Capítulo 45

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— Aqui es perfecto.

Sora se detuvo al escuchar la orden de Aoi, y como está daba media vuelta y sonreía al llegar a su destino.

La mayor de las chicas observo de lado a lado confundida, lo único que veía era como las hojas de los árboles volaban por el viento por la temporada otoñal, esta se metió las manos en el abrigo.

Era fin de semana, y Sora lo habia prometido, que jugaría con Aoi a solas, extraño fue el plan de la niña que dijo que quería salir.

Extraño es el lugar de la salida, mas bien, simple y frío.

— ¿Aqui? ¿segura? ¿No tienes frío...? — Ya con un tono habitual de preocupación, Sora intento plantear su inquietud. Sin embargo para los oídos de Aoi, todo eso se escucho más como regaño que de sugerencia, inflo ligeramente las mejillas, se notaba que ese comentario no fue del todo su agrado.

—¡Aqui esta bien! — La niña se cruzó de brazos para enfatizar su molestia y se dio la vuelta, aún así después hacerlo se relajo un poco dejando caer los hombros y suspiro — Creo que tomará tiempo...

Sora se encogió de hombros, solo prometió que estaría con Aoi a solas, ella menciono que "jugarían" pero ¿como se hace?, era lo único que podía pensar Sora, no era algo que ha hecho con Aoi, incluso desde antes que ella la olvidará... Aoi la odiaba en ese entonces. La chica se mordió el labio al notar su error,  quizás por eso la odiaba, por no prestarle atención.

A pesar de que en verdad ella es su hija...

Si pensaba con esa logica, ella era "hija única" y la atención en casa era toda para Aoi, ahora además de no tener una madre real, o siquiera a sus abuelos cerca, debe aguantarse la limitada atención por tener unas hermanitas muy demandantes.

Por más que piense, los problemas de Aoi o un niño en general no son menores. Es un cambio muy duro a su famila. Y más si incluso una extraña maldición ha jugado con su mente de tal forma.

— ¡¡Sora!! ¡Rápido! ¡Ven aquí!

Sora levantó la vista al notar como la llamaba energéticamente Aoi desde cierta distancia y agitando su mano en el aire para señalar y llamar más la atención de donde estaba. Aún así, de manera desanimada la adolescente continuo caminando con las manos en el bolsillos.

Aoi simplemente dejó de mover la mano, su plan va horrible, esta luego comenzó a mirar alrededor, hasta ver una pequeña irregularidad en parque, detrás de ella a unos cuantos pasos, un pequeño montículo lleno de hojas de la época, la niña sonrió con pequeña malicia y solo espero que la adolescente con alma de vieja llegara a su posición.

—¿Enserio que estamos haciendo?

Aoi solo frunció el ceño y luego tomó la mano de Sora para guiarla a cierto punto, esta luego colocó su mano sobre el pecho de la chica a su merced y le dio un  empujón.

— ¿Eh?

Ya sea por la sorpresa, esta sin ningún esfuerzo está observo a la niña quien hizo una mueca, no parecía que había sido como lo planeo al ver cómo está perdió el equilibrio rápidamente — ¿¡Espera, Aoi!? — Alterada y tratando de no caer de espalda,  esta se sujeto de Aoi rápidamente para evitar caer.

—¡¿Oye?! — Aoi al ser agarrada de la nada y viendo como su muerte se acercaba, niña en primera cerro los ojos tratando de aferrarse al piso, cosa inútil debido a la diferencia se tamaño como de fuerza.

Era inevitable.

Ambas cayeron abrazados por el  munticulo de tierra llena de hojas naranjas y rodaron hasta los pies de esta de una manera un tanto ruda, que cualquiera pensaría que esos escasos segundos de adrenalina hayan sido eterno.

 Mi Pequeña Hermana Mayor Volumen 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora