Mi Pequeña Hermana Mayor Volumen 2)

Capitulo 30

Observando la ventana que estaba al lado de su pupitre, la chica dio un suspiro medio melancólico, a decir verdad es de temer lo fácil que es acostumbrarse a una nueva rutina.

Esta finalmente concentro su atención en el lápiz mientras lo hacia gitar incontables veces, no se veía que la muchacha estuviera en su mejor momento, o será que en su mente corren cien pensamientos por segundo.

Lo cierto era, que esa chica no estaría pensando en nada, y solo usaba ese tiempo en manera de relajarse, después de todo en su casa no podría tener el amado "tiempo a solas" que a cada persona le gusta apreciar de vez en cuando.

— Sora, Sora ¿tienes algo de tiempo?

La chica levantó la vista al escuchar su nombre ser llamado de casualidad, una muchacha vestida con un uniforme al estilo marinero de verano, cabello rubio y corto sobre los hombros con una extravagante cinta roja que parecían más las orejas de un conejo.

— Si, pero ...ya van a comenzar las clases ... — Un tanto confundida, mientras miraba a su compañera de clases quien comenzaba a sonreír mientras hacia el ruido de "tch, tch, tch" y colocaba uno de sus dedos alrededor de su boca.

Sora sonrió con ironía y dejó caer sus hombros, por esa actitud para Sora ya sabia a que iba todo esto. — Yuuki, sabes que no puedo...

— ¡Hasta ahí! Ahora no vengo por lo de los clubs — La muchacha rubia, nombrada Yuuki coloco su mano enfrente para evitar que Sora siguiera hablando.

— ¿Entonces?

Yuuki miró a su alrededor un tanto nerviosa y luego se acercó al oído de su compañera para susurrarle.

Sora al escuchar el supuesto rumor se sonrojo y se alejó rápidamente de Yuuki un tanto estupefacta

—¿De...de verdad? — Tartamudeo un poco, Sora trago saliva y negó con la cabeza levemente.

— Esperaba otra reacción... creo que estoy decepcionada

Sora bajó la vista, ya había pasado el último mes como la "chica nueva" y a pesar de que no le costó mucho el hacer uno que otro amigo, es un tanto extraño que alguien esté interesada en ella.

Sora se mordió el labio, una pocision complicada, además contando que el chico al que se refieren es una de las primeras personas que conoció al entrar a la secundaría.

— Tomoya es un buen chico, no creo que sea malo.

Se notaba que Sora no había comentado la otra parte de su vida, en todo caso no era algo a lo que se deba comentar, no es normal la situación en la que se encuentra.

— Lo siento, no es que que sea malo ... — Sora hizo una pequeña pausa al notar los brillantes ojos de Yuuki al verla con cierta ilusión.

Sora en ese momento solo sonrió y luego aparto la vista.

— Ya tengo a alguien.

El aire de comedia romántica se estaba volviendo cada vez más notable

— ¡¿Enserio?! ¿Como es él? ¿Hace cuánto?

Sora en verdad se sentía un tanto extraña al tener esa clase de conversación, ella sabe perfectamente que su verdadera "yo" no tiene la edad de volver a tener esas típicas charlas de adolescentes, aunque ante esa idea solo sonrio y apoyo su cabeza sobre su mano.

"De igual modo no recuerdo nada, así que no está mal"

— Tendrás que rechazar a Tomoya ... — Desanimada Yuuki trato de sentir empatía por el futuro de su pobre amigo.

Sora no respondió a eso y solo vio a la ventana, y suspiro, es cierto que ella ya tiene a alguien y más que comprometida.

La chica se detuvo por un momento, no lo había pensando de ese modo.

"Compromiso"

Con esa palabra en la cabeza, se pasó el resto del día de clases, ya no importaba que profesor ingresara a la sala y daba su lección, de seguro que Sora no le tomaría en cuenta.

La chica se planeó mucho como era su vida, más parecer una común hogareña, aunque sea en una cada de "niños"

" Compromiso"

Al volver a repetir esa palabra, despertó un poco de la nubes, y solo se percató como ya todos se estaba arreglado para irse, no se percató del momento en que pasaron las horas. La chica comenzó a guardar las cosas en su mochila rápidamente mientras se apresuraba para salir pronto de la secundaria.

— Sora ¿dónde vas?

Sora se volteó rápidamente al llegar a la entrada, esta  trago saliva al notar al muchacho de cabello negro que se veía agitado, este hizo un pequeño túnel con sus manos para hacer resonar aun más

La chica sabia que debía irse pronto, ya era parte de la rutina, el debía ir a recoger a sus "hijas", por más que no fue de selección no es que eso le molestara, aunque por la manera en paso el día si le quedo para reflexionar.

— Lo siento, Tomoya tengo que hacer.

— Esta...— El chico no fue ni capaz de terminar la oración y solo se que viendo como la chicane alejaba a toda prisa. 

—¿Qué es lo que haces todos los días...?

◇◇◇

Sora al caminar un par de metros de la guardería, poco después de haber ido a buscar a las gemelas, sintió como una de las niñas soltaba su mano y tratando de atraer su atención.

— ¡Mamá! — Yun se veía un tanto inquieta, mientras pedía que Sora le tomara en brazos, mientras estaba apunto de ponerse a llorar.

Sora al aceptar la petición de la menor de las gemelas,

La chica colocó su mano en la frente de Yun,  mientras esta intentaba apoyarse en su hombro.

— Cabeza duele...

Sora se acomodó mientras aun cargaba a la más pequeña y tomó la mano de Chifuyu, para caminar a casa.