El inicio del fin
Tras la noche en la que un chico de ravenclaw había gritado en plena cena que Potter y sus amigos escaparon del banco mágico en el lomo de un dragón, algunas cosas habían ocurrido en Hogwarts.
Uno, nadie deseaba ser ese chico.
Dos, algunos alumnos rebeldes habían comenzado a desaparecer, aunque se rumoreaba que permanecían escondidos en el castillo.
De eso y más, una joven slytherin meditaba mientras ponía en orden sus pensamientos.
No lo diría en voz alta, pero en más de una ocasión pensó en ir en la búsqueda de los rebeldes, aunque con la sola idea del inicio de la conversación, eliminaba la posibilidad.
—Hola. No sé si me conocen, mi nombre es Lyra. La mayoría de ustedes no me agrada, y sé que tengo la marca tenebrosa en el brazo, pero lo importante es que todos odiamos al Señor Tenebroso.
Solo es la falta de sueño, se repetía.
Existe una gran diferencia entre pensar en hacer algo y hacerlo.
—A veces creo que ni siquiera lo intentas —dijo un tranquilo Theo sacándola de su meditación.
Esa noche como ya era costumbre desde que le contó al chico sus problemas para dormir, se encontraban en la sala común. El castaño solía desempeñarse como su almohada personal hasta que entrara en un estado de somnolencia y regresara a su habitación.
Abrió los ojos formulando una sonrisa —¿Qué puedo decirte? La noche me ayuda a pensar.
—Decirme que ya tienes sueño, no estaría mal.
—Estoy lejos de eso.
—No importa, el libro de hoy es grande —afirmó señalando su lectura.
—Ya es tarde, me sentiría mejor si supiera que al menos tú estás durmiendo.
—Puedo esperar un poco más, ¿intentaste contar unicornios?
—La última vez llegué a 1000 antes de bostezar.
—Entonces ya deberías de haber empezado —soltó al iniciar un nuevo capítulo.
Extrañaba tanto poder dormir con facilidad.
Comenzó a contar intentando relajar su respiración, cuando lo sintió. Ahí en su brazo izquierdo, justo donde estaba la marca que ocultaba hasta para darse un baño, un fuerte ardor, que más bien sonaba como un llamado.
Abrió los ojos sentándose de un salto y al ver la expresión desencajada del ojiazul, entendió que él también lo había experimentado.
Se quedaron en silencio, hasta que la presencia de nuevas personas en la estancia los regresó a la realidad.
Pequeños grupos de personas con la mirada sombría.
—Theo, tengo un mal presentimiento.
El chico pareció relajarse —Todo estará bien.
ESTÁS LEYENDO
Malfoy y Lestrange
FanfictionEsta no es una historia de amor, es una historia de familia. Que para la mayoría seas un villano, no impide que puedas ser un héroe en la historia de alguien. Con el regreso del Señor Tenebroso, la familia Malfoy se ve obligada a develar el secreto...