Soñarse De A Dos

10. ¿Dónde estás?

Villamil

Lunes 4 y no estás - bromeaba cantando Isaza mientras yo intentaba hablar con Mariana pero seguía sin responder a ninguno de mis mensajes.

Que gracioso - dije irónico - ¿Y si le pasó algo? Lleva todo el día sin contestar.

Papo no sea insistente, seguramente está ocupada, ¿No dijiste que trabajaba haciendo clases? - dijo obvio Martín.

Si pero es raro, ella siempre contesta mis mensajes al instante - dije decepcionado.

No sé que estará pasando por esa mente tuya pero no pienses estupideces, seguramente está ocupada - dijo decidido Simón.

¿Y si se arrepintió del beso? Y ya no quiere verme - dije temeroso, mis tres amigos me miraron negando con la cabeza.

No vayas por ese camino - replicó Isaza - el sábado cuando salimos, hable bastante con ella y podría decir que está muy enganchada de ti, se nota.

¿Hablaron de mi? - pregunté divertido.

Claro que sí - dijo sonriente - le hice un interrogatorio nivel detective, necesitaba conocer a la mujer que tiene loco a mi mejor amigo y asegurarme que es buena para ti.

Pensar que Villa tuvo un ataque de celos al verlos y tú ayudándolo - se burló Martín.

No estaba celoso - dijo "ofendido".

Lo que tú digas - rió Martín.

Ignore a Martín y seguí intentado llamarla pero nada, esto era muy frustrante, tenía miedo que ella no quisiera verme.

¿Y en su Instagram ha subido algo? - pregunto Simón.

No lo había pensado, creo que no la sigo -  busque en Instagram - no la encuentro.

Creo que sigue a la cuenta de Morat - dijo Isaza - deja ayudarte.

La buscamos por unos minutos, era casi imposible saber que nombre de usuario tenía. Luego de unos veinte minutos de búsqueda, su nombre apareció y reí por cómo se tenía. 'MTowers'.

¿Cómo sabías que seguía a Morat? - pregunté curioso.

Por que estaba en la cuenta y me llegó la notificación, suelo ver cuándo alguien nos sigue y me di cuenta que era ella - dijo sincero.

No sé por que no la seguía - dije observando sus fotos - es tan linda.

Ya lo perdimos! - bromeó Martín.

Deja de molestar - lo retó Simón - que tú también andas de idiota con tu novia.

Me acosté de espaldas en el sofá, soltando un pesado suspiro.

Villa, yo digo que esperes hasta la noche y si sigue sin responder, podrías ir a verla - sugirió Simón.

Supongo que debo ser paciente - repliqué - espero no me este ignorando.

No pienses eso - dijo animado Isaza - vamos a componer y despejaras tu mente. 

Nos sentamos a trabajar toda la noche, me olvidé un rato de Mariana pero miraba mi teléfono constantemente esperando a que su nombre apareciera en la pantalla. Casi a media noche me despedí de los chicos, había sido una tarde productiva a pesar que mi cabeza estaba en otro lado. Llegué y me acosté al instante, moría de sueño pero quise revisar por última vez mi teléfono, nada, seguía sin dar señales.

Martes por la mañana, teníamos una reunión con nuestro manager, revise mi teléfono y seguía sin haber nada, lo deje encima de la cama y fui a darme una ducha, me vestí, comí algo y salí camino a la reunión. Al llegar estaba Isaza junto a Martín hablando animadamente, no había rastros de Simón, seguramente venía tarde, los saludé un tanto desganado y se miraron entre ellos sabiendo exactamente qué me pasaba.