Mi Señora (+18)

Capítulo 32

Diamond

–Sí, estaremos allí... Gracias, señor Ramírez, el gusto es mío...– muerdo la oreja de Ethan y tiene que tapar el micrófono del teléfono para que no se escuche al otro lado de la línea el gemido ronco que deja salir. Me muevo lentamente sobre su polla y jadeo en su oído al sentirlo grueso dentro de mí –Sí, señor, tengo que dejarlo... Fue un placer hablar con usted– cierra la llamada bruscamente.

Me toma del culo y comienza a embestirme con fuerza, bombeando con furia hacia arriba. Gimo con total libertad y recibo todo de él en mi interior. Mmm, como lo extrañé. Siento el orgasmo construirse en mi vientre y grito de placer cuando estallo en un maravilloso clímax, corriéndome por cuarta vez desde que he llegado. Dos minutos más tarde, Ethan también se corre.

–Quiero más– pido necesitada y con voz mimosa.

–¿Quieres acabar conmigo, mujer?– pregunta divertido.

–Es que soy adicta a ti.

–Y también no me quieres dejar trabajar– sale de mí y busca en los cajones unas toallas húmedas para limpiarnos.

Me levanto de su regazo y me acomodo el vestido para ir a sentarme a la silla frente a él.

Nunca imaginé que me afectaría estar lejos de Ethan luego de que retomáramos nuestra relación. Pero así ha sido, en lo único que pensaba mientras estaba en el avión, era llegar a la empresa y desnudarme para que me cogiera. Y lo hice. Claro que luego tuve que ponerme el vestido nuevamente pero eso no fue impedimento para fundirme con él una y otra vez. Pero es que se ve tan sexy haciendo de empresario.

–Bien, mejor vamos a distraer mi mente. Háblame de lo que ha pasado en mi ausencia.

Ethan se acomoda en su sillón y me mira fijamente.

–La verdad es que no ha pasado mucho, he asistido a tus compromisos, he estado al pendiente del Holding y todo ha ido viento en popa. Aunque hay algunas actividades a las que te han invitado y debes asistir.

–Debemos asistir– corrijo tomando un lápiz de su portalápices y juego con el –¿Algo más?

–No.

–Bien. El viernes llega la maqueta que he mandado a preparar y voy a presentar el proyecto de White Paradise a la junta, ya Shizu está convocando la reunión para las diez de la mañana. Lo que tengo en mente es una maravilla ecológica. Ya lo verás.

–Estoy ansioso. Debemos ir a una gala benéfica ese mismo día, de eso hablaba hace unos minutos, luego te paso los detalles– dice sonriente y mira algo en su ordenador –¿Te gusta el arte?

–Si es clásico, por supuesto.

–Moderno. Hay una exposición mañana en Horizon Gallery, es una de los lugares que debemos visitar. El hombre tenía mucha ilusión.

Me encamino hasta quedar detrás de él, observo la pantalla. Esta muestra un folleto con pinturas de calles urbanas y edificios abandonados con grafitis.

–¿Cuál es el tema?– pregunto intrigada y me siento en el regazo de mi hombre quien me rodea la cintura con su brazo y besa mi hombro.

–La exposición se llama Travesía, es sobre un artista novato que fotografió su viaje por Ámsterdam y recreó sus imágenes en pinturas.

–Interesante– extiendo mi mano y con el ratón muevo hacia abajo para ver si hay alguna otra imagen que observar –Me gustaría algún cuadro con el paisaje de Ámsterdam. Es un hermoso lugar, te llevaré algún día– comento antes de dejar un beso casto en sus labios.