silla y llevaba todos los platos vacíos para lavarlos.- Hoy solo tienes una clase, ¿Cierto? - preguntó al sentir los brazos de Yoongi en su cintura y mientras su pancita se apoyaba en su espalda baja.
- Sí, ¿Irá alguien por mí a la universidad? - preguntó restregando su mejilla en la espalda ancha del mayor.
- No, hoy estaré toda la mañana en la oficina y solo saldré por si el rector me necesita, así que estarás conmigo hasta la hora del almuerzo que es mi hora de salida, a menos que quieras irte en cuanto termine tu clase, llamaré a Taemin.- dijo dejando de lavar los platos para ir por su celular y llamar al mencionado, pero unos brazos que no quisieron soltarlo.
- ¿Estaremos solos los dos en la oficina? - preguntó mientras se alzaba en las puntas de sus pies para alcanzar el oído del más alto mientras sus manos iban tocando la piel del abdomen marcado.
- Sí, hoy solo debo ir yo, los demás no tienen clases o estarán ocupados todo el día.- dijo volviendo a lavar los platos entendiendo que el menor quería pasar tiempo con él y no con la alocada familia Lee y los menores.
Una vez estuvieron arreglados, salieron del edificio para dirigirse hacia la universidad, Jin llevaba la mochila de Yoongi y un bolso a parte con ropa más cómoda para Min por si sus jeans, los únicos que seguían quedándole, le empezaban a incomodar.
Una vez llegaron, se bajaron del auto para entrar, Jin había empezado a acompañar a Yoongi por todos lados en la universidad, la mayoría ya estaban enterados del pequeño en camini pero habían otros que no y al Yoongi usar camisetas anchas o, en su defecto, de Jin, su pancita pasaba desapercibido y podían golpearlo al ir caminando a sus clases.
- Vendré por ti al finalizar ¿De acuerdo? - Seokjin besó su frente en modo de despedida y se agachó a besar su vientre.- Portate bien, mi amor, papi debe prestar atención a sus clases.- dejó un beso por última vez y besar de nuevo a su novio pero esta vez en los labios.- Hey, WooSeok, quedas a cargo.- le habló al chico que se había vuelto amigo del menor en los último meses.
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Mundo Humano [JinSu]
FanfictionEn un mundo donde viven dioses, han sido expulsado algunos cuantos por diversos motivos. Su castigo, convivir con los humanos ¿Cómo sobrevivirán? Ellos mismos lo averiguarán. ¿Quién iba a decir que para sobrevivir se tendrían que enamorar? • Humor |...