Capítulo 29.5

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—¡Whaaa!— El horrible sonido de un llanto desconsolado, estaba ya inundado al atmósfera de la casa.

— Mira, Mira, Mira.

Chifuyu a pesar de seguir llorando solo veía como el chico agitaba el juguete que hacía el sonido de una campana delante de ella para llamar su atención. Aunque no pareciera que fuera efectivo, ella solo continuaba con el griterío.

El muchacho ya no sabía que más hacer, ya intento con ver a las necesidades básicas y aún así no había manera de Chifuyu guardara silencio.

— No te va muy bien...si llora tanto va a comenzar a dolerle ma cabeza.

— ¡Tu la conoces más! — Souta no pudo evitar exclamar eso mientras luego miraba a Sora quien tenía sonrisa en su rostro e iba sujetando una escoba.

— Estoy limpiando ¿Verdad, Yun?

— Shii — La pequeña niña que estaba a su lado levanto la mano mientras movía un pequeño trapo que  demostraba que ella también estaba siendo partícipe de eso.

El chico miró con cierta indiferencia como Sora sonreía a la pequeña que la acompañaba. Sin embargo, eso le vino a la mente algo que había visto hacer a las gemelas. Y era esa extraña "telepatía" que poseían, eran demasiado complementarias dentro de todo.

Aunque el ser muy parecidas, también provocaba una que otra pelea.

—Oye Yun ¿Sabes por qué llora tu hermana? — Con la esperanza, de la que le ha dado la sensación de que era la más calmada como comunicativa. Souta se acercó a la "encargada" de la limpieza que jugaba con Sora.

Yun inclino la cabeza ante esa pregunta y miro a Chifuyu, para sonreír y acercarse a su papá.

— Aiba~

Esa no es la respuesta que esperaba, aún así ver a Yun dar pequeños saltos y querer estar junto a Souta solo encogia más el corazón del chico y lo llenaba más de culpa.

Ya el hecho de no saber que quiere la pequeña que sigue llorando sin explicación a lo que es la gemela menor de esta ...

¿Se habrá dado cuenta que Souta no la recuerda?

Probablemente no, es una niña pequeña tanto dentro como por fuera, a pesar de que supera los límites de su físico.

En definitiva, ponrlerse a analizar a Yun, es entrar en un bug.

El chico dio un paso atrás con cierto temor o mejor dicho nerviosismo.

—¿Papá? — Yun al sentir ese rechazo por parte de Souta, sus ojos se comenzaron a inundar, mientras sus mejillas se colocaban de un color rojizo.

— No la hagas llorar también...— Sora hizo una pausa y miro en dirección al pasillo y hacia habitación que tenía unas maletas en el suelo, era obvio que tendría que desordenar un poco lo que habia ordenando.

Souta asintió y terminó por sentarse en el tatami,para que Yun se acercara a él y comenzara a jugar ya sea con sus manos o sentarse en el regazo de este.

— Juga'

El chico asintió, era algo simple y fácil de entender, otro problema más, era el léxico de las pequeñas que si no las conoces es raro saber con claridad lo que quieren. Aunque o las niñas hablan bien para su edad, o su oído físicamente no se vio muy alterada a esa habilidad.

— Ven, Chii .

Sora al ver como le fue arrebatada Yun, decidió ya por encargarse de la que aún seguía llorando, no es chiste que podría traer consecuencias a ese llanto extremo.

 Mi Pequeña Hermana Mayor Volumen 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora