Darius Christopoulos en la imagen...
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Ethan
Desde el momento en que vi a Diamond preguntar agitada qué pasaba a su móvil, mi cuerpo se puso alerta, sabía que algo andaba mal pero no creí que la cosa era tan extrema. ¡Habían encendido el Holding! Mi mujer trastrabilló y fui a su encuentro para sostenerla y tomar su teléfono para continuar la llamada con Will.
Todo se ha salido de control.
Di entró en una especie de trance catatónico, no habla, no hace nada, está ausente. Me he encargado en la última hora de solicitar el avión de la compañía y ordenarle a la seguridad que se preparara para marchar de regreso a Estados Unidos.
Stephen ha estado preocupado por el estado de la castaña, tanto que no se ha separado de ella y me ha dicho que viajaría con nosotros.
─No lo van a creer─ dice Piper entrando a la habitación con su tableta en mano ─El Holding está en los noticieros─ me pasa el aparato y veo la cadena de noticias transmitiendo en vivo a los bomberos entrando al edificio donde sale humo negro de los cristales rotos laterales que dan al área de la cafetería.
─Mierda─ mascullo pasando las manos por mi pelo y le tiendo la iPad a Stephen que me la pide expectante. Mi hermana se mantiene a un lado mirando a la ausente Diamond con tristeza ─¿Recogiste tus cosas?─ le pregunto.
─Sí, estoy lista para partir─ recibe su aparato de las manos del hombre al lado de mi novia.
─¿Alguna idea de qué pudo haber pasado?─ me pregunta y lo miro. No puede ser su culpa, ¿no? ¿No sería tan cínico, cierto?
─Por la zona donde fue originado el fuego, puedo suponer que ha sido algún escape de gas o algo parecido.
Me dejo caer en el sillón a esperar que el avión llegue.
Esto será un gran problema. No puedo ni imaginar lo que va a pasar cuando lleguemos a Nueva York, es seguro que tendremos a los periodistas detrás, a la policía y esperemos que el seguro pueda resolver los daños a tiempo.
***
Al pasar las horas de aguardar todos nos ponemos en marcha, incluso la tía Jane que dice no querer separarse de su sobrina, toma sus cosas metidas en un bolso para subir a las camionetas que nos llevarán al aeropuerto privado. Me acerco a mi señora y la asgo de ambos lados del rostro para que me mire.
─Di, por favor reacciona─ le pido y sus ojos vacíos y llenos de angustia me miran ─Vuelve a mí, amor, no puedo con esto solo, te necesito conmigo. Es tu legado el que está peligrando y depende totalmente de ti el que quede de pie─ pero no responde, la hago levantar y cuando voy a tomarla en brazos para llevarla a la salida, su cuerpo se desploma contra mí y tengo que maniobrar para no caer junto a ella ─maldición─ digo entre dientes y la sujeto con fuerza para ponerme de pie y dejar descansar su cuerpo desmayado sobre mi hombro.
Camino con rapidez hacia donde se encuentran todos que al vernos nos miran con precaución.
─¿Qué ha pasado?─ pregunta Jane con la expresión de preocupación que no ha cambiado desde que nos enteramos de todo.
─No lo sé, se ha desmayado─ me encamino a la sala de estar y la dejo en el sofá donde una de las escoltas de Piper, que es paramédico la atiende.
─Su pulso está bien, su temperatura corporal es la normal. Ha de ser que su cuerpo ha colapsado por el estrés de la noticia─ dice la mujer levantándose y mirándonos con rostro serio ─Sería bueno que la atienda algún doctor pero no tenemos tiempo, debemos tomar el avión.
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Mi Señora (+18)
Roman d'amourMi vida se veía envuelta en líos a cada rato, problemas económicos entre otros. Pero cuando ella llegó a mi vida, todo de repente floreció. La mujer más bella, más radiante, más poderosa, me ayudó a salir adelante. La amo con todo mi corazón, pero...